CAPÍTULO 10

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Voy a la habitación y cojo la chaqueta para después salir y dársela a Ichiro.
-Aquí la tienes.
-(Poniéndosela) Bien, pues vamos.
Miro a Ichiro extrañada y él me coge la muñeca, después salimos fuera.
-¿Dónde vamos?
-Ya lo verás.
-¿Sin máscaras y sin nada?
-Da igual.
Ichiro continúa caminando y yo le sigo. No tengo ni idea de a donde quiere llevarme.

Tras un rato caminando llegamos a unas calles completamente vacías.
-¿Qué hacemos aquí?
-Paciencia.
Ichiro sigue caminando hasta que llegamos a un callejón muy estrecho.
-Una advertencia; no te asustes.
-¿Por qué iba a asustarme?
-Advertida estás.
Ichiro entra al callejón y yo le sigo. Al final hay una puerta de madera y encima un cartel el cual decía "El ojo".
Miro extrañada a ese cartel, Ichiro entra y yo le sigo. Era una taberna con paredes rojas, suelos negros, bastantes luces y lleno de personas. En ese momento se nos acerca una chica rubia.
-¡Ichiro! ¡Qué sorpresa!
-Hola. Mira, he traído a la chica que te dije.
Ella me mira de arriba a abajo.
-Un placer, soy Yazako, puedes llamarme Yaza.
-Yo soy Hikari.
-Pareces joven, ¿edad?
-17.
-Yo tengo 19, no nos llevamos tanto. Ichiro vino aquí por primera vez hace un par de meses, frecuenta mucho este lugar, empezó a hablar sobre ti hace unos días. Dice que...
-Yaza, no hacen falta detalles. Ahora si nos disculpas, vamos a sentarnos.
-Claro, ¿dos cafés?
-Sí.
-Bien, pues os los llevo ahora. Un placer, Hikari.
Yaza se va e Ichiro y yo nos vamos a una mesa del fondo.
-Ichiro, ¿por qué me has traído aquí?
-Yaza tenía ganas de saber quien eres.
-¿Cómo descubriste esto?
-Por casualidad mientras vigilaba.
-¿Y aquí hay ghouls o...?
-Es una taberna para ghouls.
-O sea, que Yaza también lo es.
-Exacto. ¿Y sabes por qué la taberna se llama así?
-No. ¿Por qué?
-Porque el jefe de esto perdió un ojo contra un miembro de la ABG.
-¿Y quién es el jefe?
En ese momento llega Yaza con los cafés.
-Aquí los tenéis, que aproveche.
Ichiro y yo agradecemos al unísono y ella se va. Justo cuando iba a hacer la pregunta de nuevo se acerca un chico pelinegro, alto y con gafas de sol. Ichiro me mira.
-Ahí lo tienes.
Miro al chico detenidamente, es muy joven para ser jefe.
-Vaya Ichiro, veo que vienes muy bien acompañado, ¿ella es la chica de la que tanto hablas?
-Sí, ella es, Hikari.
-Un placer Hikari, yo soy Nishimi.
-Encantada.
-¿Te gustaría salir por ahí esta noche?
Iba a responder pero Ichiro me rodea por los hombros con su brazo.
-Lo siento, pero es mi novia.
-(Ríe) Así que por eso hablabas tanto de ella, que callado te lo tenías.
Nishimi da una palmada en el hombro a Ichiro y se va. Yo aparto su brazo de mis hombros y me cruzo de brazos.
-¿Cómo que soy tu novia?
-No iba a dejarte en paz. Es muy deliberado pero sabe respetar lo que es de otros.
-Puedo defenderme sola.
-Lo sé. Pero también quería saber la sensación que tiene decir que eres mi novia.
-¿Cómo?
-No entiendo por qué te resistes tanto. Antes de todo eso que ocurrió fuimos sinceros, nos dijimos todo lo que sentíamos, y te recuerdo que nos besamos.
-Lo sé, lo sé, pero...
-¿Pero qué?
-Es igual, déjalo. Si vamos a hablar de esto mejor me voy.
-Está bien, cerramos el tema, pero deja al menos que pase tiempo contigo sin discusiones y demás de por medio.
Asiento y bebo un sorbo del café.
-Hikari, ¿en estos dos meses que has estado haciendo?
-¿Es importante?
-Tengo curiosidad.
-Es largo de explicar.
-Tenemos tiempo.
-Pero no tengo ganas.
-Está bien. Pero me gustaría que me contases cosas, no entiendo por qué estamos distanciados, el pasado no puede afectar y...
-Nunca hemos estado precisamente unidos...
-Ha habido momentos en los que sí.
-Tú lo has dicho; momentos... Pero somos tan diferentes que es completamente imposible que algo pueda salir adelante...
-Ahora eres más parecida a mí.
-Dale las gracias a tu padre...
Aprieto el puño al recordar todo, Ichiro pone su mano encima.
-No lo recuerdes, eso ya ha pasado. Y ya no podrá hacer nada porque está muerto.
-Pero queda el subdirector... Ese hombre ha desaparecido del mapa... Es como si la tierra se lo hubiese comido...
-Ese hombre ya no está...
-¿Cómo?
Ichiro quita su mano de encima de la mía y se levanta.
-Es hora de irnos. Se hace tarde.
Ichiro me coge la muñeca haciendo que me levante, nos vamos de ahí y al pasar por la barra deja unas monedas en la mesa.
-Nos vamos Yaza.
-Un placer Ichiro, y encantada de conocerte, Hikari.
Ichiro sigue agarrando mi muñeca haciendo que salga de la taberna detrás suya.
-Ichiro, cuéntame que ocurre.
-No ocurre nada.
Decido soltarme del agarre y le miro fijamente.
-¿Qué ha ocurrido con ese hombre?
-Tengo que irme a vigilar.
Ichiro se va pero esta vez soy yo la que le agarra de la muñeca a él.
-Me he pasado dos meses buscándole por todas partes, tengo derecho a saber que le ha pasado.
-No sigas dándole vueltas a eso, olvida a ese hombre, ya no está.
-¿Y por qué no está? ¿Cómo lo sabes?
-Yo lo mate una semana después de que te fueras... Lo encontré y acabé con él. No iba a dejar que se saliese con la suya después de lo que te hizo mi padre.
-¿Cómo? ¿Me estás diciendo que lo mataste tú?
-Sí. Tenía que hacerlo, sabía que eras tú la que quería matarlo, pero al verle pensé en ti, te habías ido por culpa de él, él te alejo y yo no pude evitar hacerlo...
Suelto el agarre de Ichiro y lo miro llena de furia.
-Debería ser yo la encargada de matarle, yo tendría que haber acabado con él... Me he pasado dos meses buscando para nada... Genial... Muchísimas gracias...
Me voy de ahí sin decir nada más. No me puedo creer lo que acaba de contarme Ichiro...

¿Yo un ghoul? - Segunda temporada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora