Playing like a Gigoló ~ [NamV]- Finalizada

Capítulo 56: Alguien esperándome en casa

Inicio del segundo maratón ❤, disfrútenlo bbys 😘

-"Usted... amo... no debería sonreírme de esa forma tan a la ligera... ¡porque no sabe lo que provoca en mí!... me hace volar..."-Dijo en su mente, viendo como su corazón se iba fugitivo, de nuevo a las manos del de ojos hermosos.

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Tal vez eran alrededor de las 12 del día cuando despertó, lo sabia porque el sol que se colaba por las cortinas se alzaba en la parte superior anunciándole que había dormido demasiado y cuando sus ojos se acostumbraron a la luz hechó un vistazo rápido a su alrededor; un cuarto casi vacío, salvo por la cama y un tocador en la esquina, lo hicieron recordar en donde se encontraba, así que miró hacia un lado, esperando encontrar a su amante de la noche anterior, pero ahí no había nadie, solo la silueta en las sábanas, señal de que alguien había estado durmiendo a su lado.

-Tae...- susurró, sintiendo el corazón pesado, pues parte de él, aunque no quisiera aceptarlo, se sentía abandonado, completamente irrelevante... la noche anterior, con Tae en sus brazos, su corazón se había sentido tan cálido que creyó por un momento que se quedaría de verdad con él, por ese fantástico y crédulo momento creyó que tal vez Tae lo aceptaría, y era por ello que yacía en su regazo, dormido, sudoroso y completamente cansado, pues habían hecho el amor toda la noche, hasta que sus cuerpos sucumbieron, en medio de fatiga y un deseo celoso de seguir besándose, hasta que se quedaron dormidos, pero no había pasado de ahí, y ahora, despertando de esa forma lo sabía, se sentía un tonto... porque a pesar de todo ello, de los sentimientos de humillación crecientes en su pecho seguía sintiendo que le faltaba el aire, cuando recordaba el sabor de sus labios y los dulces sonidos que vociferaba cuando lo acariciaba

estaba enamorado...

Estaba enamorado y no podía hacer nada al respecto, dolía y le hacia un nudo en la garganta darse cuenta, de lo débil que podía ser su corazón cuando el de ojos hermosos lo tocaba, así que derrotado, patético se levantó, revolviéndose el cabello, tratando de pensar en cualquier cosa que no fuera el corazón que comenzaba a sentirse intranquilo dentro de su pecho de repente.

Miró hacia abajo, dándose cuenta de que seguía desnudo, así que se levantó buscando al lado de la cama su ropa, y efectivamente, ahí estaba, un calcetín por acá, otro por allá, sus pantalones, su camisa color negro, sus zapatos, todo estaba ahí como la noche anterior y si no fuera porque encontró aquellos objetos en la habitación le hubiese parecido que todo había sido sólo un sueño, así que comenzó a vestirse despacio colocándose los pantalones primero.

Sus pensamientos se disiparon cuando alguien tocó a la puerta de repente, poniéndolo nervioso, así que no contestó, sabia que si alguno de los empleados lo veía semidesnudo en la habitación de su primo se armaría un enorme revuelo, principalmente si su madre se enterara, y sintió erizársele la piel cuando el señor Lee entró a la habitación cargando una charola.