Irony

Capítulo 26 - Día 2

Nayeon fue despertada por la alarma del móvil. Estaba muy cansada, había dormido fatal. Toda la noche dándole vueltas a la escena que le montó a Mina, ¿cómo iba a arreglar eso? Ni siquiera era capaz de mirarle o hablarle, cuando estuvieron ensayando no pudo dirigirle la palabra. Intentó enviarle un mensaje por la tarde pero no se atrevió y ella tampoco recibió ninguno por parte de la otra. Empezó a cambiarse y luego bajó a desayunar, estuvo un rato esperando y vio que pasaba la hora por la que la japonesa solía pasar a por ella. Suspiró y agarró la mochila, tuvo que haber supuesto que no pasaría. Abrió la puerta dispuesta a salir y se encontró de frente con Mina.

- ¡Aah! -Dio un salto hacia atrás del susto.

- Venga, vamos.

Sin esperar respuesta de la coreana se puso a andar hacia su moto. Cuando Nayeon volvió a funcionar cerró la puerta con llave y la siguió, alcanzándola cuando ya estaba sentada en el vehículo.

- Pensaba que no pasarías hoy.

- No digas tonterías, sigo sin fiarme de Minhyuk. Seguro que estáesperando a que me distraiga para abarcarte.

- Mina... ¿podemos hablar?

- Se nos hace tarde. -Contestó mientras de le daba el casco.

Sin decir una palabra más ni dejar que la otra la dijera, se puso rumbo a la escuela.

Las siete amigas ya estaban esperando en el parque a las otras dos, hablando sobre su segunda parte del plan.

- ¿Momo, Sana, habéis podido hablar con él?

- No hemos hablado con él, creo que cabrear a Mina no es una buena opción, la verdad.

Las dos japonesas estaban preocupadas por lo del espejo roto, no creían que fuera conveniente ponerla a prueba.

- ¡Venga! Si no funciona por parte de Nayeon puede que funcione por parte de Mina. -Jeongyeon seguía insistiendo.

- No lo sé, no creo que sea buena idea... -Sana seguía negando.

- ¿Queréis juntarlas de una vez o no? -Tzuyu no tenía tanta paciencia.

- Oye ya vale de presionarla, Sana tiene razón. No es una buena idea. -Momo saltó a su defensa.

Se quedaron en un tenso silencio, mientras las cinco intimidaban a las dos japonesas con la mirada, ellas que no sabían nada sobre el cabreo que tuvo ayer Mina seguían pensando que invertir hoy el planera buena opción. Sana se rindió ante la mirada inquisitoria de sus amigas.

- Está bien, llamaré a Minhyuk. -Todas menos Momo aplaudieron. -Pero si pasa algo malo es vuestra responsabilidad.

Todas asintieron contentas mientras Sana marcaba su número.

- ¿Si?

- ¿Minhyuk?

- Sí, ¿quién eres?

- Sana. -Se hizo un breve silencio antes de que continuara. -¿Sigues queriendo hablar con Nayeon?

Parece que pensó un poco antes de contestar, pero obtuvieron la respuesta que querían.

- Sí.

- Te ayudaré. Hoy a nuestro instituto a la hora del descanso.

- ¿Por qué me ayudarías?

- Solo acéptalo. -Bufó, estaba de mal humor, sentía que estabatraicionando a Mina. -Ven y ya.

Volvió a hacerse silencio antes de la respuesta.

- Allí estaré.

Colgó sin esperar nada más y todas vitorearon encantadas, menos Sana que miró al suelo y Momo que intentó reconfortarla abrazándola. Las dos que faltaban no tardaron en llegar y fueron todas hacia el instituto.