Capítulo 18

108 16 3
                                    

Andrea: No me voy a casar
Regina: No decías eso cuando estábamos en la escuela de medicina
Andrea: Porque eran otros tiempos, y estaba cegada por Guillermo. Pensé que era el amor de mi vida... Pero de algo sirvió. Me demostró que el amor no existe para mí. Que en mi destino no está el casarme. Lo único que estoy esperando es que Maximiliano vaya en serio con una mujer para que se ponga celosa, le exija me corra de su casa y así poder llevarme mis problemas lejos de él. Para que no corra ningún peligro.
Regina:- se sentó en la cama y me tomó la mano- Claro que el amor existe para ti. Existe para todos. Y no se trata de que te alejes de las personas que te quieren y que tu quieres. Se trata de luchar para defenderte y enfrentar tus problemas buscándoles una solución
Andrea:- no pude más y dejé que el llanto de apoderara de mí- Es que... tengo miedo, Regina. Miedo de que cumpla su amenaza. Miedo de que regrese y me vuelva a hacer daño. Miedo de no poder ser feliz
Regina:- apretó mi mano con fuerza- Lo sé, Andy. Pero no puedes vivir huyendo. Ni te la puedes pasar pegada a Max porque tarde o temprano va a llegar una mujer con la que él querrá pasar el resto de sus días. Y no creo que le agrade mucho la idea de que vivas con ellos. Nicolás está próximo a casarse y tu papá es un hombre mayor. No te queda de otra. Y sabes que puedes y podrás contar con Max para todo
Andrea: No lo Regina- sollozé fuertemente- ¡No lo sé!
Regina:- me abrazó- Hazlo, Andy. Tienes que deshacerte de este problema lo más rápido posible. Y ambas sabemos cuál es la única solución- sollozé y lloré por un rato más mientras ella me abrazaba- Sabes que podrás contar conmigo y con Max para todo
Andy: Lo sé, pero... tengo mucho miedo
Regina: Lo Andy- guardó silencio por unos momentos- Mira, será mejor que descanses. Aún es de madrugada. Intenta dormir

Narra Max:

Voltee a ver el reloj por enésima vez en toda la noche. La una de la mañana ¡Maldita sea! No había podido dormir aún después de la pequeña oración que hice por Andrea. Y no creo poder. Me puse de pie y me vestí, tome las llaves del carro y me dirigí al hospital. Si no iba a poder dormir, por lo menos estaré al tanto de Andrea. Después de unos minutos-los cuales se me hicieron eternos- llegué al hospital. Entré y vi a Regina en recepción así que la llamé. Me miró algo confundida, pero se acercó.
Regina: Max, ¿qué haces aquí? Te dije que--
Max: Yo sé lo que me dijiste- la interrumpí- Pero es que no puedo dormir así que decidí mejor estar al pendiente de Andrea. Por favor, déjame quedarme
Regina: Está bien, pero como aún no la pasamos a piso, te tendrás que aquí, en la sala de espera
Max: Sí, sí por mi no hay ningún problema
Me dedico una sonrisa tranquilizadora, a la cual correspondí y me senté en una silla. Estuve de arriba para abajo hasta que amaneció. O al menos eso pensé. Empecé a escuchar un sonido muy molesto. Los párpados me pesaban. Entonces caí en cuenta que me había quedado dormido. Me enderecé y busqué mi teléfono. Leía:

Llamada entrante:
Adriana

Presioné el botón verde y pise el aparato en mi oído.
Max: ¿Bueno?- tallándome los ojos con la mano que tenía libre-
Adriana: ¡Milo! ¡Necesito que me hagas un favorsote! Me quedé dormida y mi carro está en el mecánico... ¿Me llevas a la uni?
Max: No puedo, Adri, lo siento. Estoy en el hospital
Adriana: ¿Qué te pasó? ¿Estás bien?- preocupada-
Max: Yo estoy bien- respiré profundo- Es Andrea. Anoche se desmayó mientras cenábamos. Al parecer fue una hemorragia interna
Adri: ¡Por Dios! ¿cómo está? ¿Qué te han dicho?
Max: Hasta ahora no hay noticias. Sólo se que está en terapia intensiva y que las siguientes horas serán cruciales
Adriana: No puede ser... pídeme un uber voy para alla
Max: Nada de eso. Tú tienes que ir a la universi--
Adri: ¡Lo sé!- me interrumpió- Pero no me voy a quedar de brazos cruzados sin saber nada de ella. Así que pídeme un uber o me voy en taxi
Max:- suspiré resignado- Está bien. Ahorita te mando un uber
Colgué y me pedí el uber. No me quedaba de otra. Era capaz de venirse caminando así le tomara todo el día. Busqué a Regina con la mirada pero no la pude encontrar, así que hundí mi cara en mis manos.  Después de unos minutos, sentí una mano en mi hombro
Max: ¿Cómo está? ¿Ya está en piso?- pregunte en cuanto la vi-
Regina: y de hecho ya despertó. ¿Quieres pasar a verla?
Max:- me puse de pie rápidamente- por favor
Sólo asintió y me dijo que la siguiera. Entré solo a su cuarto. Regina me dejó en la entrada. Me acerqué un poco y pude ver que seguía un poco pálida. Parecía dormir plácidamente cuando su ceño se empezó a fruncir. Se removió un poco y después despertó sobresaltada. Me vio y me sonreí
Max: ¿Cómo te sientes, Andy?- me acerqué y tomé su mano-
Andy: Mejor, gracias- correspondió a mi sonrisa-
Max: ¿Me piensas decir qué pasó, o le pedirá a Regina que siga mintiendo para ti?

Lo sé, no tengo perdón ni mucho menos excusa 😥 sólo les puedo pedir una disculpa pero la escuela me ha tenido demasiado absorbida. Bueno, lo más pesado ya pasó y espero tener un buen de rato libre para subir más seguido. Intentaré subir lo que llevó escrito hasta ahora para después dejar de escribir en papel para después publicar. ¿Es raro que sin saber a dónde irá la historia ya tengo el final? Lo escribí hace unos días cuando no tenía Internet 😂😂 en fin, les pido una disculpa del tamaño del mundo a la décima potencia y espero que hayan disfrutado el cap. Gracias por leer y recuerden que los comentarios siempre son Bienvenidos! ♡ ah y disculpen los errores plis! 💜

Cuando No Es Como Debería Ser...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora