La mayor parte del tiempo, el amor no es perfecto, no es color rosa, no provoca mariposas en el estómago, no dura por siempre. ¿Cómo te enteras de todas estas cosas? Cuando alguien te decepciona, cuando ves tu cuento de hadas derrumbarse justo frent...
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(Foto de Christopher)
-Entonces, él esperó la oportunidad perfecta para decirte que quiere quitarte a la niña y dejarte sola a tu merced, mientras que él se queda con la familia perfecta que algún día te prometió... Eso es... Muy ocurrente.
Isabella suspiró, tapando su rostro con ambas manos.
-¿En qué pensaban Annie y tú cuando lo invitaron? ¿Qué nos miraríamos a los ojos y saldrían fuegos artificiales? ¿Qué viviríamos felices por siempre? Te tengo una noticia, Marianela. Eso no ocurrirá. Cuando decidimos separarnos, nosotros...
-"¿Decidimos?" -Preguntó Marianela haciendo comillas con sus dedos-. ¡Fue él quien prefirió su carrera antes que una familia! Fue él a quien no le importó una mierda si tú no cumplías tus sueños, Isabella...
-¡Exacto! Entonces, ¿por qué lo invitaste?
Su hermana se calló por varios segundos, mordiendo el interior de su mejilla.
-Annie pensó que sería una buena idea. Esto lo planeó antes de que él se comprometiera. Annie ni siquiera esperaba a que él llegara con la modelo... Nada ocurrió como ella esperaba.
Algo llegó de pronto a la cabeza de Isabella. Había algo mucho más grande que solo invitar a Christopher a la cena, una razón oculta, la cual ella quería saber con urgencia. Sabía que era algo importante.
-Yo... Ella... ¿Te dijo algo? ¿Algo de lo cual deba preocuparme? Porque me parece que sí.
Marianela se quedó en silencio, mirando sus dedos unos segundos, jugando con ellos. Subió la cabeza, su expresión preocupó a Isabella.
-Ella quiere una familia, hermana. Ella quiere a su familia unida -Dijo su hermana en voz baja.
Aquellas palabras le congelaron el alma misma. Siempre pensó que Annie estaba bien en la forma en la que pasaban las cosas. Su padre la visitaba casi todos los fines de semana, pasaba por ella el viernes por la tarde y volvía los sábados en la noche. Todo era una mentira, toda la felicidad y comodidad que Annie demostraba, ¿era falsa? ¿Ella realmente quería una familia? ¡Qué madre había sido para no darse cuenta de aquello! ¡Se sentía tan mal por su pequeña Annie!
Isabella, más que nadie en el mundo, sabía lo que significaba ver a sus padres separados. Había olvidado lo mucho que deseaba lo mismo; ver a sus padres compartir un par de palabras, una sonrisa, una mirada, sin odio, simplemente amistad. ¡Mierda! ¡Se había convertido en todo lo que no quería!
-Oye... -Dijo Mary de pronto, notando como la mente de Isabella trabaja sin parar-. No es tan mal como piensas. Digo... Ella nunca los ha visto juntos. Pero, ya sabes, papá y mamá nunca lo estuvieron tampoco. ¿Recuerdas lo mucho que queríamos tener una buena cena familiar? Todos juntos en navidad y año nuevo. Ella también tiene esos sueños. No es tan profundo todo, ella no te odia por no hablar con Chris, pero...
