Capítulo 16

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Y sus ojos se volvieron a cerrar. No entendía lo que estaba pasando pero al parecer ella sí. Y ella es la doctora, así que no me quedó de otra más que hacerle caso. Además, me estaba preocupando en exceso el hecho de que no reaccionaba. Al legar al hospital, su amiga Regina (Marisol del Olmo) estaba de guardia. Y recién llegaba a recepción. No me di cuenta que comencé a gritar hasta que ella volteó exaltada- ¡Ayuda, por favor!

Regina:- corrió hacia mí- ¡Una camilla!- le gritó a la enfermera- ¿Qué le pasó?- le tocó la frente y después presionó dos de sus dedos en el cuello- Tiene el pulso muy débil. ¿Qué pasó?- ¡La camilla, carajo!

Aún no reaccionaba hasta que la vi mirándome fijamente- Yo... no sé... sólo... -mi voz se quebró- estábamos cenando y se desmayó- me acerco la camilla y la recosté allí-

Regina:- No te preocupes. Estará bien- me dio una sonrisa intentando calmarme. La llevaron en la camilla y a través de unas puertas, lo que me obligó a separarme de ella. Estaba demasiado preocupado y los segundos parecían horas. Esa sala de espera me comenzaba a parecer cada vez mas pequeña... Pasaron cuatro horas hasta que vi a Regina salir de las puertas por donde metieron a Andrea. Rápidamente me acerqué

Max: Por favor... dime que esta bien- le supliqué-

Regina: La cirugía fue bastante complicada. Perdió mucha sangre - -

Max:- - la interrumpí- - ¿Sangre? ¿Cómo es eso podoble? ¡No estaba sangrando cuando la traje aquí!-  exploté-

Regina: ¿No... no sabías?

Max: ¿Saber queee?- miré hacia arriba a la vez que estiraba los brazos a los lados y los dejaba caer en un gesto de desesperación-

Regina: Ella...- titubeó- tenía una hemorragia interna- -

Max: ¿Y que se lo causó?- - volví a interrumpir- -

Regina: Ehh...- lo pensó un poco- Su menstruación?... No lo sé- pareció dudar- En fin, cuando la trajiste, ya había perdido mucha sangre. Por suerte, logramos detener la hemorragia a tiempo. Esta en estado crítico... las siguientes 24 horas serán cruciales. Hay que ver como reacciona a la transfusión, si su cuerpo no lo rechaza. En este momento está en terapia intensiva... Max, te recomiendo que vayas a tu casa a descansar. Mañana vuelves, si? De igual forma no podrás entrar a verla esta noche- me regaló una sonrisa forzada- Anda, ve a tu casa. Cualquier cosa, te aviso.

Sólo fui capaz de asentir con la cabeza. Me di media vuelta lentamente. Comencé a caminar para salir del hospital y encaminarme a mi auto. Quería que me fuera a descansar. ¿Cómo iba a descansar si no había un solo rincón de esa casa que no me recordara a Andrea? ¡Maldita sea! Desde que llegué ella estaba extraña y no fui capaz de darme cuenta de eso. ¡¿Qué clase de amigo soy?!

Narra Regina:

Max se fue completamente fuera de sí. En verdad le dolió lo que le pasó a Andrea- resoplé y negué con la cabeza- Me va a oír. ¿Cómo fue capaz de hacer esto? Es la primera vez que mentía en mi trabajo y me dolió en el alma. Ver a Max completamente destrozado tocó una fibra delgada en mi corazón. Él se preocupa tanto por ella y la quiere tanto... pero ella le miente- negué con la cabeza de nuevo- "Ay, tambien yo ¿qué le ando haciendo caso?"- dije en voz alta- "Pero Bueno, ya lo hice y en cuanto se le pase el sedante a Andrea, me va a oír y me tendrá que dar muchas explicaciones." La cirugía en verdad no fue tan complicada. En una hora terminamos todo. Pero en cuanto se le pasó la anestesia, tuvo una pequeña crisis de ansiedad así que le apliqué un sedante. En menos de una hora despertaría. Sólo me quedaba esperar...

Narra Max:

Llegué directo a mi cama. No podría dormir de eso estaba seguro. Tampoco iría al bufete mañana. Tenía que quedarme con Andrea y asegurarme de que estuviera bien antes de que otra cosa sucediera. Tal vez mi papá podría ir. Sólo por un día. Ya veré que hago, pero a Andrea no la voy a dejar sola. Comenzaba a sentir esa sensación que me llegó cuando Adriana estaba en una situación similar y la verdad me preocupaba. Eso no podía ser nada bueno. Pero tenía fe en que estaría bien. Tenía que estarlo. Por su familia, por su brillante futuro. La conozco y no es de las que se da por vencida así de fácil. Su fe en Dios y en la Virgen de Guadalupe no la dejaban. Seguramente ella tenía la certeza de que esto sería sólo una pequeña tormenta. Y ella tenía su refugio que nunca la abandonaba. Ahora yo debía tener esa seguridad y estar tranquilo. Aunque muy dentro sabía que no podría. Debía ir a ese lugar que a Andrea le traía tanta paz. Y al que ella me acerco con la esperanza de que hiciera lo mismo conmigo. Me puse de pie, y como no me había cambiado, tomé mis llaves y salí de la casa. Conduje por unos pocos minutos hasta que llegué. Me bajé del carro y me dirigí a la entrada. Afortunadamente me encontre con las puertas abiertas. Al abrirlas, rápidamente el humo me llenó los pulmones. Cerré los ojos y respiré profundo. Deje que ese humo inundara mis pulmones y mi cerebro. Tenía su nombre. Andrea me lo había dicho en repetidas ocasiones. Pero como no venía seguido, lo olvidaba. Al abrir mis ojos nuevamente me percaté de lo bonito que era ese lugar. Más de lo que recordaba. Por eso Andrea amaba venir aquí. No me percaté de que había alguien a mi lado hasta que sentí un peso en mi hombro. Salí de mis pensamientos y volteé a la dirección de la que provenía ese peso. Fue cuando pude darme cuenta que me estaba hablando.

¿a dónde habrá ido Max? 🙊🙊 Gracias por leer! Espero que hayan disfrutado este capítulo. No se olviden de Comentar!!! Me gusta saber lo que piensan y si hay forma en que puedo mejorar o que les gustaría ver más adelante. Todavía la estoy escribiendo y la verdad es que estoy publicando más rápido de lo que escribo  (le que les ha de parecer super lento porque tardo en subir y de nuevo les pido disculpas por eso). Pero no importa. Estoy segura que no tendré que parar porque no tengo nada escrito. En fin, espero que les haya gustado y pronto subiré el que sigue. Buenas noches!!

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