"PRÓLOGO"
No podía decir si lo que veía era cierto, tenía miedo de que todo terminará tan rápido que ni cuenta pudiera darme.
-¡Sinan! ¡Sinan reacciona! Tenemos que ir a despedirlos...
Mi madre me hablaba pero sólo veía sus labios moverse, sin tener idea de que era lo que me decía, sentí su mano tomarme del brazo y jalarme hasta la salida del gran nido de dragones donde vivíamos. Ahí estaban ellos, y entre todos ellos también se encontraba ella, ninguno se veía atemorizado, todos estaban emocionados, tanto que no podían contenerlo y sólo querían irse.
Mi madre y su dragón se acercaron a aquellos jóvenes dragones, ya deberían saberlo, el dragón de mi madre es un Cellisca, único en su especie, al menos por este lado del mundo.
-Hoy inician su propio camino, me alegra saber que los Furia Nocturna dejarán de estar extintos a partir de este momento, pero deben saber que siempre tendrán un hogar aquí, el lugar que los vio nacer...
Nubosa, el dragón de mi madre y a su vez, madre de los Furia Nocturna, camino aún más cerca, regalandoles afectó por última vez, llegó el momento de la despedida. Mi madre también se despedía de ellos, éramos una gran familia que ahora se quedaría sin Furias Nocturnas.Entonces ella camino hasta mi, su mirada se agachaba hasta el punto de tener que verme hacia arriba, sus pasos eran lentos y parecía afligida por algo.
Me mantuve quieto, inmóvil, no haría ningún movimiento, aunque no soporte mucho, corrí a ella y la abracé, comencé a llorar porque tenía que perderla. Ella y yo tuvimos un gran vínculo desde que éramos pequeños, se que no es mucho tiempo, pero es lo suficiente como para encariñarse. Sus hermanos la llamaron para irse, fue ahí donde nos separamos; Sus alas se abrieron y todos aletearon a la misma vez, con un grito de su madre todos salieron volando rápidamente.
Agache la cabeza, cerrando los ojos tan fuerte como me fue posible, intentaba mantener las lágrimas en su lugar pero no me era posible.
-Vamos Sinan, tenemos que apresurarnos, hoy es el día del conteo mensual de huevos... Y no quieren llegar tarde, ¿Cierto?
-Ya voy...
Al abrir los ojos, me sorprendí al verla frente a mi, mi mejor amiga se quedó conmigo, no podía creerlo y al ver la sonrisa de mi madre, supe que era verdad.
Sin pensarlo dos veces corrí hacia ella y la monté, despegamos del suelo tan rápido que escuche a mi madre preocuparse, eso no nos importó, ella y yo ya teníamos experiencia, practicabamos un poco todos los días y a escondidas de mi mamá, el conteo de huevos seria chuleta de Yak comida.Pasó un mes antes de que mi madre me permitiera volar como es debido e incluso mi primer regalo como jinete fue una silla de montar que mi madre consiguió especialmente para nosotros.
Un día, me encontraba equipando la silla a mi dragón a la misma vez que mi madre cepillaba el plumaje del suyo.
-Mamá, ¿Qué hay más allá de este nido de dragones?
-Pues está el mar...
-Ja ja... No, ya enserio...
-Hay islas, dragones salvajes de diferentes especies, más mar...
-¿Habrá humanos como nosotros?
-Los hay, viven en tribus ubicadas lo más lejano posible de nosotros...
-¿Porque estamos tan lejos?
-¿Porque te dio la preguntadera?
-Algún día tenía que hacerlo mamá, no se nada del mundo exterior, toda mi vida la he pasado aquí...
-Sinan... ¿No pensaras en salir de la seguridad del nido?
-¿Qué? Claro que no, sólo quiero saber las cosas que nunca me has explicado... Por ejemplo, ¿Donde está mi padre?
-Por cierto Sinan, recuerda que hoy eclosionan las crías de Nadder Mortífero...
-¡Cierto! ¡Gracias por recordarme mamá!
Monte a mi dragón y salí volando rápidamente hacia el nido, mi madre no me hacía tonto, se que no quiere decirme la verdad pero por ningún motivo me perdería el nacimiento de esos dragoncitos, es mi segunda especie favorita.
Al llegar al gran nido, me encargue de los bebés Nadders, disfrute el estar con ellos, después los entregue a sus madres y me marché junto con mi dragón; Ella se detuvo en la salida, hizo un sonido extraño y acaricie su cabeza. Nos miramos.
-Esta bien, sólo una vuelta y nos regresaremos antes de que nuestras mamás se den cuenta...
-Graaw... :3
Fue tan rápido salir, el mar era más grande de lo que pensaba, aún viéndolo desde el cielo, el sol era más tibio y hacia más viento. Incluso Diurna disfrutaba el hacer maniobras y soltar algo de plasma hacia la nada. Nos emocionamos que iniciamos maniobras nuevas y gritabamos eufóricos, jugabamos entre las nubes, era asombroso.
De pronto nubes oscuras con relámpagos comenzaron a aparecer por encima de nosotros, rayos caían y Diurna optó por maniobra evasiva; Un dragón bastante furioso se dejó ver, su cuerpo irradiaba electricidad y al parecer no le caiamos bien.
-Una tormenta de la nada y un dragón molesto, justo lo que necesitábamos...
El dragón lanzó rayos por la boca que logramos esquivar y Diurna contrarresto ese ataque, algo que sólo logró enfurecerlo mucho más. La verdad no se cuanto tiempo estuvimos luchando contra ese dragón, sólo se que en su último ataque, Diurna uso el ataque que heredó de su madre y congeló desde el rayo hasta el hocico del enemigo.
-Bien hecho, vamos a casa antes de que se le ocurra liberarse...
El enemigo cayó al agua, sabía que se liberaria, Diurna volaba por encima del océano, directo a casa, o eso creíamos. Cuando el dragón salió, nos persiguió pero por alguna razón ya no nos atacaba con sus rayos, después de tanto volar, logramos perderlo en una isla extraña en donde nos detuvinos a descansar.
-Qué extraño, debimos llegar al nido hace unas horas...
-¿Graaw?
-Si, también creo que nos perdimos... Nos van a matar cuando regresemos...
-Ggrrr...
-Si, sigamos volando, tal vez encontremos el rumbo de casualidad...
Al salir volando no imaginé que no estábamos ni cerca de casa, a la distancia, y después de volar otros kilómetros, se podía apreciar otra isla, el anochecer estaba llegando por lo que decidimos bajar ahí mismo para descansar y dormir.
-No debimos alejarnos tanto, chica...
-Grraaw :(
-Todo estará bien...
Me recargue en ella y acaricie su cabeza hasta que se quedó dormida, y todo fue mi culpa, nos metí en problemas sólo por no aceptar que mi madre tenía muy buenas razones como para ocultarme la verdad sobre el mundo exterior.
Aunque en mi naturaleza está el no arrepentirme de mis elecciones, mejor disfrutaré hasta que el castigo llegue a mi.
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Cómo Entrenar a Tu Dragón: El Legítimo Heredero.
FanfictionHan pasado años desdé que Hipo y My supieron algo de ellos, ahora su hijo tiene 14 años y ya es jinete de dragones. El más atrevido, arriesgado y estupendo jinete de dragones, quiza lo heredo de sus padres. Un mal día, Sinan y Diurna, terminan por...