¡Y así es como Ellie salva el día!

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Ellie

Algunas semanas después...

Esa tarde de finales de julio, la lluvia empapaba las calles de Los Ángeles. "Pero que días tan malos escogí para venir" pensé, cuando mis sandalias nuevecitas se hundieron en el espeso barro. Claro que tampoco tenía opción, Calvin me había llamado sonando desesperado rogándome que viajará desde Londres donde me encontraba en pleno descanso para acudir a su llamado de emergencia.

Camine con dificultad entre la laguna de barro que se había hecho en el verdísimo jardín de la casa de mi amigo, mientras la lluvia me mojaba por completo. —¡Abre la maldita puerta!— grite con desesperación mientras golpeaba la gran puerta de cristal

Al instante Calvin apareció, y abrió la puerta de inmediato. —¡Ellie!— me recibió con un abrazo, sin importarle que su camiseta se mojara al estrechar mi cuerpo empapado contra el suyo.

Rápidamente entré en la casa, y Calvin me dio una toalla y un poco de ropa, de Taylor por supuesto aunque me quedará grandísima.

—¿Aún conservas las cosas de Taylor?— pregunte con vehemencia, mientras me dejaba caer sobre el acolchonado sofá de la sala, abrigándome con un suave camisón de algodón con estampado de gatitos.

—Es extraño, lo sé...— siseo, sirviéndome un poco de té. –Ya ha pasado tanto tiempo, y he perdido la cuenta de las veces que he dicho que me desharé de ella... pero cuando estoy a punto de hacerlo simplemente no puedo— confesó, sentándose a mi lado

—¿Y porque crees que no puedes hacerlo?— lo miré fijamente, justo esto era lo que estaba esperando, una confesión de esa magnitud. Lo curioso es que tanto Taylor como Calvin se extrañaban con cada fibra de su cuerpo, pero no hacían nada al respecto, nada más que sentarse a lloriquear en un rincón.

Calvin soltó un sonoro suspiro, y me dirigió una mirada melancólica. –No puedo, Ellie... no puedo dejar de pensar en ella y me estoy volviendo completamente loco—

Traté de ocultar una sonrisa, pero me fue imposible. —¿Por qué no la llamas?— pregunté finalmente

Mi amigo me miró como si estuviera loca, y negó con la cabeza. –No, no podría hacerlo. Ella esta con ese tipo... y además está embarazada. –Hizo una pausa para tomar aire, —No sería correcto— completo

—¡Calvin, Calvin!— repetí de manera irónica. Sintiendo que las palabras se venían a mi boca, "¡Taylor te extraña, además tú eres el padre del bebé que espera!" quise gritarle, pero me contuve. No estaba en mi darle a Calvin esa información, eso era algo entre él y Taylor, sin embrago ellos jamás lo resolverían y por consecuencia vivirían miserables el resto de sus vidas. –No te das cuenta, que tal vez allá algo más, de lo que tú no sabes...— sugerí de manera persuasiva

El semblante de Calvin se tornó serio, como si se lo estuviera pensado. "Eso es, piensa, indaga." Me dije mentalmente. —¿De qué hablas?

Esto no iba a funcionar, tenía que ir más al grano. Que Dios... y Taylor me perdonarán por lo que estaba a punto de hacer, aunque al final me lo agradecerían, quizá solo Taylor.

Apreté los labios, —Calvin... ¿Recuerdas cuándo fue la última vez que tú y Taylor... ya sabes, tuvieron sexo?— la pregunta incomodo a Calvin de inmediato, no era un tema del que yo y él soliéramos hablar comúnmente

Él aclaró su garganta y le dio un sorbo a su taza humeante de té. –No lo sé, déjame pensar...— hizo una pausa y su mirada se detuvo en la pared durante unos segundos, —Quizá fue... pocos días antes de terminar— "Mentiroso"

En vez de molestarme por la deshonestidad de uno de mis amigos más cercanos, sentí una repentina necesidad de reír histéricamente. —¿Por qué me mientes?— murmuré a duras penas atragantándome con mis carcajadas

Calvin me miró sorprendido. —¿Qué?

—Calvin, yo lo sé todo... sé que la noche de la fiesta de gala te fuiste con Taylor, y las cosas se pusieron calientes en su habitación— expliqué tratando de calmar mis risas

Su boca casi cayó al suelo, —¿Cómo es que lo sabes? – exclamó, de forma avergonzada. —¡Ella te lo dijo! ¿No es así?— me apuntilló

—No necesito decírmelo, yo estaba contigo esa noche. ¿Qué querías qué pensará cuando me di cuenta de que ambos habían desaparecido misteriosamente? Y si, ella me lo dijo— solté, dándole un codazo en las costillas de forma amistosa

—Dios, Ellie... no puedo creer que sepas eso— se pellizco el puente de la nariz.

—¡Ese no es el punto!— me sorprendí por el énfasis en mi voz, —¿Cuántos meses han pasado desde esa noche?—

—¿Casi 5?— Calvin se encogió de hombros, aún sin comprender

—Exacto...— dije con lentitud, —Entonces, ¿No crees que es extraño que Taylor tenga exactamente casi 5 meses de embarazo?—

—Bueno, no es extraño ella ya salía con el tal James— respondió con una sonrisa incomoda

—¡Por Dios, Calvin! ¡Ese tipo es más estéril que una bola de algodón!— solté, cubriéndome la boca rápidamente. ¿Pero qué demonios había hecho? La idea era plantar la duda en la inestable mente de Calvin, no soltarle todo

—¿Qué?— murmuro dando un salto, poniéndose de pie, —¿Insinúas que yo soy el padre de ese bebé?—

Quise abofetearlo, ¿Acaso no era eso lo que prácticamente el acaba de decir? —¡Sí!— grite

—¿Por qué Taylor no me ha dicho nada?— su piel palideció

—Trató, pero cuando vino dijo que había encontrado a una chica en tu casa y ella prácticamente salió corriendo...— expliqué, recordando como Taylor había contado la historia

—Entonces a eso era a lo que había venido...— se dijo Calvin así mismo, —Tengo que ir a buscarla...— su voz era decidida

—¡Espera, espera!—lo detuve antes de que saliera corriendo dramáticamente por la puerta, hacia la lluvia torrencial

—¿Qué?— me miró irritado, —¿No es acaso lo que se supone que debo de hacer?

—Sí, es justo lo que tienes que hacer, pero... no ahora.— lo tomé del brazo y lo dirigí de vuelta hacía la sala

—¿No ahora?— exclamo histéricamente, —¡Ellie, Taylor esta allá afuera... con un hijo mío en su vientre, con un falso padre! ¡Y tú quieres que me espere!— explotó llevándose las manos a la cabeza

—Tranquilízate, — le dije con voz suave pero firme. –Taylor ahora está en Nueva York, pero vendrá este fin de semana—

—¿Y?—

—Que ella vendrá y tú podrás hablar con ella. – Dije y Calvin asintió, —Será la fiesta de compromiso de Hailee y Austin— continué diciendo hasta que me interrumpió

—¿Hailee y Austin se casan?— me miró sorprendido

—Sí, lo sé... es increíble. Pero el punto, es que estarás en la lista de invitados— dije sugestivamente

—¿Lo estaré?—

—Por supuesto, le diré a Hailee que te incluya. Ahí verás a Taylor, y podrás hablar con ella, ¿Qué te parece?—

—No puedo esperar a que sea fin de semana— sonrió, frotando sus manos con ansias 

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Hola... es extraño publicar este día, pero hasta yo misma estoy ansiosa de que Taylor y Calvin solucionen todo ese horrible malentendido. 

¿Que les pareció el capitulo? ¿Creen que realmente, Ellie salvó el día?

Besos, 

-LinaD

ps. Yo tampoco puedo esperar al fin de semana para poder ver que pasa en la fiesta 

Mine (TAYVIN) 2da temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora