Ilusiones rotas.
Mantuve la mirada intacta sobre la pantalla por lo que fue al menos 15 minutos. Parpadear me costaba un tanto pero tenía que aguantar lo más que pudiera.
-¡Gane!.- solté un grito con entusiasmo. Jimin bufo y Taehyung solo soltó una pequeña sonrisa.
-No se vale.- rechisto el de pelo negro.
-Claro que si vale.- le saque la lengua y seguí festejando mi victoria.
-Ahora es el turno de Taehyung.- señaló Jimin mientras el otro le lanzaba una mirada de odio.
-Te toca Tae.- lo anime a que se sentará junto a mi pero el negó y se trató de distraer en su teléfono.
-¡Que aburrido te has vuelto Taehyung!.- asentí de acuerdo al comentario de mi otro amigo, el mencionado rodó los ojos y sin ganas se levantó del sillón donde se encontraba sentado.
-Voy al baño.- dijo con cansancio y se encaminó hacia el pasillo de mi casa.
-Ha estado muy raro.- mencionó Jimin una vez que ya no vimos rastro de Taehyung. Asentí y solté un suspiro.
-Si, cambio mucho desde la vez que les conté sobre mis sentimientos hacia Lina.- la cara de Jimin cambio drásticamente.- ¿Crees que hice algo malo para que él se volviera así?
Se quedó en silencio y bajo la cabeza, estaba nervioso y movía con mucha rapidez sus dedos. Tosió y me miró con una sonrisa.
-No creo.- negó tratando de darme calma.- Apuesto a que tiene problemas en casa y por eso se ha comportado de esa manera.
-Pero somos sus amigos, debe confiar en nosotros y contarnos sus problemas ¿No es así?
-Si Jungkook, pero date cuenta que hay cosas que a veces no es bueno contar, ya sea algo personal o algo que afecte a las personas que te rodean.
Sus palabras no me ayudaron y decidí abandonar esa plática que no entendía. Mejor preferí contarle lo que me había pasado el fin de semana. El beso de Lina, siendo más específico.
"¿Cómo debo decírselo?".
-Bese a Lina.- solté de golpe.- Bueno ella me besó a mi.
-¿Que?.- su cara palideció.
-Lina me beso.- repetí con alegría.
-En la mejilla...
-No, en los labios Jimin.- me sentía como una chica al hablar de eso con mi amigo, estaba tan contento.
-Pero como...
-No lo sé, solo me besó y ya.- lo tome por los hombros.- Jimin, le gusto a Lina.
Un golpe en seco me hizo dar un pequeño salto en mi asiento, voltie la mirada y me topé con la cara de sorpresa de Taehyung, había dejado caer su celular al piso. Él me observó un rato y después tomó su móvil.
-Lina lo hizo por lástima.- soltó de repente y me tense.
-¿Que?
-Lina, el beso.- rechisto la lengua.- Lo hizo por lástima.
Negué con la cabeza y me levanté del sofá para encararlo.- No es cierto, como puedes decir eso, ella...- me interrumpió.
-¡Jungkook reacciona!.- su grito me sorprendió.- Ella no te ama, jamás lo hará porque lo único que siente por ti es LAS-TI-MA.
-Taehyung creo que no es necesario...
-No Jimin.- lo interrumpió también.- Él debe crecer y empezar a ver que no todo es color de rosa.- me miró.- Conozco a Lina y se que ya la tenías harta y por eso fue que te beso, solo para que la dejaras en paz y con eso dejaras de joderle la existencia... ¿Acaso creíste que acosandola toda las putas semanas te iba a servir para que ella cayera rendida a tus pies? Porque te digo que eso es bastante estúpido.- me miro de pies a cabeza.- Aparte de que eres un simple chico inexperto que jamás en su vida había dado un beso y que es virgen hasta las neuronas.
Las lágrimas se había escapado de mis ojos y no pude evitar soltar sollozos por las palabras de Taehyung, él paro de hablar y pareció darse cuenta de lo fuerte que había Sido, pero demasiado tarde. La culpa en sus ojos hizo que saliera corriendo fuera de mi casa y yo me quedara tirado en el piso con Jimin abrazándome tratando de calmar mi dolor.
