Cartas a mi novia

Carta 5

Y me despierto a media noche, con ojos llorosos, cabello revuelto y el corazón tan agitado que lo sentía casi salirse. Busco entre la penumbra de la noche mi móvil y no paro hasta tenerlo entre mis manos. Comienzo a temblar y la boca se me seca haciendo imposible tragar saliva en ese momento. Busco su número entre todos mis contactos hasta que por fin lo encuentro, le marcó hasta que escucho su voz adormilada que hace un eco en su voz.

- ¿Qué pasó?

Su voz me tranquiliza y por un segundo se me olvida el porqué de interrumpir su sueño. Y es entonces cuando me la imaginó tras el móvil, medio despierta, medio dormida, con un gesto de sueño en la cara. Me tranquilizó y sonrió antes de comenzar a hablar.

Me regaña por marcarle y asustarla por pensar que algo me había pasado, le cuento mi pesadilla y el horrible sueño que me atormentaba. Con voz tranquila me dice que todo va a estar bien, que sólo fue un sueño y que no va a pasar a ser real, que las dos estaremos juntas por que nuestro amor es mucho más fuerte que todas las envidias, celos y odio que puedan tenernos.

Mi corazón agitado por fin se calma al escuchar sus palabras, por que ese es el poder que ella posee sobre mi, puede calmarme y tranquilizarme con unas simples palabras. A pesar de nuestras diferencias de edades puede ser muy madura cuando quiere y se lo propone y sobre todo cuando no pierde la cabeza estando tan molesta y enfadada. Puede llegar a sorprenderme con cada acto o cada palabra que ella me dice y estoy segura que nunca va a dejar de sorprenderme.

Antes de colgar y despedirme sonrió tras la pantalla diciendo lo siguiente;

-Espera, quería decirte otra cosa

-¿A estas horas?

-No podría esperar más

-Pues dime

-Que TE AMO PRINCESA