10.

620 51 1
                                    

Amigos.

Después de un rato de pláticas y risas, Taehyung y yo nos dimos cuenta de que nos habíamos acabado nuestros helados. Así que decidimos irnos del establecimiento.

Ni bien cruzamos la puerta mi teléfono sonó indicando una llamada. Conteste.

-¿Si?

-¿Lina?

-¿Jason? ¿Que pasa?

-¿Ya lo encontraron?

-¿A quien?

-¿Como que a quien, tonta? A Jungkook.

Abrí los ojos con sorpresa y rápidamente dirigí mi mirada a Taehyung, él ya me estaba mirando.

-¡Oh, claro! Si, Jungkook. No lo hemos encontrado. Su casa está vacía.- mentí. La cara de Taehyung transmitía culpa.

-¿Segura?

-Si.

-¿Todavía estás en su casa?

-Si.- trague saliva.- Pero te digo que no hay nadie, si quieres volvemos a fijarnos.

-Que cosas.- soltó una risa.- yo pensé que mentias, es que desde el lugar donde estoy se puede ver a una muchacha igualita a ti y otro muchacho a un lado de ella igualito a Taehyung.

Me quedé inmóvil y lentamente voltie la cabeza para buscar a Jason. Cuando lo visualice me saludo con una sonrisa burlona del otro lado de la calle.

-Eres una mentirosa.


Jimin llevaba más o menos unos 20 minutos regañandonos sobre lo malos amigos que éramos. Pero aunque estaba bastante enojado no  podía evitar que me diera risa el tono grueso de voz que usaba porque su típica voz chillona no cambiaba, al contrario se oía más graciosa.

-No lo puedo creer.- soltó con dramatismo.

-Jimin no es para tanto.- bufo Taehyung mientras hacía un mohin restándole importancia.

-¿No es para tanto? Tu fuiste el que se empezó a preocupar por nuestro amigo, fuiste el primero que hizo esto de comenzar a buscarlo, casi lloras cuando creaste ideas en tu cabeza diciendo que Jungkook había muerto y ¿No es para tanto?

Jimin nos había traído a jalones a la casa de Jungkook, pero está seguía vacía y sin un alma a la vista. Nos dijo que tendríamos que meternos para investigar y conseguir una pista que tal vez había dejado su amigo al desaparecer.

"Espera un momento".

Esa cabellera yo la conocía, mire de nuevo la ventana de esa casa y observé cómo está se movía y una cabellera castaña tipo coco se paseaba por ella con total tranquilidad.

-Maldito.- dije en voz alta atrayendo la atención de los tres chicos detrás mío.

-¿Que pasó Lina?

-¿Ustedes tienen la llave de la casa de Jungkook?.- pregunté sin mandarles una sola mirada. Yo solo tenía ojos para esa ventana con cortinas azules.

-Si.- respondieron al unisono.

-Abran la puerta.- mandé mientras me acercaba a esta. Taehyung rápidamente las saco del bolsillo de su pantalón. Las tomé y sin más preambulos la abrí.

Con rapidez corrí a las escaleras y subí hasta llegar a una puerta que tenía escrito "JK".- Que fácil.- la abrí y el cuerpo inerte de Jungkook  acostado en su cama fue lo que me recibió. Estaba durmiendo.

Los otros tres llegaron detrás mío y se sorprendieron al ver lo que yo estaba viendo.

-Por supuesto que no había nadie en casa.- hablé enojada.

Con cuidado me acerque y me senté a un lado de él, se veía tan tranquilo durmiendo que incluso daba paz verlo de esa manera. Hasta dormido se veía bien.

-¡Despierta insecto!.- lo comencé a sarandear sin una pizca de remordimiento.

No tardó mucho en reaccionar y de un salto se sentó en su cama. Miró a los tres que estaban detrás mío y después me miro a mi.

-¿Lina?

-Te estuvimos buscando por todos lados.- le di un golpe en el brazo.- me tenías preocupada.- bueno en esa parte mentí, no lo estaba sabía que él estaba bien pero aún así quise darle dramatismo a mis palabras.

De repente se me fue encima y me abrazó igual ( o incluso más fuerte) que la última vez en el salón. Me mecía mientras acariciaba mi cabello con ternura. Mi cuerpo estaba paralizado.

-Sabia que me buscarias.- comento de la nada.- Tú siempre te preocupas por mí. Estuvo bien hacer esto, me demostró que enserio te importo.

-¿Que?.- lo miré mientras me alejaba de él.- entonces todo este tiempo estuviste aquí en tu habitación simplemente porque querías que te buscará.

-No y si.- enarque una ceja.- me había lastimado mientras andaba en patineta y por eso no fui dos días a la escuela, pero después se me hizo buena idea eso de desaparecer y que me buscarás.

-¿Y tu mamá?.- intervino jimin.- le tratamos de marcar varias veces y no contestaba.

-Salio de viaje y dejó su teléfono aquí.- me miró y sonrió bobamente.- ven aquí.

Y me volvio a abrazar, no me negué ni rechiste, estaba bastante agotada, estresada y cansada física y mentalmente como para negarme a que su cuerpo con olor a recién bañado me abrazara.

-Jeon Jungkook.- pronuncie su nombre para llamar su atención.

-¿Si?

-Te detesto.- soltó una risa.

-No es cierto.- se acercó a mi oído.- Tú me quieres.

¿Como alguien tan perfecto como él podía ser tan insoportable?

Little Boy -JK- Donde viven las historias. Descúbrelo ahora