Addicted

Capítulo 3: Necesito Más

Llegué antes de lo acordado con Erik, pero estaba anciosa por fumar de nuevo.
Toqué a la puerta varias veces y nadie respondía del otro lado y en mi mente se generaron dos opciones: Estaba dormido y con el sueño más pesado que un muerto o no estaba. No estaba muy segura de por cual opción guiarme, asi que me senté recargada en la puerta, esperando ansiosa la hora de encontrarme con él.
Me empezaron a doler los dedos, miré hacia abajo y parece que había estado rasguñando el suelo con mis uñas inconsientemente. Algunas tenían un poco de sangre, parece que mi ansiedad era mala. Así que para evitar cualquier otro daño, tome mi sueter entre las manos y lo presione fuerte entre mis manos.

-¿Cuánto tiempo llevas aquí, Danielle?

Levanté mi vista de golpe, y lo vi. Me paré lo más rápido que pude y lo abracé fuerte.

-¡Erik! Al fin llegas, tengo mucho tiempo esperando...
-Eso veo... vamos dentro, ¿quieres?

Asentí y el abrio su cuarto/departamento dejandome pasar. Inmediatamente me senté en la cama y lo miré atenta.

-¿Porque tardaste tanto?

Estuve esperando un largo rato, merecía una explicación.

-Disculpa mamá, no era mi intención llegar a la hora que dijiste y no antes... -rió un poco
-Basta de juegos Erik -dije molesta- ¿Traes más, o no?

Asintió pero no me dio nada.

-¿Qué esperas Erik? ¡dame!
-Danielle... ¿estas segura? -dijo serio- es la segunda dosis del día...
-No me importa, ¡Necesito más!

Me miro expectante, pero no dijo nada en un rato. Esto debía ser una locura, estaba con un tipo que conocí ayer, me ofrecio drogas y las acepte. Y hoy le estoy pidiendo una segunda ración como una adicta, seguro pensaba que era una demente.

-Bien, ¿traes dinero?. -dijo por fin
-Ocho dólares, ¿quieres darme más, por favor? ¡Lo necesito!

Negó con la cabeza, me tomo la mano y me guió a la mesa, uno frente al otro.

-Dani... ¿si puedo llamarte Dani, cierto?

Se sentía tan bien, el era un lindo hasta parecía que me quería cuidar. Asi que asentí, y podría jurar que me sonroje un poco.

-Dani, hoy no traigo lo mismo de ayer y esta mañana... Pero te aseguro que esto tambien te va a gustar
-Esta bien, ¿qué es?
-Cocaína

Saco una bolsa pequeña de plástico con polvo blanco.

-¿Cuánto...? ¿Cómo...?
-Es más económico que la marihuana, cinco dólares... Esto se ingiere por la nariz

Agarro un poco del polvo a la bolsita y lo puso en su uña del dedo meñique y lo metió en su nariz. Luego sorbio fuerte por ella y saco su dedo limpio de cualquier polvo.

-Así... -sonrió- tu turno, princesa

Asentí, y tome un poco de polvo en mi uña y lo meti en mi nariz, sorbí fuerte. Sentí que me ahogaba y comencé a toser.

-Ya, tranquila... ya esta

Erik me abrazó. Y de pronto mis músculos se empezaron. a relajar en sus brazos y su agarre se hizo más fuerte.

-¿Estás bien? - me dijo
-Mmhh... si... Necesito más

Me fue soltando poco a poco hasta que me dejo caer sobre la silla. Tomé otra porción igual en la uña y la tome por la nariz. Esta vez fue mejor, no tenía sensación de ahogarme, me sentí bien.

Adios mamá, adios Steve, adios mundo... vayanse todos a la mierda. Soy libre, por fin...

-Ya estuvo, no más Dani -Erik me tomo del brazo
-¿Qué haces, Erik? -dije apenas audible

Tiro de mi brazo y me puso en pie, sentí que mi suelo se movía y creí que caería pero no, Erik me tomo fuerte por la cintura y me levantó del suelo, me cargó asi hasta la cama. ¡¿Qué?! ¡Hasta la cama! ¿Qué me quiere hacer?

-Será mejor que duermas, Dani -me tapó- descansa, luego hablaremos
-Gracias, Erik - dije, espero me haya entendido

Me quede mirandolo, yo estaba acostada con la mirada en un punto fijo, perdida. Y él, estaba sentado a mis pies y me observaba, ¿Qué pensara de mi? ¿Qué soy una adicta?
Pues en parte lo soy, en dos días estoy dependiendo de las drogas, debo dejar este vicio que acaba de iniciar.

*

Desperté y Erik ya no estaba a mis pies, recorri con la mirada el lugar y estaba sentado frente a la mesa.

-¿Erik? -se giro a verme- ¿Qué hora es?
-Poco más de las ocho, ¿Por?
-¡Diablos! Mamá va a matarme

Pero en un momento deje de pensar en mamá y toda esa basura, miré a Erik.

-¿Me puedes acompañar a casa? No quiero ir sola por las calles
-De acuerdo

Caminamos hasta la puerta, él me llevo a casa, hubo silencio durante todo el camino. No sabía si sacar el tema de cómo y bajo que circunstancias nos conicimos, aunque he de aceptar que no fue la manera más correcta.
Llegamos a casa y nos detuvimos frente a la puerta.

-Muchas gracias por todo, Erik
-No hay de que, Dani
Dicho esto, se giro y dio paso para irse.

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Todos los comentarios son válidos, tanto como críticas como opiniones, les agradecería bastante si me dicen que piensan de esta nove :D