—Joven váyase por favor— dice el policía.
—¡Pero se robaron mis papeles! ¡quién sabe que harán con eso!
—No me importa, no puedo hacer nada por usted.
Me reprimo de golpear su rostro y salgo de la estación de policías; intenté que me ayudaran con la busqueda de mis papeles pero vaya que nisiquiera hacen el esfuerzo.
A penas sale el sol opaco de la mañana, mis ojos los siento cansados pero tengo que ir a poner la denuncia, no quiero que hagan cosas raras con mis pertenencias....
Tomo el primer taxi que se detiene, me subo en el, le doy la dirección al conductor de mi dirección.
Tengo que venir por mi madre más tarde así que mejor iré a tomar una ducha, comer algo y dormir un poco.
Vaya susto que me dio JiMin, si hubiera sido mentira lo hubiese golpeado hasta el cansancio. Pero pobre, no tiene ni para un café.El conductor toma una ruta rápida y en unos minutos llego a la casa, le doy el dinero correspondiente. Entro a la recepción seguido de ir al ascensor donde después de algunos pisos llego al de Seyeon.
—Hola cariño— la saludo al entrar.
—Hola JungKook.
Se abraza a mi cuello mientras compartimos un beso intenso. Nos separamos, camino hacia la habitación para ver a mi padre pero grata es mi sorpresa al verlo dormido en el sillón, es un hombre que a pesar de lo que pasó sigue con la costumbre de levantarse temprano.
Entro a la habitación quitándome la ropa, salgo con una toalla en la cintura hacia el baño.—Deberíamos aprovechar JungKookie.
A qué maldita hora se metió. Paso por un lado de ella dándole una sonrisa pícara, la verdad no hemos tenido sexo como quisiéramos gracias a la presencia de mi padre.
Veo como se quita el short junto con la camiseta, dejando su cuerpo desnudo solo para mí, también quito la toalla dejando mi cuerpo al desnudo. La tomo de la cintura entrandola junto conmigo a la regadera, beso sus labios mientras recorro su cuerpo con mis manos y ella con las suyas el mío.—Mi madre...Vendrá a vivir aquí—le digo entre beso y beso.
—¿Me estás jodiendo Jeon?— dice enojada —tras de que tu padre está aquí, también tu madre. ¡Yo soy la que estoy pagando esto no tú!
Se va de mis brazos y sale del baño cerrando la puerta de un portazo. Aunque no es la única enojada, sé que paga éste apartamento pero tiene que entender la situación en la que estoy pasando.
...
La casa se siente como antes; sola pero con recuerdos malos tanto como buenos. Voy hacia la cocina, así sea lo último que haga me tomaré un café.
Después de haber tenido una charla con el guardia por fin estoy aquí en mi hogar sano y salvo.Salgo hacia el baño, quito toda mi ropa para entrar a la regadera bajo el agua cálida, paso mis manos por mis hombros tensos, mi estómago y de ahí hacia mis piernas dejando rastros de jabón. Un baño rápido.
Ya dentro de la habitación me coloco ropa cómoda; una pijama enteriza de color gris de gato, son mis preferidas y me encanta ponermelas así sea hombre.
El olor a café ya se encuentra en el aire, termino de subir la cremallera y voy hacia la cocina tomando un vaso para servir el tan deseado café.
Unas cucharadas de azúcar, un poco de leche. Me devuelvo a la habitación, me siento en la cama, enciendo la tv y pongo algo que ver.En silencio tomo mi café, tan abrumador como siempre, ya las charlas que tenía con la señora Jeon ya no están, entonces, tal vez esto de vivir solo nunca es lo mejor. No pongo atención a lo que pasa en la tv, pero sí me pierdo en mis pensamientos.
"Algún día se arrepentirá de lo que está haciendo". Recuerdo tanto las palabras dichas por esa mujer.
ESTÁS LEYENDO
El chico del Esgrima (Kookmin)
FanfictionYa es muy tarde, no puedo hacer nada, tal vez te deje ir como lo hice con otras personas; porque hasta ahora me doy cuenta que tengo la maldición del Esgrima. Perdóname. ↩Contenido Homosexual. ↩Contenido explícito. ↩Historia original. ↩Editado.