Escuadrón SobreNatural. Primer libro.

Capítulo 22

***Narradora***

**En el bosque de Smithen**

No era exactamente en tierra, sino en el cielo de la tarde, donde Hiccup, Flynn y Jacks se encontraban volando sobre Brinca Nube.

Flynn durante todo el viaje quedó dormido apoyado sobre la espalda de Jack, el peliblanco estaba detrás de Hiccup quien tenía el mando sobre Brinca Nube.

-¿Sigues despierto? –Murmuró Hiccup a Jack sin perder de vista las tierras de Londres.

-Por desgracia –Contestó Jack con cansancio, con la mirada decaída y débil pero aun manteniendo su seriedad.

-¿Cómo sigue tu herida? ¿Sirvió la pomada?

-¿Sirvió? –Jack sonrío de lado con sarcasmo – Creo que sólo sirve para el momento, me lleva quemando desde hace unas horas.

-¿Y la pomada?

-La olvidé.

-¿Qué eres? ¿Retrasado? – Hiccup se giró a sus espaldas para verle a los ojos, a la mala cara de un muerto que caminaba y que aun abría los ojos – Eso te ayudaba.

-Me ayudaba pero por un momento, esto me seguirá matando, sólo aplaza la muerta Hiccup, al igual cómo es mi vida.

En cuanto dijo eso Hiccup se giró pensando en las palabras de Jack.

-Sólo hay que aceptarlo –Murmuró con ronca voz Jack – Tengo que morir, lo haré tarde o temprano.

Hiccup dejó las palabras de Jack en el aire, en el frío viento por donde volaban. Iba a continuar pero frunció su ceño asombrado de ver un gran castillo de Hielo sólido en la lejanía del bosque, en donde las personas no tienen rumbo ni destino hacia donde se ubicaba.

Mientras el castaño se había quedado asombrado de tal imagen, Rapunzel continuaba corriendo entre lo frío del bosque.

Las piernas le calaban de tanto correr y su corazón pareciera tenerlo en la garganta, podía sentir y escuchar cada latido de él.

Los árboles justo se terminaron cuando ella frenó asombrada de ver el gran castillo de hielo frente a ella.

-¡Rodéenla! – Gritó la mujer quien patinó de frente a ella para apuntarle y cortarle la posibilidad de escapar.

Rapunzel se giró para continuar corriendo pero un chico de piel morena, cabellos largos y castaño, le apuntó de igual manera.

Rapunzel trató de buscar algo útil más que la pequeña daga que llevaba, pero nada le iba a brindar seguridad.

-Ni se te ocurra hacer un movimiento – Dijo el chico, Wasabi.

Después de los cielos cayó a su lado un monstruo azulado con garras, Rapunzel comenzó a respirar con velocidad, no quería dejarse atrapar y no lo haría.

Levantó su brazo para lanzar la daga hacia Wasabi, él se distrajo y por lo tanto fue a atacarlo, pero en el intento falló.

Gogo le lanzó un disco volador amarillo directo a la nuca, no la desmayó pero si la hizo caer de dolor.

-Tenemos orden de arrestarte, un movimiento más y quedarás sedada con las balas ¿Entendido?- Dijo con rudeza Gogo debido a su furia y dolor después de haber dañado a su amiga.

Ella, caída en la tierra cubierta por una gruesa capa de nieve, miró hacia a ella quien de fondo tenía los cielos.

Entonces Rapunzel sonrió al ver lo que se aproximaba, miró a Gogo y con malicia contestó.

-Entendido.

Gogo iba a hablar pero en lugar de eso, surgió un potente rugido de los cielos, los tres Guardianes se giraron y miraron a un dragón volar hacia a ellos, Hiccup, quien se colocó la máscara encima, tomó su espada de fuego para ahora saltar contra la chica.

-¡Vamos! – Dijo Hiccup detrás de la máscara.

Rapunzel levantó su pierna para patear a Wasabi, mientras que Flynn y Jack bajaron del dragón para dejar a Brinca Nube atacar al monstruo de Fredd.

-¡Deberíamos llamar control animal! – Gritó Fredd quien lidiaba con los mordiscos del animal.

-No contamos ahora con ellos –Contestó Wasabi quien encendió sus láser en brazos.

Jack intentó levantar la poca nieve que había, pero no lo conseguía, apenas y podía levantarla. Flynn llegó a ayudar a la mujer que tanto adoraba, golpeando a sus espaladas a Wasabi.

-¡Gogo! ¡Llámalo! – Gritó Wasabi quien amenazó a los enamorados con los lásers.

Gogo entonces obedeció.

-¡Cuidado! – Hiccup disparó la espada de fuego directo a Wasabi, quien lo recibió en el pecho para después hiciera reacción y saliera explotando a unos metros.

Rapunzel y Flynn se miraron para cortar la poca distancia entre ellos con un abrazo.

-¡Hey! – Hiccup dijo cuándo enfrentó con puño a Gogo – Ocupo ayuda.

El dragón abrió grande el hocico en dirección a Gogo pero un potente rayo azulado impactó su cabeza contra el suelo.

Todos los presentes tomaron atención del acto y resultó ser el oficial Hamada quien llevaba en manos un arma de plasma para noquear a los enemigos.

Portaba un uniforme de Guardián y unos grandes puños y botas rojos con morados.

-No lo repetiré – Dijo apuntándole a Jack quien era el único alejado de la pelea – Entréguense, ahora.

Pero no hubo respuesta por su parte, sino por parte de un gran monstruo de nieve rugiendo a las espaldas de ellos.

Se giraron y observaron al final del puente de hielo que conducía al castillo al gran y potente monstruo de nieve con garra de hielo sólido.

De su lado, surgió la figura imponente de Elsa, quien miraba con odio el acto de aquella pelea fuera del reinó que apenas construía.

Miró a sus ex compañeros y a los invasores.

-Yo tampoco lo repetiré –Dijo Elsa levantando sus palmas al niel de sus costillas con las palmas extendidas haciendo surgir varias espinas de hielo sólido alrededor de la batalla – Largo.