Capítulo 1 - Introducción

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- Sabéis que no hacía falta que os cambiaráis de escuela también, ¿verdad? -Dijo mientras las otras dos chicas se le acercaban para seguir andando juntas.

- ¡Claro que hacía falta! Nosotras tres somos un pack. Te seguiremos allá a donde vayas.

- Me sabe mal. Vosotras dos os llevabáis bien con mucha gente de allí.

- No te preocupes. Nosotras nos llevamos bien con todo el mundo pero a ti te queremos como a nadie.

- Tiene razón. No te vas a librar de nosotras tan fácilmente.

Esa mañana Nayeon se levantó más radiante que nunca. Este año iba a ser el último en el instituto y pretendía seguir siendo la delegada de clase y la chica más popular y con las mejores notas. Se ganaría su puesto en medicina, estava decidida. Desayunó junto a su hermano y su madre, se puso su uniforme escolar y se quedó admirándose delante del espejo. Tenía el pelo de color castaño claro y bastante largo. Su piel era blanca y cuando sonreía destacaban sus dientes frontales, ya que eran más grandes que los otros, haciendo de esta una sonrisa adorable. "Perfecta", se dijo a sí misma y en ese momento llamaron al timbre.

 - ¿Me habéis echado mucho de menos este verano chicas? -Abrió la puerta con una gran sonrisa en la cara.

- ¿Pero qué dices Nayeon? Hemos pasado el verano juntas, ayer mismo nos vimos. - Dijo la más alta de las dos chicas.

- Buff, Jeongyeon, ¿por qué siempre le quitas el dramatismo a las cosas? Deberías haber dicho que sí. ¿A qué tu si que me has echado de menos Jihyo?

- Ojalá me hubieras dejado echarte de menos. Creo que te he visto más este verano que en toda mi vida. -Contestó la nombrada entre risas.

- ¡Ya! Os odio a las dos. Vámonos o llegaremos tarde. -Cerró la puerta indignada y empezó a andar.

Andaron hacia la escuela entre risas y memorias del verano que habían pasado hasta que otras tres chicas las interceptaron a medio camino.

- ¡Ya era hora! ¡Llevamos media hora esperándoos!

- ¡Oye! A vuestras mayores les habláis con más respeto y a mi en especial me hacéis una reverencia para saludarme. - Gritó Nayeon acercándose a las chicas.

- Lo raro es que estéis aquí antes que nosotras. Siempre nos tocaba esperaros. - Jihyo recordaba tener que esperarlas por más de media hora, incluso en invierno mueriéndose de frío.

- Ya, es que Dahyun está muy emocionada porque es el primer día.

- Sí, mañana ya se le habrá pasado y volverá a ser una marmota que no es capaz de levantarse de la cama por las mañanas.

La más baja y la más alta del grupo se unieron para exponer a la de tez más blanca. Todas rieron asintiendo ante estos comentarios menos ella.

- ¡Eso no es verdad! Este año pienso ser más responsable y voy a levantarme temprano siempre.- La llamada Dahyun intentó defenderse, pero solo incrementó las risas de sus amigas, lo cual la molestó.

- Venga, yo creo en ti Dahyun, este año serás siempre la primera. - Jihyo intentó animarla.

- Gracias Jihyo, tu si eres una amiga no como Chaeyoung y Tzuyu. -Dijo mientras les hacía una mueca que solo les causó gracia.

- Bueno venga vámonos, que seguro que todos en la escuela tienen ganas de ver a su reina ya. -Nayeon volvió a reprender la marcha.

Entre más risas y chistes las chicas llegaron a la escuela diez minutos antes de que empezaran las clases.

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