Mi Nuevo Socio [MNS] [TERMINADA]

|Capítulo 7| Ponle precio|

POV DRACO

Hermione estaba pálida, no encontraba que decir y la pequeña se encontraba abrazada de las piernas de su padre.

-¿Cuántos años tiene?- fué todo lo que pregunté.
-Va a cumplir 10 años-.

Un nudo se hizó en mi garganta y una pizca de esperanza creció en mí al darme cuenta de algo.

-¿Estás segura que Harry es el padre?- cuestioné y la castaña me miró indignada y con lágrimas en los ojos.
-¿Me crees capaz de revolcarme con dos hombres a la vez?- su voz era apenas audible y una lágrima cayó por su mejilla y mi corazón se estrujó.

-Mami, no llores- dijó la pequeña castaña con tristeza y Hermione sonrió levantando a la pequeña en sus brazos.
-Lo lamento mi amor- respondió ella mientras besaba su mejilla y Harry sonrió al ver esa escena.

-Te espero afuera, ¿okey?- dijó Chris. Hermione asintió y el rubio tomó sus cosas.-Cuidado con lo que haces Hurón, no te pases de listo- dijo antes de salir por la puerta.

Harry me miró y supe por sus ojos que estaba terriblemente molesto.

-Hermione y yo nos acostamos, sí, ¿y qué?...lo disfruté, lo disfruté como no tienes una idea...disfruté el hecho de tenerla bajo de mí gritando mi nombre-.

Apreté los puños a mis costados y sentí como mi mandíbula se tensaba al ver como Hermione se ponía roja.

-Y te aseguro que ella lo disfrutó de igual manera...al menos no se acordó de tí todas las veces que lo hicimos y ese era mi propósito, hacerla olvidar todo lo que le hiciste, todo lo que le provocaste. No te das una idea lo frustrado que estaba de ver a mi mejor amiga llorando cada noche, sin comer, sin ganas de hacer nada...parecía un cádaver de lo delgada que estaba por su  depresión, ¿todo por qué? Porque al niñito se le ocurrió pintarle los cuernos con Pansy Parkinson, ella quedó embarazada y prefiriste darle la cara a la zorra aquella y dejar a Hermione en el altar vestida de novia. ¿Sabes cuántas semanas Herms fué la víctima de las burlas de Sketeer y todo el mundo mágico? ¿Sabes lo qué es que todo mundo sepa que tú prometido te pintó los cuernos?...Harto de esa depresión la invité a salir a tomar, claro, las cosas se descontrolarón y una cosa llegó a la otra y allí tienes a Tamara. Ella no es tú hija Draco, por que yo más que nadie sabía que tú y Herms llevaban varias semanas sin hacerlo-.

-Harry, basta-.

-Esto es entre Draco y yo Mione-.

Hermione lo miró mal pero lo dejó seguir.

-Ella se quedó sola, y si, lo acepto, después de esa noche, vinierón más y más hasta que los dos nos convertimos en amantes, ¿y eso qué?...ella estaba sola, yo estaba soltero y tú hijo estaba apunto de nacer...solamente le ofrecí la solución a todos sus problemas, una salida a nuestro antro muggle favorito-.

Una sonrisa genuina aparece en la cara del estúpido de Potter como si lo estuviera recordando.

-También puede ser mi hija-.

-¡Por Merlín! ¡¿A caso la ves rubia y con ojos grises?!- gritó alterado.-No, ¿verdad? Pero en cambio tienes a Scorpius Malfoy, tú primógenito, él si tiene cabello rubio y ojos grises, en cambio Tamara tiene su cabello negro y los ojos esmeraldas como yo...¿tan difícil es para tú orgullo aceptar que te gané esta vez?- El rubio parecía estar por atacar al elegido.-¿Sabes otra cosa? Me divorcié de Astoria y tanto yo como Chris vamos a luchar por Hermione-.

-Primero muerto a que sea tú esposa-.

Harry sonrió de lado y me miró.

-Y yo prefiero verla en brazos de Chris que en los tuyos-.

Salí furioso de allí azotando la puerta logrando sobresaltar a Daphne.

-¿Draco?-.

-Ahora no Greengrass-.

Como osa ese estúpido a decirme semejante barbaridad, no iba a permitir que se casara con Hermione, sonará loco, pero estoy seguro que Granger volverá a ser mía.

Tomé mi teléfono muggle y marqué el número de Theo.

-¿Draco?-.
-¿Está Daniel Nott en la mansión?-.
-Si, ¿por?-.
-Nos vemos en 5-.

Me metí al audi furioso y en cuestión de minutos estaba estacionando en los jardines de la mansión de los Nott.

Me bajé del coche y caminé con dirección a la mansión y sin necesidad de tocar la puerta fué abierta por la pequeña elfina de la familia.

-Buenas tardes Litzy-.
-Litzy no tiene permitido la entrada a la mansión de usted  señor-.
-Necesito hablar con Daniel Nott-.
-Pero el señor Daniel Nott, no desea..-
-¡Por un demonio! ¡No tengo tú tiempo maldita elfina!- grité.

Los ojos gigantes de la elfina se cristalizarón y su rostro se tornó tenso.

-Litzy no lo puede dejar pasar señor-.
-¡Maldita sea! ¡Litzy!-.
-¿Qué demonios sucede aquí?- dijó una voz fría.

Subí mi vista y en la cima de las escaleras se encontraba Mariana Nott.

Portaba un vestido azul con un largo decente.

Sus ojos marrones me miraban sin expresión alguna, pero por su rostro supe que quería saber el motivo de mi visita.

Mi madrina pusó una mano en el barandal y bajó las escaleras con suma elegancia hasta posarse delante de mí.

-Ahijado- dijó con monotonía y me removí nervioso.
-Madrina, ¿puedo hablar con su esposo?-.
-Adelante querido, está en su despacho-.

Sin esperar ninguna otra cosa me dirigí allí y abrí la puerta sin llamar antes.

Daniel revisaba unos papeles, al verme se quitó los lentes y se masajeó las sienes.

-¿Qué quieres Malfoy?-
-Lo sé todo-.

Daniel me miró sorprendido, pero inmediatamente esbozó una risa burlona.

-Ya era hora, no era posible que Hermione escondiera a Tammy de tí en todo momento-.
-Sé que Harry y Astoria se han separado y que quiere recuperar a Hermione-.
-Eso también lo sabía-.
-Sé que Chris volvió por Hermione al igual que yo-.
-Eso igual lo sé- dijó mientras garabateaba con su pluma sobre los papeles.
-Sé que estás pasando por problemas económicos y ocupas de mi apoyo en la empresa-.

Daniel tiró la pluma y me miró con cansanció.

-¿A dónde quieres llegar con todo esto Malfoy?-.

Saqué una pequeña bolsa llena de galeones y la aventé sobre su escritorio.

Yo no iba a permitir que me la robarán nuevamente.

-¿Cuánto quieres por venderme a Hermione? Ponle precio-.