-Ayla y yo las cubríamos escondida tras los arbustos -Eara bebió un poco de zumo.
-¿Y a vosotras quien os cubría? -Alexander apretó las manos agarrándose al filo de la mesa.
-Uno de los lobos -Ayla miro a su marido y sonrió
-Wert me dejo amarrada en la tienda -Helen hizo una mueca -Por suerte Javrik -miro a su sobrino sonriendo -Vino por mí.
-¿Y dónde estabas tú? -Eder miro a su mujer, con los ojos entrecerrados.
-Wert se la llevo -Helen hablo mirándola -Pero Javrik y yo fuimos en su busca. El se encargo de los guardias de la tienda y yo de Wert.
-¿Tu de Wert? -Ewan alzo una ceja.
-Le golpeo ¿dos? no, tres veces con una jarra -Jannet sonrió.
-Parece que se te da bien lo de golpear a la gente -Mail rio divertido.
-Oh y después me libro de un soldado que me atacaba por la espalda -Javrik tomo un panecillo de canela con las dos manos y lo alzo, imitándola -Lo golpeo con un escudo hasta que se derrumbo.
-¿Y vosotras? -El Diablo miro a su mujer.
-Freya y yo vimos a varios soldados apostados en la puerta de una tienda, fuimos alli y nos encargamos de ellos, cuando entramos, Isobel estaba alli, atada y con los ojos vendados. La liberamos y salimos al campamento a encontrarnos con las demás -Niara respondió tranquilamente.
-En la lucha, los lobos se unieron a nosotras -Freya tomo un panecillo -Nos fueron de gran ayuda.
-¿Y el fuego? -El Invencible frunció el ceño.
-Fue idea mía -Helen se encogió de hombros -Dejaba de llover, tome una de las antorchas del interior de la tienda y le prendí fuego. ç
-Buenos días -Niaj entro, bostezando y estirándose con una sonrisa -Un que hambre -tomo dos panecillos y se sentó, dando un bocado a uno y después al otro. Vio que todos le miraban en silencio. -¿Qué?
-¿Donde estabas? -Ewan lo miro fijamente.
-Por ahí -se encogió de hombros
-¿Que tal tu cabeza? -Helen le miro sonriendo.
-Algo dolorida -El la miro con el ceño fruncido.
-¿Y las manos? -Niara alzo una ceja -¿Te dejaron marca las cuerdas?
-No -el dejo de comer, mirando a todos y cada uno, dudando. -¿Que pasa?
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El Laird
RomanceEder MacPearson lleva demasiado tiempo buscando, buscando la oportunidad que nunca debió haber dejado marchar. Y ahora ella no está. Ha desaparecido como si la tierra se la hubiera tragado. Y tras años de búsqueda, no tiene nada. Y cuando aquella mu...