Playing like a Gigoló ~ [NamV]- Finalizada

Capítulo 72: Inmortal

Era casi la hora de la tan esperada visita, y Nam, de forma paciente, miraba alrededor, con Tae entre sus brazos, cuando escuchó un sonido extraño, sabía que su esperado amigo no podía ser así de indiscreto, así que se puso alerta, sacando la pistola de su cinturón e hizo a Tae a un lado.

-¿Qué pasa...?

-Quédate aquí...

-Nam... ¿P-porque tienes un arma?...-Dijo nervioso

-Haz silencio.- Sentenció, cargando el arma, y dio unos pasos hacia el frente, tratando de seguir aquel extraño sonido que provenía de los árboles oscuros. Sobre pasos lentos se aproximó más y más, aún cuando Tae, impaciente y ligeramente asustado lo seguía con la mirada. Claro que Nam no se iba a alejar de Tae por ninguna razón, solo quería asegurarse de que no hubiesen sido seguidos y se alteró aún más cuando vió a lo lejos unas luces que provenían de donde habían estacionado la motocicleta.

-Tae... quédate aquí, si no vuelvo en 5 minutos vete bosque abajo, hay un pequeño vecindario

-Nam, no, no me dejes solo.- Suplicó.

-Tranquilo... solo haz lo que te digo y cuenta... ¿está bien?

-Si...-Dijo respirando profundamente y después se agachó detrás de la roca, asintiendo.

Nam comenzó a dar pasos en dirección al camino principal, y Tae lo vió desaparecer entre los arbustos en silencio mientras contaba apenas 30 segundos.

El mayor continuó su camino de forma precavida, caminando en silencio entre la espesura, cuando vió aquella luz cerca de la motocicleta, era un viejo auto, que se estacionó ahí, dejando salir de la capota una extensa nube de humo, y tragándose una buena cantidad de ese humo un hombre, que luchaba por ver que es lo que pasaba. El hombre no notó su presencia en el lugar, estaba demasiado distraído por la voz de su esposa gritándole, y tras mover un par de cosas se volvió a subir a su auto de malas, logrando que arrancara de nuevo, cuando se fueron Nam sintió alivio en el corazón y decidió regresar de nuevo al punto donde se encontraba.

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Tae llevaba alrededor de 3 minutos contados, cuando percibió una presencia extraña, y volteó poco a poco hacia atrás, temiendo que pasara algo malo, pero sus ojos no encontraron nada, en cambio, cuando creyó sentirse aliviado regresó la mirada hacia el frente topándose con el cañón negro de un arma enorme.

Enmudeció, comenzando a temblar nerviosamente, el hombre que sostenía aquella arma parecía ser una especie de espectro, pues juraba no haber escuchado ningún ruido alrededor, y de repente aparecía aquella extraña figura, de cunclillas sobre la roca lo miraba de forma amenazante, vistiendo una máscara que le cubría la boca, adornándola con un montón de estoperoles puntiagudos.

-¿Quien carajo eres....?.- Dijo la hostil voz, distorsionada en forma de un crudo tono robótico.

-Y...o....-Dijo en completo pánico, deseando que Nam no apareciera, para que no lo atraparan junto con él