Una noche en Glasgow.

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Taylor:

Un mes después...

El clima había mejorado notablemente en las últimas semanas. Una tenue luz primaveral entraba por los grandes ventanales de mi habitación mientras yo estaba sentada frente al gran escritorio tratando de escribir. Esa había sido la condición que había tenido con Carol, yo estaría todo el tiempo que quisiera en Escocia siempre y cuando le avanzara a las letras del próximo álbum. Todo un reto sin duda.

Alison por su parte, jugueteaba en su área de juegos con todo ese cabello rubio y rizado que le había crecido de forma exagerada esos últimos meses, la pequeña estaba más activa que nunca, gateaba, balbuceaba y reía sin parar.

Me enfoque en la hoja de papel frente a mí, intente hacer regresar esa vieja chispa pero nada. Aún tenía los recuerdos de la cita de Joe, el chico me había estado llamando obsesivamente durante esos días, supongo que estaba ansioso por volverme a ver o volver a repetir lo de esa noche.

Solté un suspiro exasperado y arrogué la hoja al basurero que había junto al escritorio, el cual estaba por desbordarse de tantos intentos fallidos esa mañana.

—¿Problemas de inspiración?— una voz burlona habló detrás de mi

—¿Tu qué crees?— bufé y me lleve las manos a la cabeza, intentando alejar ese malestar

Adam no dijo nada más, simplemente se acercó a Alison y la tomo en sus brazos. La niña festejo lanzando un montón de balbuceos. –Deberías intentar saliendo de esta habitación. Llevas aquí más de un mes, ni quiera te he llevado a conocer la cuidad o simplemente pasear por ahí...—

Mire a Adam, sonriendo como siempre, me pregunte si extrañaba a Eiza, si le escribía al menos o la llamaba. Nunca hablaba de ella, en las cenas familiares todo giraba en torno a mí y Alison, como si la vida de Adam girara solamente en torno a nosotras.

—El clima aún no es apto para Ali, no quiero que le dé un resfriado— me aclaré la garganta y tomé a la bebé de los brazos de Adam.

—Sabes que mi madre y Sophie estarían encantadas de cuidarla. Tay, por favor... déjame sacarte de esta habitación— me suplicó

[....]

Me abotone el abrigo antes de salir a la fría mañana al bajar del tren que nos llevó a la cuidad de Glasgow. Adam había insistido en que sería el lugar ideal para despejarse.

—Debemos de regresar esta noche, ¿De acuerdo?— apuntille a Adam

—Taylor...— alargó arrastrando las vocales de mi nombre. –Alison estará bien, mi hermana es pediatra, ¿Qué mejor niñera, que una pediatra?— me apretó el brazo

Apenas me había subido a ese tren me había arrepentido infinitamente, ¿A dónde quería llegar con eso? ¿Adam y yo solos? ¿Qué era esto? ¿Una luna de miel?

Durante el día visitamos numerosos museos, y por primera vez, nadie se paraba a mirarnos o sacarnos fotos. En realidad nadie nos miraba.

La cuidad por otra parte era hermosa, una versión británica de Nueva York, a mi parecer. Con edificios altos y glamurosos pero conservando ese toque escocés.

Al atardecer la vida nocturna en Glasgow comenzaba a despertar, yo estaba muy hambrienta por lo que Adam y yo fuimos a comer en un restaurant en una de las calles principales.

—¿Le sirvo vino, señorita?— preguntó el mesero sosteniendo una botella de vino sobre mi copa

—Oh, no... prefiero un vaso de agua, si no es mucha molestia— negué, no podía tomar alcohol si seguía amantando a Alison.

—¿Qué?— escupió Adam. —¿Estás jugando? Sírvale vino, por favor— le indicó al mesero, quien asintió y lleno mi copa de vino para luego irse.

—Adam— lo miré mal. –Sabes que no puedo tomar alcohol...

—Taylor, no sobrevivirás esta noche en Glasgow si no tomas al menos una copa de vino...—

—¿Esta noche?— pregunté confusa. –No, esta noche estaremos en camino hacía... —

—Tú sólo relájate, disfruta de lo que Glasgow pueda ofrecerte—

[....]

—Dios, Taylor... creó que deberías parar— Adam me quitó de las manos mi bebida. Ni siquiera sabía que era lo que estaba bebiendo, pero sabía tan bien.

Mire el cielo, una hermosa noche estrellada sobre nosotros. Estábamos en un bar al aire libre.

—¿Qué he hecho?— sostuve mi cabeza entre mis manos en una mesa. –¿Cuánto tiempo pasará para sacar todo este alcohol de mi cuerpo?—

—¿Tienes que ponerte ebria, siempre?— Adam me miró divertido

—¿Yo? ¡Tú fuiste el que me trajo aquí, en primer lugar!— lo empuje bruscamente y el soltó una carcajada. Esa risa suya, tan profunda. Quise besarlo. Quizás lo hice, porque minutos más tarde nos arrastrábamos por los pasillos de un hotel. Riendo, sosteniéndonos el uno al otro.

Apenas entramos en la habitación y el me sostuvo en sus brazos.

—Maldición Taylor, te he extrañado tanto...— murmuró contra mi cuello

Yo busque sus labios ansiosa, y los devoré. Él me arrancó el abrigo y mi vestido que llevaba debajo.

No fuimos amables, ni cariñosos, ya habría tiempo para eso después... no deseábamos tanto, que nos arrancamos en el resto de la ropa y después no estregamos completamente a esa lujuria compartida.

—Vamos, un poco más...— jadee, mientras Adam me sostenía en su regazo sujetando mis caderas que se movían intensamente junto a las suyas.

Entonces esa sensación ardiente de cubrió el cuerpo, subiendo por las plantas de mis pies en ese hormigueo tan particular y me sujete al respaldo frente a mí, y grité mil veces su nombre.

Él lo había logrado también porque dejó caer la cabeza sobre la almohada.

Yo besé sus labios antes de dejarme caer a su lado, y cubrirme con la sábana al sentir el frío que sentía mi cuerpo lleno de sudor.

[...]

A la mañana siguiente, un dolor punzante en mi cabeza me despertó. Adam seguía dormido a mi lado, enredado en ese montón de sábanas.

Y me sentí bien. A pesar del dolor de cabeza, me sentía increíblemente bien, aliviada. Tenía a Adam, como en los viejos tiempos.

Me levante tratando de no despertar a Adam y me di un baño caliente.

Cuando volví él ya había abandonado la cama y estaba en la estancia de la habitación frente a una bandeja llena de comida.

Sonrió al verme. –Café toscano, ¿Sigue siendo tu favorito? 

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Hola, hola... este capítulo lo cambia todo. Espero que les haya gustado la parte Hot jaja 

Lo mejor esta por venir <3 

Besos. 

-LinaD

Mine (TAYVIN) 2da temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora