Max la tomó del brazo. El cuerpo de Kendall quedó cerca de él, sin fuerzas, sin siquiera poder defenderse en ese momento. A Max lo único que se le ocurrió hacer en ese momento fue besarla, pero un beso pequeño, que luego se convirtió en algo más grande y más. Sentía que de alguna forma debía agradecerle por todo lo que había hecho por él, sabía que Kendall no se merecía nada de esto, de verdad era única y merecía a alguien que la quisiera por completo, no alguien que tuviera en la mente a otra mujer.
- Perdón. – se disculpó él.
Ella se le separó. Respiró hondo mientras se limpiaba las lágrimas, algunas risas se escucharon en las afuera de la casa. Y la puerta se abrió. Julie y Emma entraron. Emma dejó de reír el mismo instante en el que vio a Kendall. Julie también la miró y Kendall hizo lo mismo cruzando miradas por primera vez.
- Me tengo que ir. – dijo ella, tímida. Por primera vez había visto a Julie. Ni siquiera por foto la había visto antes. Y no lo podía negar, era preciosa. Tan solo con mirarla había comprendido por qué Max se había enamorado de ella. Y eso solo le molestaba más. Sin decir más, salió de la casa de Max. Es que no tenía que decir ni hacer nada más por ahora, todo estaba hecho, y él le había roto el corazón en pedacitos infinitos.
Emma cerró la puerta de la casa después de verla salir, mientras Max intentaba cambiar de rostro al ver a Julie mirarlo dudosa.
- Saliste temprano. . . - le dijo ella dejando las bolsas de ropa en una de los muebles de la mesa. - ¿Quién era ella?
Max se quedó callado, miró a Emma con una sonrisa a medias. Indicándole que tal vez no era un buen momento para que ella estuviera ahí, necesitaba hablar con Julie a solas de todo esto.
- Bueno yo. . . iré a ver cómo me queda esto - Emma les sonrió a los dos. Agarró sus bolsas de ropa y se las llevó a la habitación en la que dormía con Ryan.
Fue en ese momento donde se volvió a hacer un silencio largo, pero esta vez entre los dos solos. Entre Max y Julie. Se escuchaba solamente la respiración de él, de pronto colocó sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón y se apoyó sobre la mesa.
- Se llama Kendall. – le dijo él. – Es de quién te hablé - Max soltó un respiro. Se sentía pésimo por todo esto, como un idiota sin arreglo. Había arruinado todo con Kendall.–Yo. . . es que. . .
- Max. . . - Julie colocó sus finas sobre su rostro, subiendo su mirada hacia ella. Chocaron miradas por un largo tiempo. Era el momento más sublime de toda la vida. Max sintió que podría besarla en cualquier momento, así no fuera el indicado – Cuéntamelo todo ¿si? no importa que haya pasado, solo hazlo, quiero que te sientas mejor, que te desahogues.
- Es que. . .
- Nada. - Julie lo miró seria. – Cuéntame, soy yo, Julie, tu novia.
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SEDÚCEME
Teen Fiction~3er y último libro de la trilogía "El secuestro de Julie" Está cerca y apunto de seducirte de nuevo.