La batalla continuaba fuera, era asombroso el poder que llegábamos a tener con las armaduras, los enemigos caían como si fueran de papel, miles de hojas derribadas de un viejo árbol en otoño, no sentía cansancio, no sentía dolor, era como si la armadura me volviera un ser indestructible, pero a la vez sentía como si ella en cierto modo me guiara, como si una voz en mi cabeza me dijera que debía hacer, como debía pelear, hasta como me debía sentir… La batalla se alargaba y por fin frente a nosotros estaban los líderes acercándose listos para la batalla, esta vez se preparaban para dar el todo por el todo, era eso o dejar que sus vidas fueran devoradas para complacer las exigencias de su señor. Astaroth se preparó con su gran Hacha, la última vez no se dignó si quiera a dar pelea con ella, pero en esta ocasión no solo la blandió con toda su capacidad sino que se dedicó a usarla cargada con Aura para devastar todo aquello que pasara por delante de ella disminuyendo a casi nada la posibilidad de error. A su vez Abadon de la misma manera cargo su cuerpo completo con Aura atacando de una forma un tanto diferente a la de Astaroth, el utilizaba el aura como una extensión de su cuerpo, lo cual le permitía golpear a largas distancias por medio de la ráfaga de Aura que emanaba de su cuerpo, sus brazos eran como largos látigos que arrasaban golpeando a lo largo de 5 metros, tal vez más. Para enfrentarlos nos dividimos en grupos de dos personas, Akanael y Atasuke atacarían a Astaroth mientras que Xion y yo nos encargamos de combatir a Abadon. Nosotros estábamos entre brazo y brazo recibiendo cada uno de los azotes brutales que se avanzaban sobre nosotros, teniendo como única defensa nuestras espadas
-Xion: Papa, debemos hacer algo
-Xilio: cálmate, estoy pensando
-Xion: pero apúrate que si seguimos así los viejos nos van a ganar
-Xilio: para ti todo es un juego
-Xion: es que si es un juego todo es más divertido
Akanael y Atasuke no tenían tantos problemas en aproximarse a Astaroth, en realidad ellos lograban hasta acertar golpes contra él, pero o su armadura estaba muy bien hecha o ellos estaban distraídos, por más que sus golpes lo asestaran Astaroth continuaba su ataque como si nada, aparte su espada era el peligro más grande el tan solo sentir que esta te rozara era recibir un golpe sorprendente más de una vez Akanael termino retrocediendo para evitar que la letal arma acabara con ella
-Akanael: debemos quitarle la espada es la única manera de que lo podamos detener
-Atasuke: podemos quitársela, pero después debemos preocuparnos de cómo nos desharemos de el
-Akanael: la armadura debe tener un sello estoy segura de ello
-Astaroth: dejen de parlotear tanto Jinetes, me aburro, diviértanme
La espada pasó a toda velocidad horizontalmente obligando a ambos a arrojarse al suelo mientras pasaba
-Atasuke: yo lo entretendré, tu encárgate de buscar si su armadura tiene algún sello
Akanael asintió con la cabeza mientras Atasuke desplegaba sus alas volando sobre Astaroth para llamar su atención. Mientras tanto nosotros seguíamos recibiendo golpe tras golpe los azotes de Abadon
-Xilio: separémonos, será más fácil evitar sus golpes y si se concentra en uno el otro podrá aprovechar
-Xion: ese es tu gran plan???
-Xilio: se te ocurre algo mejor
-Abadon: JAJAJAJAJAJAJJAJA pagaran por cortarme mis alas infelices
Entonces Abadon levanto ambos brazos para atacar con los dos a la vez
-Xilio: Ahora!!!
Los dos corrimos en direcciones opuestas alejándonos el uno del otro lo más posible, el intentaba golpearnos pero el tener que voltear de un lado al otro ver a cada uno antes de atacar lo volvía lento y nos daba la oportunidad de acercarnos para atacarlo, así poco a poco nos acercamos yo pude golpear a Abadon en el estómago contundentemente con mi espada en el pecho mientras Xion aprovecho y corto con ambas en la espalda de el
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El Ángel caido (Por edicion)
RomanceLa cacería de uno de los ángeles del cielo llevara a Xilio a proteger a una extraña mujer que consigue herida en una catedral. Viéndose en medio de una guerra entre cielo e infierno por obtener a Ivette, donde solo el y los jinetes podrán defenderla...