Las aventuras gays de Steve

45. Grieta

—No puedo creer que me hayas hecho eso.

—Lo siento mucho Steve pero era lo correcto, además piensa, si hubieras adoptado a Agustín como se debe y un día escapa de casa, ¿no crees que te gustaría encontrarlo?

—Tienes un punto pero es la persona la que me preocupa.

—¿La chica ésa?

—Sí, ella me molestaba en la preparatoria.

—Vaya, no lo sabía, enserio.

—Eso ya no importa.

Ambos bebieron de sus bebidas y suspiraron al mismo tiempo.

—Pero te lo merecías después de no haber ido al aeropuerto para despedirte de Noah—dijo molesta.

—Espera... ¡¿qué?!—de inmediato se levantó exhaltado de su asiento llamando la atención de los clientes—¡¿Cómo está eso de que Noah ya se fue?!

—Hey, tranquilizate...

—¡No puedo creerlo!—golpeó la mesa con su puño—¡Noah no me dijo que ya se iba! ¡NI SIQUIERA SE DESPIDIÓ DE MÍ! —volvió a golpear la mesa con ambas manos causando una grieta en ésta.

Los clientes se acercaron para ver sí todo estaba bien pero no era así, Steve no estaba bien. Estaba enojado y mas que nada deprimido.

—N-No lo sabía... ¿Steve?—preguntó Karen preocupada.

Miró las caras horrorizadas de las personas, no lo pensó más y salió corriendo de ahí.

No pude despedirme...