un amor imprevisto

-33-

Al día siguiente, la  temperatura estaba bajísima, la cabaña estaba casi congelandose. Tenía hambre y sed y solo tenía la esperanza de que Cassandra y la policía me encontraran y eso sería muy dificil por que no le había dado mucha información de donde me encontraba.
No sé cuánto tiempo pasó que al fin Richard vino.

-Hola Adeline, ¿como estás? - me preguntó sonriente.

Tragué saliba para poder responder.

-Mal - dije apenas.
-Ay, pues mira, te traje un poco de comida y agua, para que veas que no soy malo.

Agarré de inmediato y empecé a comer enseguida y a beber el agua, poco a poco sentí como recobré las energías.

-¿Tendrás una cobija? - pregunté.
-Mmmmm - pensó - no, lo siento mucho pero creo que ahora sufriras un poco de frío.

Me le quedé viendo con una mirada no muy amigable, él lo notó y dijo:

-¿Qué?, no tengo ninguna cobija y si la tuviera no te la daría, o ¿ya se te olvidó todas las veces que me rechazabas?.
-No lo he olvidado - dije - y a pesar de todo sigo pensando que eres un ser egoísta y despreciable.
-Ay pues muchas gracias por tus alagos, ¿no te das cuenta que tu vida depende de mí?
-Lo sé, y creéme que lo lamento demasiado.
-Entonces no te molestará que lastime un poco a tus amigas ¿verdad?.
-Ellas no tienen nada que ver con todo esto.
-Pues acabas de meter al juego a Cassandra, ¿pensaste que no me daría cuenta de que le hablaste por teléfono informandole que te tenía secuestrada?.
-¿Cómo lo sabes?.
-Tengo contactos, y creéme que Cassandra ya tiene su merecido y creo que tardará unos días para recuperarse e informarse lo a la policía.
-¡¿Qué le hiciste?!.
-Hize lo necesario, te dije que tus actos tendrían consecuencias, y no me quisiste creer.
-Dejala en paz, ella no te hizo nada.
-Sé que no me hizo nada pero tiene relación en esto, y pues tampoco me gustaría herir a tu amado, ¿cómo dijiste que se llamaba?, ¿Chris verdad?.
-¡Con él no te metas! - le grité.
-Oh, se ve que a él si lo amas.
-El es mucho mejor que tu.
-Pues si se atreve a hacer algo, creéme que saldrá lastimado.
-Solo dejalos en paz, ¿en relidad qué quieres lograr con todo esto?.
-Mi plan es estafarte, pero antes de eso hacerte sufrir, pero el frio hará esa parte.
-No te quiero volver a ver nunca.
-Ok me voy, y esta será la ultima vez que me verás, por mi parte cambié mi vivienda así que tardarán en encontrarme o tal vez nunca lo harán y en cuanto a ti, el frío te matará.
-Largate.

Richard sonrió y se marchó. Me quedé sola en ésa cabaña, cerró la puerta con candado, además  me amarró a un tubo que había por ahí, practicamente no podía pararme.
Las siguientes horas fueron cruciales, el frío realmente sí me estaba consumiendo, sé que hiba a morir, ése Richard cumplía lo que prometía, lo unico que no quería era morir sin haberme despedido de todos. Otra cosa que me preocupaba era Cassandra, tenía mucho miedo de lo que él le pudo haber hecho, además, mi mayor miedo era que nunca me encontraran...

Solo deseaba ver a Chris aunque fuera por última vez, pero tenía la certeza de que tan pronto como el supiera que estaba secuestrada me buscaria, tenía miedo de que me buscara cuando fuera demasiado tarde...