Es tarde en la noche y sólo quiero descansar de tan ajetreado día, pero hay alguien que me espera, o eso pienso yo. Dejo mis pertenencias sobre el sillón y de inmediato voy a mi habitación donde la madre de Jeon se encuentra.—Buenas noches— surruro para no asustarla.
—Hola JiMin.
Extiende sus brazos hacia mí con una sonrisa en sus labios, yo sorprendido me acerco algo rígido a su cuerpo, pero sus brazos cálidos me dan esa paz que necesito en estos momentos, me hago más pequeño entre sus brazos, pero sin hostigar mucho me separo con una tímida sonrisa.
—¿Cómo te fue niño?
—Muy bien, pero algo cansado.
—Ve a descansar, ya es tarde no te preocupes por mí.
Esta amable señora cómo es que tuvo un diablo como hijo.
—No es ninguna molestia, voy a preparar la cena para los dos.
Salgo de la habitación sin dejarla rechistar de algo, entro a la cocina y me recargo en uno de los mesones. El sueño me está ganando pero no me voy a rendir tan fácil.
Pongo una olla sobre el fogón, la lleno con agua, saco de uno de los cajones dos paquetes de sopa instantánea de pollo.Salgo de la cocina y entro al baño para limpiar mi rostro con alguna crema, me siento una basura completa, tanto como emocional y físicamente. Si estuviera solo estuviera entre las mantas.
Tal y como dice en el empaque, solo tres minutos y la sopa está lista, me lavo las manos para que nada sepa a crema. Tomo dos tazas y sirvo la sopa humeante en ella. Con cuidado las llevo hasta la habitación dejándolas sobre la mesa de noche.
—Gracias cariño.
Le doy una sonrisa y me siento a su lado con la taza de sopa entre mis manos, con contenido de ella en la cuchara la soplo y con extremo cuidado se la acerco a su boca.
—N-no sé que haría sin ti.. Mi hijo nunca me cuidaria así.
...
Por fin había logrado conciliar el sueño, la señora Jeon me había obligado a acostarme a su lado diciendome «estoy enferma pero no molesto, acompaña a esta pobre mujer» a pesar de las palabras lo rechacé pero después de pensarlo un rato me acosté a su lado haciéndole compañía mientras en que unos escasos minutos pasan había empezado ha contarme anécdotas pasadas. Me había hecho recordar los pobres minutos que pasé con mi familia, nunca fuimos de pescar o a cenar en algún parque. Cada uno era por su lado, nada de integraciones.
Eso me puso melancólico junto a las historias que me contó sobre la muerte de varios fmailiares, de lo cariñoso que era su hijo antes.Pero ahora que había tenido algo de paz estoy mirando al techo oscuro mientras escucho como tose la señora Jeon, es normal y debería aguantar pero con mi condición emocional estoy estresado. Trato de cubrir mis oídos pero sus tos constante sige.
Lanzo la almohada y decido tocar su frente.—¡Despierte!— grito preocupado.
Su frente está muy caliente y sus pies están fríos, obvio es fiebre. Me salgo de la cama y de los cajones de la mesa de noche saco un termómetro digital, lo pongo bajo su axila mientras salgo prácticamente desesperado hacia el baño, tomo una toalla limpia y la mojo, me devuelvo con ella entre mis manos. La pongo sobre su frente y saco el termómetro de allí; su temperatura está en 39.
Voy a uno de los cajones y me pongo una sudadera por si toca salir al hospital.Busco mi teléfono en la sala para mandar un mensaje a TaeHyung. Le mando uno, dos y hasta cinco mensajes pero no contesta.
Me devuelvo a la habitación, toco su frente retirando la toalla, sin embargo su temperatura sigue igual.Busco unas zapatillas y me las coloco rápido. Vuelvo a tocar su frente, su tos se calmó un poco pero de igual manera sigue.
Busco mis pertenencias y con el dolor del alma le dejo una llamada perdida a JungKook. Cubro a la señora Jeon con unas chaquetas mías y con cuidado la tomo con mi brazo en su espalda y el otro debajo de las rodillas.El teléfono suena dentro del bolsillo de mi chaqueta pero lástima porque no tengo otro brazo.
Con dificultad abro la puerta y la cierro de nuevo, camino hasta el ascensor y agradezco que no haya nadie, igual quién estaría a las tres de la mañana por ahí....
"¡Aló!"
"¿Con quién hablo?"
Su voz ronca me deja mal."Con JiMin ¡pero no cuelgues!"
"¿Qué pasa? ¿Me vas a rogar que esté a tu lado?"
"Di lo que quieras Jeon pero tu madre está en urgencias."
"¡Qué le hiciste JiMin!"
"¡Nada estúpido! ¡Ven más bien rápido!"
"¡Si se llega a morir mi madre el que le siga serás tú!"
Cuelgo el teléfono y me quedo sorprendido por sus palabras. Si no hubiese perdido mi billetera nisiquiera lo hubiera llamado.
No voy a llorar más.
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El chico del Esgrima (Kookmin)
FanfictionYa es muy tarde, no puedo hacer nada, tal vez te deje ir como lo hice con otras personas; porque hasta ahora me doy cuenta que tengo la maldición del Esgrima. Perdóname. ↩Contenido Homosexual. ↩Contenido explícito. ↩Historia original. ↩Editado.