Cuando No Es Como Debería Ser...

Capítulo 27

Primero que nada, les quiero ofrecer una disculpa. Tuve un pequeño accidente la semana pasada (nada serio, gracias a Dios) y se me complicó la subida de cap. Entonces, aquí les traigo este y más tarde un bonus (estén pendientes que puede no ser de está historia) Gracias por su paciencia y disfruten su lectura

Andy: No, Adriana. No lo es - volvió su mirada hacia mi- y por eso no quiero que lo vuelvas a repetir, ¿entendido?

Adri: Sí, lo siento- agaché la cabeza y un silencio incómodo se instaló en el cuarto. Hasta que me acordé de una cosa_ Bueno, me llamaste, ¿segura que todo está en orden?

Andy: Sí, todo bien – bajó la defensa. ¡Bien Adriana! – sólo… no quería estar sola – agachó la cabeza – sé que tienes cosas que hacer… incluyendo la uni, pero… --

Adri: Pero nada - - la interrumpí- - Me da gusto que me hayas llamado. Pero dime, ¿Cuándo te dan el alta?

Andy: Hasta dentro de una semana. Quizá más, dependiendo como responda mi cuerpo al tratamiento y bla, bla, bla – sonrió—

Adri: ¡Cielos! Menos tiempo del que pensé – saqué mi celular y me puse a buscar departamentos. Tomó quince minutos a Andy antes de que me cuestionara. Debo admitir que aguantó

Andy: Mmm ¿menos tiempo para qué? ¿Y que tanto haces en tu cel? – preguntó de vez. Rompió récord–

Adri: Menos tiempo para buscar un depa y busco y depa

Andy: Oh… oye, ¿te puedo pedir un favor? – me preguntó dudosa. Asentí sin dejar de ver mi teléfono - ¿Puedes buscar a alguien para que limpie mi antiguo departamento? Quiero ponerlo en renta lo más pronto posible

Adri: Pensé que querrías venderlo – la volteé a ver sorprendida –

Andy: Pues... decidí que mejor no. Así tendré una entradita de dinero y te podré ayudar con los gastos del que piensas comprar.

Adri: - rodé los ojos. No iba a aceptar una negativa de mi parte y yo lo sabía – No te preocupes. Buscaré quien lo limpie – regresé la mirada a mi cel. Después de otros quince minutos habló de nuevo –

Andy: ¿Cómo está Max? _ preguntó sorprendiéndome

Adri: - la volteé a ver – Está bien, aunque molesto. Pero está molesto por estúpido. De igual forma le dije que hablara contigo. Porque, no te conté, pero Regina le habló con pistas, que él malinterpretó y de ahí saco lo de tu supuesto novio – me reí –

Andy: A ver… ¿Cómo? – me miró confundida y me reí de nuevo

Adri: ¡Sí! Mira, regina intento explicarle a Max lo que te pasó, sin decirle nada de Guillermo. Pero, le dio simples pistas. Le dijo que el sangrado se debía al equivalente de relaciones sexuales fuertes y los dolores a las secuelas – solté una carcajada – y Max pensó que tenías novio y que habías tenido relaciones con el antes de que Max volviera – ambas reímos de nuevo

Andy: Cielos, siempre supe que Max tenía imaginación, pero debo admitir que esta vez me sorprendió – ambas reímos una vez más

Adri: Lo sé. Intente convencerlo de hablar contigo y creo que lo dejé contemplando muy seriamente esa opción – sonreí volviendo a mi cel –

Andy: Yo… en verdad quiero decirle todo. Como dijo Regina, él tiene derecho a saber… sólo – pausó por unos momentos – Me da miedo que intente denunciarlo porque prometió hacerle daño si lo hacia

Adri: No te preocupes. Creo que no puede hacerlo si tu no quieres. Vivía quejándose de eso. Los padres o familiares de victimas iban a denunciar, pero no proseguía porque ellos no eran los afectados ni lo serían en hipótesis alguna. Él no puede denunciar por ti… - pensé un poco – Al menos que… - guarde un largo silencio, recordando la única situación en la que Max podría tomar cartas en el asunto

Andy: ¿Al menos de que, qué, Adri? – dijo trayéndome a la realidad

Adri: Al menos que yo viva contigo. Pero si le explicas lo que de verdad sucedió, él no tendría por qué correrte de su casa y entonces sí estará atado de pies y manos – sonreí satisfecha

Andy: ¿Estas cien porciento segura, Adriana? – me preguntó dudosa

Adri: Bueno, cien porciento no, ya ves que no se tanto así de leyes, pero recuerdo muy bien que de eso se quejaba Max – me miro insegura – Digamos que estoy un 95% segura. Pero, bueno, no nos adelantemos, ¿sí?

Andy: No lo sé, Adri. No quiero poner en peligro a Max

Adri: Tranquila. Estoy segura de que no hará nada que tu no quieras

Andy: No. Yo sé que no, jamás lo haría, pero tú sabes lo terco que puede llegar a ser, y lo débil que soy cuando se trata de él

Adri: Sí, lo sé – respondí insinuosa, recibiendo una mirada de reproche de Andy, cuando la puerta se abrió de golpe. Ambos volteamos sobresaltadas y sorprendidas de verlo ahí.