Narra Max:
Max: ¿Me piensas decir qué pasó o le pedirás a Regina que siga mintiendo para ti?- su mirada se tornó obscura. Estaba preocupada y entiendo porque- ¿Qué pasa? ¿Ya no confías en mi?- sus ojos se humedecieron un poco-
Andy: Claro que confío en ti, Maximiliano. Es sólo que...no me sentiría agusto hablando de esto contigo. Regina ya te tuvo que haber explicado. Por favor no me pongas en esta situación incómoda- desvió la mirada. En verdad estaba incómoda-
Max: De acuerdo. Sólo quiero que sepas que no me lo creo- agachó la cabeza- Pero mejor dime ¿Qué tal te caería una visita de Adriana?- rápidamente volvió su mirada a la mía-
Andy: Preferiría que no. No me gustaría queme viera así
Max: Pues, siento decirte que no tienes opción. Ya viene en camino. Me llamó hace rato diciéndome que se quedó dormida y que la llevara a la universidad. Cuando le dije que estaba en el hospital, y porque, me dijo que o le mandaba un uber o tomaba un taxi- sonreí- No me quedó de otra más que mandarle un uber
Andy: Pues ya que- cerró los ojos y aventó la cabeza hacia atrás-
Max: ¿Qué pasa? ¿Te duele algo?- me preocupó su ceño fruncido-
Andy: Llama a Regina por favor...Sólo... llámala
No pude más que asentir y apresurarse a hacer lo que me pidió. Su expresión me preocupó. Antes de que saliera, sus labios se estaban tornando azules. Corrí a recepción y fue ahí donde la encontré. Hablaba con una enfermera pero no me importó.
Max: ¡Regina!- me acerqué y ella inmediatamente volteó- Es Andrea. No se que le pasa. Se empezó a sentir mal y sus labios se comenzaron a tornar azules- me pase las manos por el cabello-
Regina: Esperame aquí, no te muevas- comenzó a ir hacia el cuarto de Andrea muy apresurada
Max: ¡¿No puedo ir?!- sólo ubtive una respuesta negativa-
Dios, ¿Qué estaba pasando? Parecía que en vez de mejorar sólo iba empeorando constantemente- me senté un una silla, apoyé mis codos en mis rodillas y mi cabeza en mis manos-...Narra Andrea:
Ya que Regina me dio medicamento para el dolor y que me había hecho un ultrasonido, estaba delante de mí, explicándome cosas que ya sabía. No supe cuanto tiempo pasó. Si no fuera por los tratamientos y exámenes pensaría que no habían pasado más de cinco minutos. Pero habían pasado mínimo veinte. Dejé que mi mente volara hasta que escuché a Regina decir algo de bebés.
Andrea: Espera, ¿qué has dicho?- mi corazón se empezó a acelerar-
Regina: Que si no tomas el tratamiento correspondiente, no podrás concebir algún bebé...jamás...¿Entiendes lo que te digo?
Andrea: No. Tú eres la ginecóloga, no yo
Regina:- suspiró y agachó la mirada. Después la regresó a mí- Andrea, esta vez la violación fue mucho más seria, más... peligrosa....lastimó tu útero, por eso el sangrado. Esta demasiado dañado por eso el dolor vuelve constantemente. Si no empiezas el tratamiento pronto... no podrás quedar embarazada- sentí como si me hubieran sacado el aire de un golpe. No podré ser mamá... Eso se repetía constantemente en mi cabeza. Pero Regina me llamó- ...te hicimos varias pruebas y encontramos restos del ADN de Guillermo en ti. Con eso, más los resultados de las pruebas de tu aparato reproductivo...lo puedes meter a la cárcel por años--
Andrea: ¡No!- me negué rotundamente-
Regina: ¡Estarías a salvo Andrea!- pareció desesperarse-
Andrea: ¡No! ¡No lo estaré! ¡Ni yo ni Maximiliano!
Regina: Andrea,... eso no lo sabes
Andrea: ¡Sí, sí lo sé!- me exalté- ¡Tiene contactos Regina! ¡Muchos contactos! Con sólo mover un dedo- pase mi dedo horizontalmente por mi cuello- nos desaparece del mapa. No puedo permitir que personas inocentes mueran por mi culpa... no puedo
Regina: Andrea...- se acercó y tomó mi mano- No puedes seguir así. Vivir con miedo no es vivir, Andrea.
Andrea:- las lágrimas comenzaron a salir sin control- Tengo miedo Regina. Miedo de que me pase algo...de que le pase algo a Max.
Regina:- apretó mi mano con fuerza- Lo sé Andy, lo sé. Pero me tienes a mí, a tu hermano...a Max. Y sabes que no te vamos a dejar sola. Tenlo por seguro
No pude más que llorar. Estaba aterrada. No quería poner en peligro a nadie. Mucho menos a Más. No lo merecía y se lo hice saber
Andy: Es que... no es nada más eso, Regina... es Max. Él ya tuvo que aguantarme con secuelas de violación y no merece volver a pasar por lo mismo
Regina: Andy, hay algo que tienes que saber- dejé de sollozar por unos momentos - Él...cuando decidió llevarte a vivir con él...sabía que esto podría pasar que...Guillermo podría volver a violarte. Y aún así quiso hacerse cargo se ti. ¿Crees que si él no quisiera pasar por eso de nuevo te hubiera llevado a su casa? ¿Hubiera corrido ese riesgo? ¿Crees que aún te hubiera en su casa?- volvió a apretar mi mano y me miró con ojos alentadores- No Andy. No estaría aún contigo
Andy: Es diferente. No me correría de si casa ahora. Es demasiado bueno
Regina: Andy, no me estás entendiendo. Él sabía que cabía una posibilidad de que Guillermo te violara de nuevo. Y sabía que si eso pasaba, él sería tu pilar. ¡Él sería quien hiciera cargo de ti! ¿Te das cuenta?- negué con la cabeza a la vez que volvía a sollozar- ¿Se lo dirás?
Andy: No lo sé- susurré antes lágrimas. Regina me abrazó fuertemente-
Regina: Se lo tienes que decir, Andy. Es lo mejor... Además, ¿cómo le vas a explicar del tratamiento que tienes que empezar, mm? ¿Qué le vas a decir al respecto?
Andy: ¡No lo sé! Le diré que conocí a alguien. Que me enamoré pero...que no puedo tener hijos, o yo que sé. Hay millones de excusas que puedo usar
Regina: ¿Y seguir mintiendole?- se separó de mí- No Andrea, eso sí que no es justo. No merece que le digas mintiendo. Y si tú no se lo dices, le diré yo
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Cuando No Es Como Debería Ser...
RomanceElla no creía en el amor, pero el destino tiene otra cosa preparada para ella. ¿Sera capaz de aceptar y afrontar lo que venga? ¿O preferirá ignorar todo eso que es tan obvio para todos menos para ellos dos?