Mi Nuevo Socio [MNS] [TERMINADA]

|Capítulo 24| Presagio de muerte|

Draco me ha convencido de bajar a comer algo y no lo hubiera hecho de no ser que sacó a flote el tema del bebé y que eso no le haría nada bien.

Harry fué a llevar a Astoria y a los niños a comer algo, y se había llevado a Scorpius.

Sé que no estaba completamente convencido, pero Lily y Albus le han hecho aceptar semejante cosa.

Bajé mi vista al ver mi mano y la de Draco unidas, no podía explicar lo que sentía con tan sólo un simple roce como aquel.

Me senté en la banca esperando a que Draco me trajera algo, no podía estar tranquila, no sé porque.

Al cabo de unos minutos Draco llegó con un café y un emparedado.

-Gracias- musité mientras los tomaba.

Comía sin ganas, estaba absorta en mis pensamientos, todos los momentos que he vivido con Tammy en estos casi 9 años venían a mí como si de un rayo se tratara.

La sensación de ser observada me trajo a la realidad y voltee, encontrándome con Draco.

Su rostro estaba neutro, pero tenía los labios en una fina línea recta, que sólo me daba a entender que había algo que no me estaba diciendo.

-¿Todo bien?-
-No sé, dímelo tú-.

Fruncí el ceño.

-¿Disculpa?-
-Anoche mientras dormías musitabas algo incomprendible-
-¿Ah si?-
-Sí, me tuvé que acercar para entenderlo mejor-.
-¿Y qué era si lo puedo saber?-.

Su expresión se tornó seria y me miró fríamente.

-Musitabas el nombre de Harry-.

Mi corazón se aceleró y sentía como mi ojo derecho tenía un leve tic.

-Draco, yo...-

Alzó su dedo, impidiéndome terminar la oración.

-No soy tonto, sientes algo por él- acusó.

-Pues de hecho si eres muy tonto, porque tús conclusiones son ilógicas-
-Si mis conclusiones fuerán tán ilógicas como dices; no hubieras tenido una hija con él-.

Touché

-Es distinto...-
-¿Distinto? ¿En qué sentido?- cuestionó molesto.

-Basta Draco, no quiero hablar de esto-
-Yo sí-.

Podría jurar que mis ojos destellaban ira pura y Draco sonrió arrogante.

-Es por lo mismo por lo que tú y Pansy tienen un hijo-.

-Es distinto-
Una inmensa sonrisa se dibujó en mi rostro.-¿Distinto? ¿En qué sentido?- la sonrisa en el rostro de Draco desapareció y ahora me miraba molesto.

-No uses mis palabras en mi contra, Granger- gruñó.

El silencio era sepulcral, se podía sentir la tensión en el ambiente, como cuchillos afilados perforando cada espacio de mi piel.

-En ese caso yo te puedo preguntar lo mismo-.
-Simplemente me quizé acostar con ella- escupe las palabras y las siento como dagas directas a mi corazón.

Nuevamente allí está el Draco que conocí hace casi 15 años, el que me hacía irme a dormir casi todas las noches con las mejillas empañadas de lágrimas por culpa de sus estúpidas formas déspotas de dirigirse hacía mí.

Y de repente todos sus maltratos vuelven a mí cabeza.

Nadie pidió tú opinión...sangre sucia inmunda