¿Qué nos ha pasado? [ 2ª TEMP. Elrubius. Una historia de amor ]

9. Mojabragas

Me desperté a las tres. Casi no me podía levantar, me dolía demasiado la cabeza. Tenía resaca. Decidido, no sé beber. Siempre que me tomo aunque sea tres chupitos, al día siguiente tengo resaca.

Conseguí levantarme. Fui a la cocina, mi madre vio mi cara de muerta y me hizo una sopa calentita. Esa tarde, no me iba a mover de mi piso. En cuanto acabé de comer, me eché al sofá, cosa que hice todo lo que quedaba de día. Me eché la siesta, y eso que llevaba desde los diez años sin hacerlo.

A las nueve, apagué la tele y me puse a leer. Me encanta leer, es como meterme en un mundo paralelo. Después de leer un rato, cogí el ordenador y puse el Twitter de Rubius. Luego, me puse a ver muchos vídeos suyos. Me aburría, se nota. 

Me fui a dormir temprano, porque tenia mucho sueño. Cuando me desperté, a las diez, hice lo que hace todo el mundo, desayunar y ducharse. A la tarde iba a quedar cin Rubius. 

A las cuatro me preparé, ya que me esperaría en mi portal a las cinco menos veinte. Cuando eran menos veinte justas, me despedí de mi padre, y mi madre, que me miró con cara de: " Sé lo que vas a hacer", y me soltó: " Con protección eh" y una cara de pillina. Yo le dije: " Mamá, por favor, llevamos muy poco tiempo", con cara de asco. Creo que se lo tragó.

Cogí, mi monedero, y mis llaves. También me aseguré de que tenía el móvil en la mano, por si acaso. Bajé por las escaleras, él me estaba esperando.

A medida que dábamos una vuelta, sin destino alguno, cada vez nos paraban más personas a que Rubén les firmara autógrafos. Me hacia gracia como se comportaba con los niños, se nota que será un buen padre. Me hacía ilusión ver así a Rubius, porque cada vez es más famoso, y él es feliz.

Pero no todo eran buenas caras y risas todo el rato. También se le acercaban las típicas niñas de quince años, que al verme con él, sus miradas hablaban por ellas solas. Creo que me odian. Seguro que eran las típicas "mojabragas", que lo ven cuando está de moda. Pero me daba igual, eran niñas pequeñas.

Estuvimos toda la tarde dando vueltas como tontos, eso sí, más cariñosos que nunca. Nos despedimo a las diez. Al llegar a casa vi una cosa un tanto... extraña en Twitter.

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HOOOOOOOOOOOOOOLA ¿QUÉ TAL ESTAIS? YO BIEEEEN

RUBIUS HA LLEGADO A LOS 7.000.000 DE SUUUUUUUUUUUUUBS

QUE GENIAL. BUENO AQUI OS DEJO UN CAP, QUE ÚLTIMAMENTE NO SUBO CASI