Entre amor y drabbles.

Art.

AgustD era un exitoso pintor, conocido mundialmente por su talento y maravillosos cuadros que a su corta edad ya son exhibidos por famosos lugares. Todos querían saber más acerca de su vida pero él no daba datos personales ni mucho menos entrevistas; sin embargo un día le llegó una oferta que por alguna razón no podía negarse.

Era una reunión sólo para alumnos del área artística de la Universidad de Seoul. Aceptó con la condición de que sólo daría su charla, mostraría algunos cuadros y respondería algunas preguntas, luego de eso se iría rápidamente.

El día llegó finalmente, YoonGi estaba extrañamente nervioso desde que había despertado, pero ignoró el sentimiento.

—Estudiantes, hoy estamos orgullosos de presentar al artista del momento. Por favor, un gran aplauso para él.

El joven subió al escenario. Habló sobre sus años en esa misma universidad luchando arduamente por demostrar su talento, no miró atentamente al público hasta que llegó el momento de las preguntas, un atractivo chico se levantó con micrófono en mano y su delicada voz lo cegó.

—Señor AgustD, mi nombre es Park JiMin y me gustaría saber cuál es su inspiración al momento de crear sus obras.

—No es que piense antes, simplemente cuando el pincel toca el lienzo no se detiene hasta finalizarlo. Puede ser que mi mente inconscientemente mande recuerdos alegres.

Luego de esa pregunta YoonGi no podía quitar los ojos del alumno, contestó otras más pero sin mayor atención y dió por finalizado el acto. Se despidió de todos, agradeciendo por la atención y la invitación para retirarse. Quería encontrarse con JiMin para poder proponerle lo que había estado rondando en su mente desde que lo vió. Prácticamente corrió hacia la salida para poder agarrarlo a tiempo.

—¡Park JiMin! —gritó.

—S-señor, ¿Pasa algo? —habló sonrojado cuando llegó a su lado.

—Necesito hablar contigo, ¿Tienes tiempo ahora?

Así fue como el chico lo llevó a una banca situada en uno de los jardines de la Universidad.

—¿Qué necesita?

—Verás JiMin, supongo que conocerás mis obras.

—Por supuesto que sí, soy un gran fan de usted.

—Desde que te ví pensé en algo, y quiero saber si estás de acuerdo.

—Puede pedirme lo que sea. —le dió una sonrisa tan inocente y sincera que YoonGi sintió escalofríos.

—Quiero pintarte, por favor modela para mí. —lo miró a los ojos.

—¿A mí? P-pero señor, ¿Por qué querría hacer eso? ¡Nisiquiera soy atractivo! Muchos modelos profesionales querrían ese honor.

—No quiero a cualquier modelo. Te quiero a tí... sólo será posar y te pagaré lo que desees.

Se miraron fijamente a los ojos, cada uno con un pensamiento distinto en sus mentes, para YoonGi la persona que estaba frente a él era lo más cercano a un Ángel que había visto.

—Te daré un tiempo para que lo pienses, pero lamentablemente el plazo es sólo un par de días. Aquí tienes mi tarjeta, estaré esperando. —se levantó y le tendió el papel, el chico con manos temblorosas la tomó y asintió.

—Lo llamaré cuando tenga la decisión tomada.

Apenas pisó su estudio tomó sus materiales y se puso a pintar con una pasión que no tenía desde sus inicios. Terminó horas después, con la respiración agitada y transpiración en su frente, suspiró satisfecho y se levantó del banquillo. El nuevo cuadro eran dos manos queriendo tocarse pero una distancia se lo impedía, sus dedos apenas rozándose.