Playing like a Gigoló ~ [NamV]- Finalizada

Capítulo 82: Truenos

El impacto de las balas empujó su cuerpo, haciendo que cayera al suelo, y ahí se quedó, inerte, mientras Nam lo miraba desde su puesto, con un nudo en la garganta.

Cuando un par de segundos pasaron Namjoon se acercó a él sobre pasos lentos, y le extendió la mano, comprobando que el menor había dejado de temblar, y cuando lo tuvo de pie no le dijo nada, solo resolvió quitarle de encima el chaleco antibalas, y lo miró fijamente.

-Sabes ahora como es, no temas.- Dijo de forma firme, tomándolo del mentón. -Protégeme... yo te protegeré a ti.

-Está listo, vámonos.- Sentenció Hope, mirándolos complacido

-Bien señoritas, que esto sea rápido.- Dijo Kai, dirigiéndose a uno de los autos

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El último de ellos saltó la reja sin dificultad, y cubiertos por la espesura de la parte más recóndita del jardín avanzaron lentamente, en medio de la oscuridad, con pasos tan silenciosos que dejaban que el sonido del viento se escuchara con más fuerza que la de sus pasos.

-Kai...-Dijo Namjoon en tono firme, y acto seguido la imponente figura del susodicho se erguió

-Lo sé.- Dijo trotando en dirección contraria.- Que no los maten.- Susurró soberbio, mientras los demás lo veían desaparecer como si fuese un fantasma.

-La mansión principal es el primer sitio, ya saben cómo lucen los objetivos, así que a la menor señal de ellos notifíquenlo

-Si.- Dijeron todos al unísono.

-El grupo uno irá con Taehyung, el dos conmigo, mantenga los walkies en el canal 2 a volumen bajo, si algo sale mal salgan por donde hemos entrado, nos veremos en el mismo lugar en tres horas después de eso

-Si.- Dijeron en una misma voz, y se levantaron, asegurándose de tener el preámbulo listo. Tae por su parte apretó con fuerza el chaleco que Namjoon le había dado, era un poco más delgado, pero le permitiría correr con rapidez y en el peor de los casos sería capaz de retener las balas que intentaran penetrarlo. Tae lucia mucho mayor, y tuvo que reconocerlo en ese momento, pues una boina sujetaba con firmeza su cabello, y vestido con esas botas estilo militar color negro y las armas colgando de su cinturón- incluyendo una más como reserva, escondida en la parte trasera.- lucia amenazante para cualquiera, pero para él, seguía siendo un angel, y le dolía verlo de esa forma, un angel no debería portar armas, ni estar dispuesto a morir por los pecados de los egoístas, pero así es como era el mundo, aunque no se conformaría, lo protegería con su vida, estaba dispuesto a ello.

-Bien... Vamos.- Ordenó

-Esto va a ser tan divertido...-Dijo el rubio, cargando su arma, y acto seguido, para la sorpresa de todos, jaló a su novio del cuello de la ropa para darle un profundo beso morboso, que Jooheon recibió con los ojos cerrados, disfrutando de la forma en que su novio le introducía su lengua de forma perversa, como hacían siempre antes de comenzar cualquier misión.

-Vaya...-Dijo Tae sin darse cuenta, con la cara incandecente en rojo.

-Vamos...

Sobre pasos silenciosos Hope y Rocky avanzaron primero, asegurando el perímetro como era su especialidad, y construyeron un camino hacia la parte trasera de la mansión, inmiscuyéndose en ella por la puerta escondida detrás de garaje, subieron a la primera planta, encontrándose con un grupo de guardias que conversaban entre ellos, y sin siquiera esperar unos segundos tres balas atravesaron sus cabeza, dejando que los cadáveres cayeran sobre el suelo poco a poco, lo que hizo menor el impacto del ruido y acto seguido fueron arrastrados por Hope y Namjoon hasta una esquina para que no levantaran sospechas. Tae vió la sangre que escurría de sus cuerpos, y sintió el estómago revolvérsele, pero no se quejó, suspiró, tragando en seco, y siguió caminando rápidamente, detrás de aquellos hombres que parecían hacer de ese suicidio un día en el campo.