SAVE ME || Park Jimin

15

"No consta en decir que si
Es de sangre, es tu familia,
Familia son aquellos que están
en las buenas, y en las malas"
-Nre_why

-¿Mamá?¿Papá?.-lágrima, ellas fueron más fuerte que yo, salieron ante la impotencia de no poder hacer algo, era extraño, volver a verlos después de tanto tiempo, era una sensación, que me demostró lo bien que pude llegar a estar si ellos, con tan solo vez la cara de asco y repugnancia que ponían al verme; me destrozaba, me hacía mierda. Habiendo tantas cafeterías en Seúl, ¿justo casualidad de esta? ¿que hacían acá? De enserio; si no fuera por mi fuerte, mis amigos, yo ya no existiría.

-¿QUÉ MIERDA HACES ACÁ? ¿SÓLO SABES DECIR ESO?.- asco y desprecio deesbordaban por sus ojos.-¿Tuviste que vender tu cuerpo no? 

-¿Cómo pueden pensar eso de mi? ¡viví con ustedes! ¿y piensan que yo me vendi? O ¿por que creen que estoy haciendo doble turno?.-el nudo en mi garganta no me deja hablar bien, el mundo se me iba a caer encima.

-Eres una fracasada, ni tiempo a los estudios debes de tener, de seguro viven en una pusilga, eres un asco, no vas a lograr nada, decepción para nosotros que somos tus padres, decepción para todos los que te rodean, seguí fracasando, pudrite en ti misma. Nunca vas a lograr nada.

Allí mismo,  se levantaron, pasaron de mi, caí en el piso, derramando lágrimas,  llamando la atención de todos los que estaban allí, más de uno poniendo cara de asco ante ese comportamiento mío. Limpié mis lágrimas pase por el mostrador, deje mi delantal; y me fui,  sin decir nada. Quería llorar, sin que nadie me vea, sin que nadie sepa de este momento tan vergonzoso, quería correr y escapar de todo aquello,  pero aunque corra, jamás podré escapar de aquel dolor; el estaba dentro de mi corazón. Corrí y corrí, hasta llegar a esa inmensa plaza donde daba al mar, aquella solitaria pero hermosa plaza, aquella plaza donde tengo una conexión extraña. Esa plaza, tan especial, y aun saber el por qué de lo especial. Mis pasos fueron directo al puente, para sentarme bien al borde. Mis lágrimas caían y caían, esa escena pasaba y pasaba a cada rato, cada palabra que dijo mi padre, retumbaban en mi cabeza, haciendo peor aún. Hacía frío, y yo seguía llorando, mi cara ya estaba dura por las lágrimas secas, solo sabia pensar que tan miserable era como para que tus padres piensen que vendes tu cuerpo para poder avanzar, sin saber las cosas que pasé, las veces que he pasado hambre, frío, todo por no tener los recursos que hoy en día puedo llegar a tener. Mis lágrimas ya pararon, no habían más, sequé los restos de agua salada que quedaron en mi rostro, me quede un rato allí para seguir observando las pequeñas olas, se chocaban entre ellas, el ruido me relajaba, me hacía bien. Junte fuerzas y me dirigí hacia mi casa. Como siempre observaba las vitrinas de los locales, siempre había ropa bonita, muy mi estilo, pero el presupuesto no me da, por lo cual, tengo que seguir pasando de vidrieras, llego a mi casa, me saco los zapatos y dejo las llaves debajo de la alfombra como me dijo Jimin. De ahí, me encierro en mi pieza. Me tapo acomodo mis almohadas, y prendo mi teléfono. Nada interesante,  no soy una persona sociable como para poder estar hablando con alguien. Sin embargo, me llego un mensaje.

-Hyen, ¿por que saliste corriendo del trabajo? ¿paso algo?

Era Hoseok, ¿como se entero?

-Nada Hoseok, nada, gracias igual por preocuparte en querer saber♡

-Eso yo no me lo creo, me voy a escapar del trabajo y me contas que paso.

-¡Hoseok! ¡quédate ahi!

-En 5 minutos llego.

Y contados a reloj, ahí estaba Hoseok tocando el timbre de el apartamento.
Al entrar deja sus zapatos, me ve y me abraza. No pude contener las lágrimas, hoy es un día muy débil para mi. Empecé a llorar en su pecho. No paraba de cuestionarme lo miserable que soy, el cuanto me odio, en cuan inservible e inútil soy, lo poco que aprovecho y valoro las cosas, darme cuenta en ese mismo instante que soy una porquería de persona.  Hoseok, solo disponía a abrazarme mientras acariciaba mi pelo, como agradezco tenerlo de amigo, de mejor amigo. Mi llanto ya pudo calmarse, y el nudo en la garganta desapareció. Nos sentamos en el sillón, y ahí fue como le conté todo lo que me paso, cada mínimo detalle, yo se lo conté. También el saco el tema del amor, y no me quedo de otra que contarle, es mi mejor amigo, desde que lo conozco siempre me apoyo, y sé perfectamente que no puedo desconfiar en él, no podía esconderle eso. El también me contó cosas sobre él, y así fue como pasaron las horas, parecía que eramos el psicólogo del otro y ahí me dí cuenta que el era como un hermano mayor, o mejor que un hermano. Cayó la noche, mañana teníamos colegio y trabajo de ambos turnos. Hoseok se despidió de mi, y yo solo me recosté y me dediqué a dormir.

Capítulo choto eh :'b