Delirio

Capítulo 34.

Miró el apartamento, todavía se encontraba un poco vacío, las demás cosas estaban en el otro apartamento y éste le parecía un tanto grande para ellos dos, incluso ahora tenían una habitación extra por si llegaran a tener invitados, que Taemin lo dudaba porque en el tiempo que vivieron juntos, no sólo ahora que habían retomado su relación, sino desde el tiempo compartido atrás no tuvieron invitados que se quedaran a dormir, todos llegaban y se iban, y no le molestaba que fuera así, en realidad en el pasado se sentía más cómodo y actualmente le daba lo mismo, ya no odiaba a todo el mundo porque había aprendido que no todos lo odiaban.

Dejó la sala de estar para volver a la habitación, ésta la parecía más acogedora a pesar de ser un poco más grande que su antigua recámara. Se dejó caer sobre la cama y mantuvo su mirada sobre el techo, sólo sería cuestión de acostumbrarse al nuevo lugar, y esperaba que de verdad fuera suficiente para no ver otra vez a Jong In, porque él no había tenido ningún problema en cambiarse de apartamento si esa era una buena forma de alejarse de su ex amigo, no quería recaer en lo mismo y tampoco que Min Ho desconfiara de él, que si el médico creía que era necesario aquel cambio él lo aceptaba.

Años atrás nunca hubiera pensado estar en la situación actual, estar enamorado de alguien y esa persona se hubiera vuelto tan importante en su vida, en un eje sobre el cual girar, ni que él iba a dejar las drogas, que iba a huir de todo aquello a lo que él creyó su vida en el pasado, y no precisamente porque se avergonzara de aquella vida, aunque tampoco podía decir que se sentía orgulloso, mucho menos cuando pensaba en Jae Min y que éste murió por su culpa, todavía dolía demasiado el recordarlo, y creía que nunca iba a dejar de hacerlo porque un dolor así nunca sería olvidado, quizás con el tiempo dejaría de doler tanto pero no lo olvidaría.

Escuchó la puerta abrirse una vez más en el apartamento y él se levantó de la cama para acercarse a la puerta de la habitación, sabía quién era porque nadie más que él y Min Ho conocían la contraseña de aquel apartamento, y a la única persona que esperaba era a su pareja que había tenido un turno en el hospital. Lo observó quitarse la chaqueta y colgarla en el armario, para después tenerlo frente a él con su rostro entre sus manos, permitiendo que el doctor dejara sobre sus labios un beso que le robó el aliento y que no había esperado a pesar de que las cosas entre ellos ahora volvían a parecer normales.

—Min Ho... —suspiró cuando el doctor se alejó.

—Hola Taemin —acarició su rostro, viendo como el rubio disfrutaba de su contacto y se mantenía con los ojos cerrados —¿cómo estuvo tu día?

Taemin abrió los ojos al escuchar la pregunta, le gustaba cuando Min Ho mostraba interés en lo que sucedía con sus días, ya que ese día no había podido ir a recogerlo al terminar el curso, pero tampoco lo necesitó ya que había tomado el metro hasta una estación cercana y caminar las pocas cuadras al edificio no le molestaba, lo que sí no le gustaba mucho era estar solo en el apartamento porque todavía no se acostumbraba a lo espacioso que era, pero el lugar le gustaba a Min Ho y Taemin no quiso replicar nada cuando su pareja le dijo a dónde iban a vivir, porque todo le había parecido bien para alejarse de Jong In.

—Estuvo bien —se soltó de Min Ho —hoy en el curso aprendí un nuevo plato, es pollo dulce, ¿quieres probarlo?

—Me encantaría.

Min Ho observó una casi imperceptible sonrisa aparecer en los labios de Taemin y eso le dejó claro que su respuesta era algo que su pareja esperaba escuchar, que él estaba dispuesto a comer los platos que el rubio aprendía en su curso de cocina, en realidad era algo a lo que ya comenzaba acostumbrarse, o a que después de que él hablara con Jin Ki acerca de una posible recaída en las drogas por parte de Taemin sus amigos parecieran estar más a su alrededor, ya que algunas veces había recibido llamadas de Jin Ki, Jong Hyun o Ki Bum diciéndole que el rubio estaba con ellos, que habían salido a hacer compras, a comer afuera, al cine, o cualquier cosa que mantuviera ocupado a Taemin sin dejarlo estar solo, había sido un mes en el que recibió de esa manera ayuda de sus amigos.