One Shots |Marvel|

Thor

—Te lo apuesto —le dije divertida

—Adelante —sonrió confiado

—¿Cuántos billetes pones? —

—Bien... Te daré 500 dólares si puedes hacerlo —se cruzó de brazos divertido

Estábamos todos los vengadores en una de las mesas de cafetería del helitransporte; yo había hecho una broma unos minutos antes sobre el Mjolnir, que no podía ser tan difícil cargarlo.

Yo no había estado en la pasada fiesta —cuando Ultron fue creado— donde mis compañeros intentaron cargar el martillo de Thor, así que todos decían que era imposible. Y así fue como me postulé de voluntaria para al menos moverlo 2 centímetros

—Muy bien, ya tenemos 500, ¿alguien quiere apostar más? —todos se vieron entre sí

—450 dólares —dijo Banner

—Genial, ¿alguien más? —y así fue sucesivamente; Natasha apostó 200 dólares, Clint 300, Steve 480, Wanda 420, y por último pero no menos importante, Tony con 1000 dólares.

—No se preocupen, gente, no perderemos ni un centavo —dijo Tony, sentándose confiado

—Eso lo veremos —me susurré

Arremangué mi blusa y calenté mis nudillos, moví mi cabeza de un lado al otro y me aparté el cabello.

Puse mis manos sobre el martillo y jalé fuertemente, al principio no se movía nada, después intenté más fuerte. Oí a Tony y a Thor reírse.

¿Ah, sí? No se reirán cuando este martillo se mueva

Me concentré en qué quería hacer y puse todas mis fuerzas y energías en ello. Hasta que hice que el Mjolnir cayera de la mesa.

Volteé a ver a todos, victoriosa. Me miraban con los ojos tan abiertos que por un momento pensé que se les saldrían. Hasta yo me sorprendí, pero no lo mostré.

—Sólo acepto efectivo —les dije sentándome cómodamente en las piernas de mi novio, quien me miraba estupefacto

—¿C-cómo hi-hiciste eso? —me preguntó

—Ni yo lo sé —me encogí en hombros

—¿Pu-puedes... Tratar de volver a hacerlo? —

—Primero mis billetes —sonreí parándome

—Natasha —le dije y me fulminó con la mirada antes de entregarme el dinero —Banner. Hey, tranquilo amigo, no te pongas verde —dije al ver su cara de enojo por perder dinero —Señor Lenguaje, digo, Steve —me dio el dinero sin reproche, pero con una mueca no muy feliz —Wanda —me tendió el dinero de brazos cruzados
—Clint —me vio sorprendido y me entregó el dinero —Y... Tony —le vi sonriente y victoriosa

—Demonios... Recuérdenme no apostar ni en el casino... —dijo parándose, agarró su billetera y me entregó mis 1000 dólares

—Gracias —hice una pequeña reverencia orgullosa —Faltas, dios del trueno —me vio de mala gana y me dio el dinero —Vamos... No te enojes, no sé ni cómo lo hice y no creo que pueda volver a hacerlo —le sonreí

Él se dio la vuelta cruzándose de brazos, como niño enojado

—Vamos...— le golpeé amistosamente el hombro

No hizo nada

—Bueno, entonces lo único salvaje que habrá esta noche será el canal de Animal Planet...—

—Bueno, ya —dijo volteándose y abrazándome por los hombros como si nada hubiese pasado, todos rieron.