I HAVE TO PROTECT YOU (Carl Grimes y tú)✅

Cap.42 "Go Home"

           [AL DIA SIGUIENTE]

Carl había prometido demasiadas cosas en sus palabras del día anterior, ambos nos dirigiamos hacia Hilltop.

Habíamos tomado un auto, pero por desgracia la gasolina se había acabado un par de horas y se había averiado por el choque que tuvimos al pasar por un caminante, admito que fue divertido saber que Carl no sabia conducir bien, pero a la vez casi muero al pensar que moriríamos en un estúpido choque.

Bajamos del auto , para así poder caminar en la vacía carretera. Yo iba metros adelante de Carl, ya que quería estar sola y así llorar.

No era buen momento para hacerlo, pero ya no podía contenerme. No podía sacar de mi mente la muerte de Glenn, Abraham y Kendall, fueron demasiado para mis emiciones y conciencia.  Ahora lo que más me perturbaba, era que Carl se esta despidiendo sutilmente de mi y no quiero pensar el porque hace eso.

Si lo pierdo, perderé mis ganas de vivir en este mundo. Sé que tengo que luchar por Peggie, Daniel y Maggie, pero. . . Ellos no podrán derrumbar mis muros o al menos no como lo hizo Carl.

—________, detente.- escucho a mis espaldas la voz de Grimes.

Doy media vuelta y miro como él esta agachado, buscando en una maleta en la cual se encontraban un par de patines.

Me acerco a él, tratando de no mostrarme tan perpleja de aquella situación ¿quien diablos lleva unos patines para sobrevivir? Tal vez ya tengan tiempo y es una coincidencia encontrarlos.

—¿Estas bromeando? No se patinar.-mencionó con inseguridad y pena.

Carl se quitó sus botas y comenzó a ponerse los patines.

—Yo puedo enseñarte, no es gran cosa.

—Te creeré, pero si me caigo. . .

—No te soltaré .-me interrumpe Grimes.

Indecisa, tomo asiento en el duro pavimento, para así quitar mis botas y colocarme los patines. Carl se levanto con dificultad del suelo, me extendió una de sus manos y me ayudo a levantarme.

Me tambaleó y rápidamente me aferro del brazo de Carl.

—Esto no es lo mio, sino me mata un caminante o una bala, me mataré usando patines. -digo entre dientes mientras Carl se reía de mi.

—Tú puedes, solo relajate.- toma mis manos y me da un suave apretón.

—Claro. . .como puedo.-suelto las manos de Grimes y vuelvo a tambalearme.— Esto no es lo mio.

—No es tan difícil ______, solo deja que los patines te lleven.

—Que gran sabiduría Carl.

—Solo arrastra los pies, yo cuido que no te caigas.-Carl se coloca detrás de mi y me toma de la cintura.

— Si muero, escribe en el pavimento con mi sangre "______ se murió por unos patines".

—No se si reirme de eso.

— ¿Me vas ayudar o no?

—Si. . . Solo arrastra los pies.- Carl se aferra de mi cintura y yo hago lo que me pide .

Me relajo y comienzo a mover mis pies suavemente en el pavimento, cada vez iba más rápido y el miedo de morir descalabrada iba desapareciendo por completo.

Carl soltó mi cintura y patinó a mi lado, una gran sonrisa se formo en nuestros rostros, disfrutando del tiempo que pasábamos. Después de todo, nuestra juventud aún existe.

Carl se tambalea un poco y se sujeta de mi brazo.

—¿Estas bien?-pregunto con una sonrisa llena de diversión.

—Si. . .-Carl baja su mano hacia la mía y entrelaza nuestros dedos y así poder patinar de la mano.

El viento chocaba en mi rostro, disfrutaba de cada segundo estando con Carl, sentía una paz que siempre lograba tener cuando estaba con él.

Pequeñas risas, se escapaban de nuestros labios y una que otra vez tropezamos por las grietas del pavimento.

[...]

Al estar frente a las puertas de Hilltop, los guardias rapidamente abrieron de par en par las puertas de madera de la cumbre.

Un nudo en la garganta apareció de la nada y un gran miedo recorrió todo mi cuerpo, interior y exterior.

Giro en mis talones para ver a Carl, quien mantenía una sonrisa en su rostro mientras su mirada me demostraba calidez.

—Promete que volveré a verte, cuando todo esto termine. . . Prometelo. -ordenó con la voz entrecortada.

—Te lo prometo _______.

Sin pensarlo dos veces, con rapidez me acerco a él para así poder abrazarlo con demasiada fuerza.

—Ganaremos... Tenemos que hacerlo.-menciono después de minutos en silencio.

Carl me separa suavemente de él y así fijar su mirada en la mía. Con una de sus manos recorrió mi mejilla y volvió a sonreír.

Y de manera inconsciente pensé >preparaté para perderlo< 

—¿Por qué haces eso?

—Porque quiero pensar en ti, luchar por nosotros.-Carl planta un beso en mi frente con suavidad.—Ahora ve con Maggie, yo tengo que regresar a casa.

—Alguien te puede llevar, no necesitas ir tú solo...

—Estaré bien.-me interrumpe Grimes.—Entra ahora.

A regaña dientes me alejo de Carl y a paso lento me adentro hacia la comunidad.

Al estar dentro, giro sobre mis talones hasta poder ver a Carl del otro lado. Las puertas comenzaron a cerrarse hasta que no pude ver a Carl, más.

Cierro mis ojos con fuerza, para poder meditar aquella situación. Estábamos comenzando una guerra, en la cual personas tienen que morir.

Una mano en mi hombro hizo que recobrara la cordura , nuevamente.
Al abrir mis ojos, una sonrisa se formo en mi rostro el verla con vida.

—Maggie. . . ¿Estas bien? -tomo sus manos entre las mías.

Maggie sollozo y soltó una de mis manos para tocar su vientre.

—No, pero lo estaré. - sin pensarlo dos veces, la abrazo con toda la fuerza que pudiese tener en mi ser.

Sabia perfectamente que sentía... No por el hecho de estar enamorada de alguien y perderlo, pero si de perder a alguien importante.

—¿Donde están Sasha y Daniel?-pregunto separandome del abrazo.

Maggie sonrió maliciosamente y yo borre mi sonrisa de inmediato. Algo andaba bien, pero a la vez mal y no podía saber si el mal era para nosotros o para Hilltop.

—Jesús los llevo a un lugar, la guerra comenzará más pronto de lo que parecé.-menciona Maggie con seguridad.

—¿A donde fueron?-pregunto con curiosidad.

—No creerás en su nombre...-Maggie sonrió ampliamente y un escalofrío recorrió mi espalda.

¿Qué se supone que están... Estamos tramando?

—No estoy entendiendo nada, Maggie.- murmuro .

Maggie me tomo por los hombros y beso mi cabeza con dulzura. Era grato, pero en esa situación no era tanto. Me estaba ocultando algo y la curiosidad me calcomia .

—Maggie...-vuelvo a suplicar.

—Te lo diré todo, pero primero vayamos a preparar algo para comer.

A regaña dientes tuve que aceptar e ir con ella hacia la gran mansión.
Lo curioso era que Gregory no se encontraba en su "hogar".

>Tal vez este muerto< pero es demasiado cobarde como para morir honoríficamente .

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