Gabrielle entre Idiotas

50. Enfrentandolo

"ENFRENTANDOLO"

Escucha: Only you by Selena Gómez.

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¿Porque Adrien me había invitado a este lugar? Precisamente para hacerme verlo coqueteando con esa rubia.
Estoy allí, sentada con un vaso de cerveza a medio tomar en la Sala de la casa, mientras Finnick se divierte con la chica pelirroja, los demás tontean con chicas por allí y Adrien, en una esquina de la casa a punto de cogerse con esa chica que ahora se presentaba como Sammy.
Él le decía cosas al oído y ella se reía de eso.
Con su espalda recostada a la pared y los brazos de Adrien a casa lado de su rostro sin dejarle escapatoria.

Vaya mierda. Los hombres son una mierda, no se debe esperar nada de ellos, nunca.
Sin tan sólo...

"Sin tan sólo Aris estuviera aquí, dilo, se que lo deseas" interfiere mi pensamiento 

Si, ojalá Aris estuvira aquí, ojalá las cosas con el todavía estuvieran bien, de ese modo, no estaría pasando por esta basura y no me habría dejado pisotear por Adrien.
¿Que esperaba? ¿Un final feliz en el que él me confesara lo enamorado que estaba de mi y terminariamos siendo una pareja feliz y llena de amor y romanticismo? De verdad que aveces me paso.
Porque Adrien Johnson es lo más alejado a romántico que se puede ser.
No me duele porque me sienta estúpida, me duele porque yo si que siento algo por él, yo si siento un montón de cosas por él y eso me enoja.
Me enoja sobremanera.

Sólo los miro tontear y una sensación de ganas de vomitar se me sube hasta la boca del estómago.
Me levanto de allí y pongo el vaso en la mesa y me dirijo hasta el cuarto del fondo.
Cierro la puerta y ya casi no se escucha la música de afuera.

Es una hermosa habitación con una pared completa de vidrio que da la vista más espectacular del lago.
Respiro y entro al baño, un baño grande con un jacuzzi redondo dentro.
Vaya que el padre de Wayne a esforzó, quien sabe cuantas veces tuvo sexo en este lugar.

No lo pienso mucho, porque si lo hago, enserio terminare vomitando.
Abro la llave del lavamanos y me mojó las manos.

Me miro al espejo y retoco un poco del gloss de mis labios y entonces...

—Hey...— la puerta se abre y se cierra detrás de él.

Dios atame las manos porque lo golpeare si no lo haces.

—Lo siento, ya me iba— digo y antes de poder salir me toma del brazo, haciéndome retroceder. Le doy una bofetada a su mano alejandola de mi brazo.

—No me toques— suelto.

Frunce el ceño, fingiendo como si no supiera lo que estaba haciendo. Él sabía exactamente lo que estaba pasando.

—De verdad eres bipolar, un día estas bien conmigo y al siguiente me odias de nuevo y dices que soy yo el que está loco— me habla de la forma más despreocupada y divertida posible. Así como siempre lo hace y duele más, porque me deja saber que esto para él es un simple juego.

—Sólo...sólo déjame en paz ¡Dios! no se como fui tan estúpida de caer contigo.

—Gabrielle, no había mucho que pudieras hacer ¿no?

¿Que?

—¿De que demonios hablas?

—Tú me llamaste

—Para darte tu Hoddie

—Me besaste en la escuela y me dices que te vea en tu casa a las diez ¿enserio crees que me voy a creer que era por el hoddie?