Capítulo 46 - Ansiedad

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Nayeon se encontraba en la sala de espera del hospital. Todo sucedió muy rápido, la ambulancia llegó al hospital y llevaron a Mina a quirófano rápidamente. A Nayeon también la atendieron unos médicos pero comprobaron que no tenía ninguna herida, así que la llevaron a limpiarse toda la sangre y le dieron una camisa. Poco después llegaron su madre y Jackson, que fueron corriendo a abrazarla. Los tres lloraron desconsoladamente, Jackson y Yeeun de alivio y alegría y Nayeon que una vez más ni siquiera sabía que sentir. Poco después llegaron las ocho amigas con Sunmi y más policías. Después de que todas la abrazaran también Sunmi se la llevó para hablar asolas. Fue el momento en el que vio de reojo como llevaban con una camilla a Akira. Estaba cubierto con una manta pero Nayeon no tenía ninguna duda de que era él. Se sintió aliviada. Todo había terminado. Sunmi le tomó declaraciones, donde le dijo que había otra persona que trabajaba con él y el lugar donde había estado. Después ambas volvieron a la sala de espera, donde se encontraban todas nerviosas. Jihyo se levantó y se puso delante de ella.

- Todo va a salir bien Nayeon.

La mayor, que había estado manteniéndose fuerte, se rompió delante de su mejor amiga. La menor la envolvió en sus brazos y le acarició la cabeza para tranquilizarla. Las otras vieron la escena desde lejos, querían ir a abrazarla también pero sabían que era mejor darles espacio.

- Vi como se desangraba delante mía... Va a morir por mi culpa...

- Nayeon no. Pase lo que pase no va a ser tu culpa. Hiciste todo lo que estuvo en tus manos, ¿está bien?

La coreana asintió varias veces al escuchar estas palabras salir de la boca de su mayor apoyo y volvió a acurrucarse entre sus brazos. Jihyo la estuvo calmando hasta que pareció relajarse y fueron a sentarse con todas. Miró al alrededor y vio a Jackson apoyado en una pared, le hizo una señal para que se acercarse y este obedeció.

- ¿Y mamá?

- Está hablando con Sunmi.

- Ah... -Bajo la vista, con los ojos cristalinos otra vez.

- Eh. -Jackson le llamó la atención y ella volvió a mirarle. -Va a vivir, no puede morir sin que le de la paliza que se merece así que no te preocupes.

Nayeon sonrió levemente haciendo sonreír también a su hermano, que volvió a la pared donde se encontraba antes. Miró a todas sus amigas, y terminó posando la vista en Sana y Momo. Se encontraban al extremo del banco, con las manos entrelazadas y mirando al frente, serias. Seguramente estaban haciendo su mayor esfuerzo para no romperse allí mismo y mantener el optimismo tan característico de ellas. Nayeon se apoyó su cabeza en sus manos, sentía que iba a morir de estrés como alguien no le informara del estado de Mina.

En otro lugar de ese mismo hospital se encontraban Sunmi y Yeeun. La policía parecía estar pasando un mal momento.

- No hice bien mi trabajo, lo siento mucho, no tengo excusa.

Estaba disculpándose con la madre de Nayeon ya que sentía que todo aquello había sucedido por su ineficiencia. Sin embargo, Yeeun con la cabeza.

- Hiciste todo lo que pudiste. Mina debió compartir contigo la información que tenía en lugar de ir por sola.

- La verdad es que...  Pensaba que Mina me diría si supiera algo. Pensaba que confiaría en mi.

- Estoy segura que lo hace pero estaba cegada por la ira. -La policía no parecía tan convencida por lo que Yeeun simplemente cambió de tema. -¿Qué hay de su ayudante?

- Nayeon nos lo ha descrito con claridad y estamos haciendo el retrato robot. Pronto lo encontraremos y podremos cerrar el caso.

Yeeun se acercó y la abrazó.

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