Capítulo 27

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***Narradora***

"La había perdido de vista después de que le dispararan en la pierna".

-¡Corran! –Las voces de los hombres gritaban hacia la destrucción que estaba pasando en los laboratorios de encierros a mutantes.

El joven peliblanco había perdido de vista a la chica platinada, a su lado estaba la pelirroja de su compañera, ambos cuidándose de los escombros que caían sobre ellos.

-¿Dónde están los demás? –Preguntó Merida a gritos debido al ruido de la catástrofe que sucedía.

-¡En esa dirección! – Señaló hacia los escombros que hacían con hielo sólido en espinas.

-Vamos.

Ambos tomaron aliento para ponerse en pie, tomar vuelo y comenzar a trepar los escombros. La chica era ágil y flexible subiendo, en cuanto a Jack, le servía el impulso del vuelo para no caer.

-¡Ahí! – Merida dijo llegando a la cima y viendo al castaño pecho abajo, evitando los rayos azulados que salían de un lado a otro - ¡Hiccup!

Este levantó la mirada y la miró, quiso ponerse en pie pero regresó al suelo a punto de recibir un disparo.

-Chimuelo – Se dijo así misma, se dio vuelta y observó que seguía inconsciente – Tiene que despertar.

"Todo era un caos, ella había llegado siendo ella, siendo Elsa, pero el enojo detectó el espíritu de Pitch en su interior, se apoderó de toda ella".

Jackson bajó resbalando entre la tierra, se hincó para evitar también alguno de los disparos o rayos.

Comenzó a arrastrarse para llegar al castaño.

-¡Hiccup! ¡Muévete!

El castaño se arrastró para intentar llegar a él, Jack se giró y vio su figura, con las manos en alto, rodeada de un aura azul por todo el cuerpo. Su cabello volaba con violencia mientras seguía atacando con sólo tener las manos en alto.

-¿Tienes algo en mente? ¡No escucha a nada ni nadie!– Hiccup gritó también debido al ruido.

Abrió la boca para contestar pero fue interrumpido.

-¡Disparen!

Era un grupo de cuatro oficiales, a la cabeza estaba esa chica de los discos giratorios, sus compañeros hacían en el suelo inconscientes, incluyendo a Tadashi.

-Intenta tomar a quien puedas con vida – Explicó Jack – Tengo una idea, y no te aseguro nada.

Le miró extrañado, aun como pudo se puso en canclillas para avanzar hacia los cuerpos de sus dos compañeros desmayados.

"Me puse en pie, con la cabeza en alto para avanzar hacia ella, todo mientras lanzaba a los guardias sin el más mínimo esfuerzo".

-¡Elsa! ¡Elsa! – Gritó Jack quien puso una mano al frente debido a las ventiscas que estaba surgiendo.

"Se dio vuelta y me miró a los ojos. Su color de ojos no era su azulado sino el ámbar de ese hombre dentro de su mente".

-¡Elsa! ¡Sé que me escuchas! ¡Tú no eres esto!

-Apártate – Le dijo entre dientes la platinada – Si no piensas hacer lo que te pedí entonces corre.

-No, no lo haré.

El frío comenzaba a fortalecerse en el lugar, la escarcha comenzaba a hacerse hielo sólido y a congelar lo que estuviera a su paso, incluyendo los cuerpos inconscientes.

Escuadrón SobreNatural. Primer libro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora