~Estoico~ {Maldad-KunxPereza-kun} (Finalizada)

✪~Cap 23~✪

—Qué insulto—.

—Sin duda... Una abominación —.

—Pagará las consecuencias—.

...

2 años y medio

—¡PAAAAAPÁ! ¡PAPÁ PAPÁ PAPÁ PAPÁ PAPÁ! >:V —. El demonio bufó apartando su mirada de las páginas de su libro y mirando a su hijo.

—¿¡QUÉ MIERDA QUIERES MALDITO ESTORBO!? Ah... Qué ese era tu nombre disculpa :v —. El niño puso un puchero mientras sus ojos se cristalizaban produciendo aquellas lágrimas negras como la noche—. ¡NONONONO! ¡E-Era broma cari... —. Tosió llevándose la mano al cuello adolorido— Cariño —. El niño se limpió las lágrimas y miró con una sonrisa ladeaba a su padre.

—¿J-Juegas conmigo hasta qué venga papi? Por favorrrrr—. Pidió abrazando con fuerza contra su pecho aquel peluche de oso enorme, casi del mismo tamaño que el infante.

—Ahg... No, piérdete pesad... D-Digo cl-claro cariñ... —. Dio un quejido— Cariño —. Estorbo sonrió anchamente, cogió del suelo al otro peluche que tenía (este era un gato) y se lo ofreció a su padre, que lo aceptó tomándolo entre sus manos.

—Yo soy el oso y tú el gatito... Y somos amigos :D así que vamos a vivir aventuras juntos—. Dijo elevando el peluche en el aire como podía, haciendo sonidos de ¿avión? ¿Pájaro? ¿Terremoto? Quién sabe.

Maldad-Kun rodó los ojos sin poder evitar que una sonrisa boba se dibujara en sus labios.

—Hola señor gatito, han secuestrado a la doncella vaca y hay que ir a salvarla :v —. Dijo con evitando una voz grave, el adulto rió.

—Claro, vayamos a salvarla —. Respondió manejando el peluche. Estorbo sonrió de oreja a oreja muy emocionado.

A la tarde Pereza-Kun regresó, siendo recibido por el menor de la casa abrazándole.

—¡Papi papi papi! :D He jugado con papá a los peluches y tamb—. El azabache lo interrumpió tirándose al sofá.

Al segundo se quedó dormido.

El infante miró a su padre ladenado la cabeza confuso.

—Está cansado, Estorbo... Hoy a trabajado —. Le dijo.

—¿Cómo tú ayer?—. Asintió.

—Tus papás hacen pequeños trabajos temporales para mantener a un pequeño demonio algo travieso —. Respondió posando el dedo índice en la nariz del contrario, el niño rió para luego abrazar a Maldad-Kun.

—Te quiero, papá —. El corazón del nombrado sintió algo que nunca antes había sentido.

Correspondió al abrazo de forma protectora, sintiendo que algunas pequeñas lágrimas se escapaban por sus ojos... Era tan maravilloso sentirse amado.

...

La pequeña familia se encontraba en el parque.

El crío jugaba en las atracciones mientras sus padres miraban desde un banco a unos cuantos metros.

Había un montón de niños, y el parque era enorme.