Atados por el destino (libro #1)

Capítulo 31: de nuevo en casa.

Dos meses, ese era el tiempo que llevaba sin tener contacto con alguien, nadie sabía dónde estaba, ni siquiera Nicholas; pensé que, después de enterarme de la nueva vida que llevo en mi vientre, seríamos solamente los dos, pero desafortunadamente Nicholas me encontró. Sé que es algo egoísta de mi parte el no pensar en Nicholas como padre de mi bebé, pero estaba dolida, me trató horrible y solo quería ser feliz.

¿Cómo me enteré de que estaba embarazada? Eso es lo más gracioso de todo esto, porque ni siquiera había experimentado las náuseas matutinas o los mareos que suelen darle a la mayoría de las mujeres antes de hacerse una prueba. Lo cierto fue que me preparaba para la llegada de mi periodo, el cual creí que llegaría como todos los meses, por lo que decidí salir a comprar algunas cosas necesarias, como tampones y toallas sanitarias; sin embargo, al pagar, la farmacia estaba dando como regalo pruebas de embarazo, ¿Por qué? Ni yo misma lo sé.

Fue divertido al principio, nunca me había hecho una prueba de embarazo y quería saber que se sentía. Lo sé, soy una patética chica de veintiséis años, que no tiene nada que hacer y decidió hacerse una prueba de embarazo porque estaba aburrida y escondida en una isla. Mi sorpresa fue enorme al ver que esta había dado positiva. Pensé que había sido un error, incluso me reí, pero luego las dudas volvieron a mí, así que decidí comprar tres pruebas más las cuales también marcaban dos lindas líneas indicando que estoy embarazada.

Me asusté, me acobardé porque sabía que solo seríamos mi bebé y yo, ya que no contaba conque Nicholas quisiera volver a mí, ahora más que esperaba un hijo suyo y él estaba rehaciendo su vida con la estúpida de Samantha. Decidí que no quería visitar a un médico hasta que regresara a Londres, pero para mí mala fortuna, mi dieta no era muy buena que digamos y me sentía pésimo; no sé qué hubiese sido de mí y de mi hijo si Nicholas no hubiese llegado a tiempo.

Me duele saber que estamos así, yo lo amo, pero me lastimó con sus acciones y ahora no sé qué hacer. Lo conozco, sé que no se irá de mi lado hasta que esté completamente bien, estemos bien, y en parte me agrada porque no ha dejado de pensar en mí como yo en él.

Sabía que La Paz iba a durar poco cuando un enojado Tyler abre la puerta de mi habitación del hospital con violencia, seguidos de mis dos mejores amigos.

-. ¡Tú! - exclaman mis amigos enojados-. Dijiste que no lo volverías a hacer, pero de nuevo saliste huyendo. ¿Cuándo aprenderás a enfrentar tus problemas, en vez de escapar? ¿Crees que eso es lo mejor? Si no hubiese sido por el idiota de Nicholas, tal vez no estuviésemos aquí.

Así que él les dijo, no lo culpo, si la situación hubiese sido al revés y estuviese desesperada por encontrar a mi esposo, también los hubiese llamado.

-. Lo siento...-murmuro afligida-. La situación solo me rebasó. No creí que mi historia con Nicholas se iba a repetir, así que solo....

-. Solo supiste hacer lo que mejor sabes hacer- termina Allison por mí y yo asiento con la cabeza gacha-. Amiga lo siento- se acerca y me abraza, siento mis ojos cristalizarse y todos lo notan ya que me dan un abrazo grupal-. Estos dos meses han sido un infierno. Después de lo sucedido con Nicholas, tú desaparición, la paliza de Samantha....

-. ¿Quién le pegó a Samantha?

-. Pues-Allison se sonroja y todos reímos, por eso Amo a mi amiga-. Digamos que me la encontré un mes después de tu desaparición; quiso hacerme creer que tenía una relación con Nicholas e intentó alardear sobre eso, sin embargo, Nicholas negó el tener contacto alguno con ella por lo que al final me cansó y tal vez...mi puño haya impactado su cara.

-. ¡Allison! -exclama Patrick.

-. ¿Qué? - se encoge de hombros restándole importancia al asunto-. La perra se lo merecía, digamos que me desquité por Grace.