CAPÍTULO 8

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Ya estoy en la habitación que me dijo Akiyama, es pequeña pero bastante acogedora.
No paro de pensar en como reaccionarán todos al verme mañana.
Pero ahora no debo pensar en eso, tengo que dormir, estoy segura de que será un día muy largo.

Ocho de la mañana... Ya es hora de levantarse e ir ante todos... Así que me levanto y salgo de la habitación. Puedo escuchar a Yuki, Keiji y Kiatzu en la sala.
-Buenos días.
Veo que Akiyama sale de una de las habitaciones.
-Buenos días...
-El resto ya se han ido, solo están ellos.
-¿Yuki no va con Ichiro?
-Ella ya vigila completamente por su cuenta, sale un poco más tarde, y bueno, ya que Kiatzu se queda aquí con Keiji pues siempre tienen charlas mañaneras. Pero bueno, eso ahora no es lo importante. Venga, vamos con ellos.
Asiento algo dudosa y sigo a Akiyama, cuando estoy a punto de salir del pasillo me hace una señal para que espere y él sale.
-Chicos, hay alguien que quiere veros.
Keiji, Yukiko y Kiatzu se miran extrañados entre ellos.
Akiyama me mira y asiento, yo salgo del pasillo con los puños apretados.
Los tres me miran boquiabiertos sin mover un solo dedo.
-Anoche Hikari volvió aquí, no está muy segura de su decisión, pero estoy seguro de que entre todos haremos que se sienta cómoda de nuevo.
Todos seguían en silencio, al segundo, Kiatzu se levanta rápidamente y me da un fuerte abrazo dejándome prácticamente sin aire.
-¡Por fin! ¡Pensé que tardarías más en volver o que ni siquiera lo harías!
-Kiatzu... Me estás...
-¡Te hemos echado muchísimo de menos!
-Me-me estás ahogando...
-Oh, sí, perdona.
Kiatzu se separa y sonríe, después Yuki se levanta y se queda en frente mía mirándome fijamente, después baja la mirada.
-Odio... Odio... (Levantando la mirada bruscamente) ¡Odio tu pelo!
Al escuchar eso me quedo sin saber que decir, Yuki se cruza de brazos.
-¡Podrías haberte arreglado un poco antes de venir! (Suspira)
Keiji comienza a reír y se acerca también.
-Se te ha echado mucho de menos, no hagas caso a lo que ha dicho Yuki (ríe).
-¡Es la verdad!
Yuki infla las mejillas y continúa cruzada de brazos. Akiyama suelta una leve risa.
-Yo os dejo, tenéis mucho de que hablar.
Akiyama se va y rápidamente Kiatzu me agarra de la mano y hace que me siente en uno de los sofás, él se sienta a mi lado y Keiji y Yuki en uno del frente.
-Bueno, ya puedes tener una buena explicación para estar estos dos meses desaparecida.
Iba a responder a Yuki pero Keiji me interrumpe.
-Tranquilidad; lo primero de todo; ¿quieres una taza de café, Hikari?
-(Niego) Gracias.
-Venga, no seas tímida, Keiji prepara muy bien el café y...
-Lo sé Kiatzu, estuve aquí mucho tiempo.
-¡Es verdad! (Rascándose la nuca) Se me olvidaba.
Yuki pone su mano en su frente y resopla.
-Hay que ver lo olvidadizo que eres.
-¡Hey! Que yo sepa tú tendrías que estar ya en la calle.
-¡Es verdad! ¡Se me había olvidado por completo!
Yuki se levanta rápidamente, va hacia el pasillo, a los pocos segundos se oye un portazo y después ella aparece con su máscara y su capa ya puestas.
-¡Luego nos vemos!
Yuki sale rápidamente de Kaisaki y Kiatzu ríe.
-Es muy gracioso cuando se olvida de algo. Por cierto, Keiji, ¿quedan granos de café?
-Sácalos de la despensa.
-(Suspira) Siempre me toca a mí.
Kiatzu se levanta y se va, yo me quedo pensando, ¿cómo han sido capaces de comportarse tan normal?
-Hikari.
Kiatzu me saca de mis pensamientos haciendo que le mire.
-Gracias (sonríe).
-¿Por qué?
-Por volver. Sin ti nada ha sido igual, así que gracias (sonríe).
Le doy una leve sonrisa a Keiji, después él se levanta.
-Voy a ver que hace Kiatzu, siempre acaba haciéndose un lío con tanta caja.
Keiji se va y yo me quedo ahí sentada. Me pregunto como reaccionarán los demás, especialmente Ichiro... Le dije que no volvería...
En ese momento, vuelve Kiatzu.
-Hay que salir a por café, ¿quieres acompañarme?
Antes de responder, Kiatzu me agarra del brazo y me lleva hasta la puerta.
-¡Pues claro que quieres! ¡Ya verás que bien lo vamos a pasar!
Kiatzu y yo salimos y una vez fuera me suelta el brazo y comenzamos a caminar.
-Tú pelo de antes era flipante. Lo he visto en la foto que te sacó Ichiro. Se ve que te tiene mucho cariño y...
-No...
-¿Cómo?
-Nada...
-Vamos, cuéntamelo, no puedes dejarme ahora con la intriga.
-Es largo de explicar...
-Tenemos todo el camino a la tienda, el de vuelta ¡y mucha vida por delante! Y si tengo que esperar a que Ichiro me lo cuente me volveré demasiado viejo como para procesar la información.
-¿Qué te hace pensar que yo voy a contártelo?
-Pues que somos amigos, y los amigos se cuentan las cosas.
-(Suspiro) Está bien.
-¡Genial!
-Pero ahora no.
-¡¿Qué?!
-Has insistido para que te lo cuente y yo he aceptado pero no he dicho cuando iba a hacerlo.
-Ya veo... ¡Eres muy inteligente! Pues bien, seguiré insistiendo para que me lo cuentes lo antes posible.
Suelto una leve sonrisa y asiento, después ambos continuamos caminando. Kiatzu tiene una personalidad muy peculiar.

Kiatzu y yo ya hemos comprado el café así que estamos volviendo a Kaisaki.
-La tienda está un poco lejos, pero ha sido un paseo divertido. Por cierto Hikari, entiendo que le tengas tanto afecto a Kaisaki. Ellos me han aceptado y tratado muy bien a pesar de que pertenecí a la ABG. Sobretodo Yuki, con ella es con la que mejor me llevo, estuvo muy triste cuando te fuiste.
-Kiatzu... Ella es como una hermana pequeña... Cuídala, ¿vale?
-¡Por supuesto! (Rascándose la nuca) Aunque ella sabe cuidarse muy bien y me ha sacado de muchos líos. ¡Pero aún así la cuidaré!
Asiento y sonrío levemente. Kiatzu me da bastante confianza a pesar de tener esa personalidad tan alocada.

¿Yo un ghoul? - Segunda temporada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora