-¿Has dispuesto la mesa en el salón? -Jannet pregunto a la criada
-Si señora -ella asintió, mostro las copas -Solo queda esto.
-Bien -Miro a la otra -Ayúdala a encender las velas.
-Si señora -esta asintió y salió de la sala.
Sonrió. Camino por la cocina y se inclino para mirar en el horno, como iba el pastel. Unas manos se cernieron en su cintura y se incorporo riendo, notando el pecho de su marido tras ella. Eder la estrecho contra él y poso los labios en su cuello.
-Estas demasiado hermosa -subió hasta mordisquear el lóbulo de la oreja -Estoy tentando de secuestrarte.
-¿Y a donde me llevarías? -se giro hacia él, apoyando las manos en su pecho, mirándole feliz
-Los establos es un lugar en el que aun no he cumplido mis intenciones contigo -el alzo una ceja
-Pero podrían llegar los invitados y vernos en una situación comprometida -ella alzo la mano y acaricio su barbilla. El se quedo pensativo -¿Te estás quedando sin lugares donde hacerme el amor esposo?
-Oh, encontrare alguno, no te preocupes -se apodero de sus labios.
-¡Están aquí! -Marga entro en la cocina
-¡Eder esta besándola! -Moira se paro en la puerta, gritando.
-Oh, ya estáis aquí -Jannet se aparto de su marido.
Eder bufo y salió de la cocina, camino por el pasillo y se paro en la sala.
-¡Hola! -Ayla abrazo a su hermano y le dio un beso en la mejilla -Estas muy guapo
-¿Por qué estas tan feliz? -el frunció el ceño
-¿yo? Por nada -se encogió de hombros
-Llegáis pronto -Miro a Mail.
ESTÁS LEYENDO
El Laird
RomanceEder MacPearson lleva demasiado tiempo buscando, buscando la oportunidad que nunca debió haber dejado marchar. Y ahora ella no está. Ha desaparecido como si la tierra se la hubiera tragado. Y tras años de búsqueda, no tiene nada. Y cuando aquella mu...