Betzabeth.

Era él

  Mi despertador sonó, no le hice caso y seguí durmiendo. Mi celular vibró y lo revisé, mensaje de James: << Falta cinco minutos para que las clases empiecen, ¿en dónde te has metido? >>

Me paré de la cama, tropecé y me caí, me levanté, agarré la cartera, saqué el uniforme, me vestí, me peiné, agarré la mochila, salí de la habitación, corrí, me caí, llegué al salón y tocó el timbre... Las clases pasaban y yo me dormía en cada una.

9:30 a.m.: hora de desayunar, salí huyendo del salón, mis tripas sonaban como si lo que querían era que fuera al baño. Tomé un café con leche, jugo de guayaba, dos tostadas y un huevo revuelto. Me senté en la mesa y empecé a comer.

— ¿Cómo te fue anoche? —preguntó sentándose a mi lado.
— Más o menos.
— ¿Qué sucedió?
— Mañana tengo que hacer un baile o no me pagarán.
— ¿Un baile... de esos... en los que las mujeres... tú sabes?
— Sí, un baile de esos.
— Y no lo harás ¿cierto?
— Tengo que... no me dieron el dinero, dicen que me lo darán después de que baile.
— Betzabeth, esto no está bien. Ni siquiera sabes bailar.
— Ya mismo me pondré a ver videos... ya veré qué hago.
— ¿Y qué fue lo que tuviste que hacer ayer?
— Tomar órdenes, servir tragos. Sentir manos en mi nalga...
— ¿Qué? —me interrumpió— no volverás allá.
— Lo haré, necesito el dinero.
— No debes dejar que te pongan la mano encima, ni para que te peguen ni mucho menos para que te manoseen.
— No te preocupes, hubo uno que se quiso pasar, quería hacer ''eso'' y lo puse en su lugar.
— ¡Oh por Dios! Esta noche te encerraré en mi habitación y no te dejaré ir. Así que tenga amarrarte a mi cama, lo haré.
— Eso tiene doble sentido —achiné mis ojos.
— ¡Sucia! —mi miró de igual manera y empezamos a reír a carcajadas.
— ¿Adivina a quién vi anoche?
— ¿Otro chico guapo? —rodó los ojos.
— ¡Ya quisiera! Pero no, vi al de matemáticas —comenté seria.
— ¿Y él te vio?
— Sí, pero no me vio la cara —no le contaría de lo sucedido. Lo mataría.
— ¿Entonces cómo sabes que te vio?
— Porque... cuando alguien te está mirando tú puedes sentirlo.