—¿Qué fue eso JiMin?— me pregunta TaeHyung cuando llega después de entregarle la orden.—N-no lo sé— me siento en el sillón y abro mi cartera para revisar si todos mis papeles están completos.
—¿Tus papeles?
—Si, ese tipo me los dio.
—¿En qué te has metido JiMin?— un papel sobre sale entre los papeles.
—¡En nada maldición!— me aferro a mis cosas olvidando beso que tuve que compartir con ese tipo. Ni loco le diré que me ha citado a un lugar esta noche.
—¡Vengo yo feliz a contarles que NamJoon estará a cargo en el otro distrito y me entero que algún pervertido vino a acostar a JiMin!— Dice sin parar con su rostro rojo del enojo.
Miro a TaeHyung de reojo pero con una mirada me asegura que no fue él quien le dijo.
—¡Tendré que encerrarte en una caja JiMin!— me acoge entre sus brazos.
...
Todos juntos salimos del lugar para cerrarlo; miro la hora en mi teléfono con insistencia, faltan veinte minutos para que tenga que encontrarme con ese desconocido; me dijo que enfrente de aquí.
—Yo me quedaré aquí, he pedido un carro— mantengo el teléfono encendido no por la aplicación, sino por la hora.
—Te puedo acompañar— se ofrece Jackson pero niego con una sonrisa.
—Estaré bien.
—Adiós bebé— me dice SeokJin con un beso en la mejilla, se encuentra aferrado al brazo de NamJoon.
—Cuidate pequeño— me remueve el cabello como siempre, pero con la diferencia de que me mira con preocupación.
—Ten mucho cuidado JiMin, sabes que te quiero mucho como para soportar que te pase algo— me aprieta las mejillas.
—También te quiero— lo veo alejarse y ya me siento solo; pero mejor por ya sabemos que. Supuestamente tenía que verse con un amigo que hizo en algún bar.
Los únicos que quedamos somos JungKook y yo: muy incómodo.
—Mi madre dijo que quería verte— oh no, alto ahí pequeña mierda, ni pienses que me iré contigo.
—Dile que mañana la veré, iré temprano— no me reprocha, pero se queda un rato mirándome intimidante.
A los minutos quedo solo, miro la hora y no está por llegar, el frío me está helando pero tengo que esperar. Miro a mi alrededor para asegurarme que nadie esté escondido por ahí.
—Sube— un lujoso auto de color negro que refleja las luces de la noche.
Abro la puerta a su lado y entro, al menos hay calefacción, aunque me estoy arriesgando a mucho.
—Ahora puedo ver tu rostro limpio— me pasa un dedo por la mejilla— Ya no tiene sangre— me retiro.
—Pequeña escoria— me toma con fuerza el rostro—. Seré gentil contigo si te portas bien.
—¿Q-qué quieres?
—Te quiero a ti— se acerca a mis labios.
—N-no.
—Le he dado tiempo a tu jodido amigo para irse.
—No sé de que hablas.
—Olvidalo— me mira por completo —Sólo has lo que te pida; si te niegas iré por esto— señala la cafetería.
Tendré que arriesgarme por el bien de mis amigos.
—Nadie te mandó a ser tan guapo—besa mi mejilla —me llevaron la persona equivocada, pero resulta que un pequeño error me llevó a obsesionarme contigo.
Por fin cierra el espacio entre nosotros y me besa despacio, con enojo e impotencia cierro los ojos. Me estoy dejando besar por un desconocido; todo por mis amigos, soy un maldito buen amigo.
—Me llamo Shownu— me limpia la comisura de mi boca —No es necesario que me digas tu nombre, sé hasta la dirección de donde vives.
Se aleja de mi espacio personal y yo me hago más pequeño en el asiento de cuero rojo. Me siento mal ahora mismo, espero que si me lleve a casa.
Da un giro hacia la derecha, veo la fría noche a través de la ventana empañada. Perdido en mis confusiones de mi cabeza con advierto la presencia de alguien viéndome a lo lejos.
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El chico del Esgrima (Kookmin)
FanfictionYa es muy tarde, no puedo hacer nada, tal vez te deje ir como lo hice con otras personas; porque hasta ahora me doy cuenta que tengo la maldición del Esgrima. Perdóname. ↩Contenido Homosexual. ↩Contenido explícito. ↩Historia original. ↩Editado.