Solo contigo [2] (BILOGIA)

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Guardo las cosas mas importantes en mi pequeño bolso deportivo. No importa si dejo todo lo demás. Antes de irme, me saco el dije de Julián que tengo colgado en el cuello y lo dejo sobre la cama, esperando que cuando lo encuentre se de cuenta de que me deje ir. Bajo las escaleras lo mas rápido que puedo.

— ¡Rapido Ivanna. El taxi nos esta esperando! — Me grita Julieta.

Salimos hacia el patio. Yo cierro la puerta con llave y luego dejo el manojo de llaves escondido en la maceta que esta a un costado de la puerta. Corro hacia la reja, junto con mi amiga como si alguien nos estuviera persiguiendo. Cuando subimos el taxista nos mira de reojo y luego mira la casa con interés. Pero se limita solo a conducir. Guardamos silencio hasta llegar a mi antiguo departamento. El que compartía con Julieta. Cuando subimos, cerramos todas las puertas y ventanas con llave y seguro por las dudas.

— Todavía tienes tiempo para arrepentirte. — Me dice mi amiga mientras pone una taza de té frente a mi.

Yo niego con la cabeza.

— Sabes que enloquecerá cuando salga del hospital.

— Lo sé, mierda, lo sé.

— Bueno entonces si estas segura, dime que es lo que vamos a hacer. No tenemos mucho tiempo antes de que venga aquí a buscarte. — Me pide.

— No. — Espeto. — Tú no vas a hacer nada, yo lo voy a hacer.

Ella se me queda mirando sorprendida.

— ¿Quieres que arruine tu vida por mi culpa o que te haga daño? — Le pregunto.

— ¿Entonces que puedo hacer para ayudarte?

Me quedo pensando un segundo.

— Voy a cambiar mis horarios de la Universidad.

— ¿Y el trabajo? — Pregunta Julieta.

Me pongo una mano en la frente. Ese si es un problema. Él me encontrará, sabe absolutamente todo de mi. Entonces Julieta da un respingo.

— ¡Me olvidé de decirte! ¡Mi primo me aviso que tu jefe abrirá una nueva sucursal como a un kilómetro de aquí! ¿Por que no pides la transferencia?

Abro los ojos como platos.

— ¡¿Por que no me lo dijiste antes?! — Le grito. — ¡Mañana mismo hablare con él!

— ¿Y en donde vivirás? — pregunta ella.

— Con mis ahorros podré pagar algún departamento pequeño por ahora. Hasta que pueda conseguir algo mejor y luego veré si puedo largarme de La Plata... irme lejos. En donde él no me encuentre jamás. — Espeto.

Luego de una breve conversación con Julieta, nos acostamos a dormir. Doy vueltas casi toda la noche y me cuesta cerrar los ojos. La mirada de Julián invade mi cabeza y me cuesta dejarlo de lado.

                               ~•~

Salgo de mi trabajo con el corazón latiendo rápidamente. Miro a todos lados y no veo señal de que nadie me este esperando... okey. Todo en orden. Camino hacia la Universidad y cuando entro le mando un mensaje de texto al Benicio, el primo de Julieta. Gracias a él, tengo trabajo. Y hoy por suerte mi jefe aprobó mi pedido de transferencia hacia la otra sucursal. Ahí Julián no podra encontrarme.

Por medio de mensajes Benicio me pasa direcciones de departamentos en alquiler cerca del trabajo. Mis animos no son los mejores. Pero es ahora o nunca.

Cuando salgo de la Universidad está comenzando a anochecer asi que decido apresurarme a ver las direcciónes que me pasó. Luego de descartar el primer departamento por ser un poco caro, entro al segundo. Un monoambiente, con cama y placard incluído. Y lo mejor de todo. Especial para estudiantes. Se paga por semana y el precio es accesible.

— Me quedaré con este... — Le anuncio a la mujer que me esta mostrando el lugar.

— Perfecto. Luego de que deposites la primera semana puedo darte la llave y podrás mudarte. — Me contesta.

Sonrío con tristeza ¿En que momento mi vida de torno tan sombría?

                                ~•~

Tomo mis dos pequeños bolsos de la habitación de Julieta.

— Listo...por lo menos lo voy a intentar. Y acuerdate, te voy a llamar al teléfono fijo si necesito comunicarme contigo. — Le digo.

Ella asiente mientras me mira con preocupación ¿Que le pasa?

— ¿Que voy a hacer si Julián me exige respuestas y no se las doy? ¿Y si me hace daño?

— No... no, no. — La tomo de las manos. — Dile como habiamos acordado, luego de que me dejaras en su casa, te aseguraste de que entrara a la casa y luego te fuiste y no pudiste comunicarte conmigo.

Ella asiente.

— Espero que esto te funcione Ivanna
... cualquier cosa que necesites sabes que puedes pedirme. — Me recuerda.

La abrazo fuerte y luego me despido de ella. Antes de salir hacia el patio del complejo de departamentos, me pongo la capucha de mi sudadera y no me la saco hasta que subo a un taxi y puedo sentirme segura de que nadie me esta observando o me esta siguiendo. Espero Julián no vuelva a molestarme. Por mas que lo intentemos, su locura y la locura que lo rodean se salieron de control. Y soy consciente que toda esa mierda puede atentar contra mi vida. Jamas me habían apuntado con un arma... hasta que lo conoci a él. Si voy a morir joven, puedo asegurar que él sera mi muerte. Intento dejar un lado todos esos pensamientos mientras voy llegando a mi departamento. Pero es inevitable. Entro a el vacio monoambiente y me siento en la cama. Mi subconsciente sale en mi rescate al ver que me encuentro sola y solo puede decirme unas cuantas palabras.

"Espero por tu bien, que tu plan funcione"