Addicted

Capítulo 16: Encuentro

El tiempo que estuve esperando a Erik se me hizo una eternidad, el solo recordar lo ocurrido con Joe, me recordaba a papá y me daba más repulsión que cualquier otra cosa, comencé a sentir arcadas en mi cuerpo y me puse en cuatro para vomitar.

Narra Erik

Cuando llegamos a la escuela, estaba cerrada lo cual era demasiado lógico puesto que eran más de las cuatro, casi las cinco. Habíamos pasado más de dos horas buscando a Danielle y justo hace un par de minutos sabíamos donde estaba.
Miré el muro, no era muy alto y a un costado de la escuela había un árbol. Escale sin problemas y una vez que estuve lo suficientemente alto, salté al muro, caminé por el hasta que quede en dirección a la escuela.

-Esperenme aquí, no tardo

Fue lo último que dije antes de saltar hacia dentro de la escuela, rodé un poco y flexioné las rodillas para disminuir el impacto. Una vez que me recuperé del golpe, comencé a caminar y noté que cojeaba un poco, pero poco a poco el dolor fue cediendo y comencé a correr.
Fui a los baños, que era lo más lógico y donde creí que la encontraría, era una escuela pequeña, no tardaría mucho en encontrarla, o eso esperaba.

Corrí por toda la escuela, salón por salón, oficina por oficina y no había rastros de Danielle, comenzaba a ponerme nervioso y la sangre comenzaba a hervir de nuevo.

Narra Danielle

Estaba intranquila, eran poco menos de las seis y comenzaba a tener frío, trate de alcanzar el resto de mi ropa, pero cada movimiento parecía más insoportable. Mi móvil comenzó a sonar:

-¡Princesa! Estoy en la escuela, ¿En que parte estas?
-Erik... -susurré y lloré de nuevo al escuchar su voz- al fondo del patio, tras los salones
-No te muevas, voy para alla

Escuche un gruñido de su garganta y luego colgó, podría apostar que él daría lo que fuera por tener a Joe enfrente y golpearlo hasta morir, al contrario de mi que nunca más lo quería volver a ver.
Seguía hecha ovillo contra la pared y el cesto intentando darme calor, escuche ruido y me tensé de inmediato. Las lágrimas bañaban mis mejillas con más ahínco y después escuche mi nombre:

-¡Danielle! ¡Dani! ¿Dónde estas?
-Erik... -susurré, pero el escucho y corrió hasta mi
-Dani, Dani, Dani... Mi princesa

Lloré de nuevo y me llevó contra su pecho, hice una mueca de dolor y él se tensó.

-Prometo que nada volvera a pasarte -besó mi cabeza- Vamos... Ponté de pie

Al momento que mis dos pies pisaron firme, de nuevo sentí arcadas y me aventé al basurero para desechar todo ahí, me sentía fatal, mi cabeza daba vueltas y las lágrimas no ayudaban.
Erik se acerco a mi con mi ropa, que estaba rota de todos lados, pero era mejor que salir semi desnuda a la calle.
Me ayudó a vestirme, cada movimiento era insoportable, asi que me recargué contra la pared.

-¿Estás bien? ¿Que te duele?

Negué con la cabeza, y lloré de nuevo. Erik me acorralo entre su cuerpo y la pared mientras me abrazaba, me sostenía. Me proporcino calor, y poco después paso su brazo bajo mis rodillas y en mis hombros para salir conmigo en brazos.
Una vez en la entrada, abrió la puerta y no se molesto en cerrarla. Ahí estaban Steve y Brad.

-¡Danielle! -Steve se me abalanzó
-Au... -me quejé- no...

No tenía fuerzas ni para hablar, Erik me cargó de nuevo y caminaron hasta el cuarto.
Me sentaron frente a la mesa y Erik no soltaba mi mano, Steve veía a la mesa, no decía nada.

-Me llevaré a tu hermana conmigo, ¿Vienes?
-Yo... no, será mejor que este contigo yo... no sería muy buena compañía -respondió mi hermano
-Bien

Erik ya no dijo nada más, me volvió a cargar por tercera vez hasta su coche que estaba en la calle de siempre. Me puso su chaqueta y me metió al auto. Condujo en silencio y al llegar al imponente edificio, bajo mientras yo comenzaba a llorar de nuevo. 
Una vez fuera de su auto, Erik se detuvo en seco.

-¿Estas... sangrando?

Giré sobre sus brazos y vi una mancha de sangre en el asiento del copiloto.

-No es... nada, supongo que es mi periodo - dije para convencerme más a mi que a él
-Vamos al doctor

Me miró incredulo, por todo el dolor que sentía era más que obvio que no era un simple periodo, si tenía suerte podría ser mi cuerpo reaccionando a la antigua agresión y yo rezaba en silencio para que fuese eso.

-Erik... no quiero ir al doctor, solo quiero dormir -dije sollozando

Subimos a su lujoso departamento y Erik tenía la mirada vacía.

-Me daré un baño... ¿puedo?
-Ni lo preguntes. Adelante

Me levanté del sillón donde Erik me había recostado, respiré profundo y me levanté. Me sostuve del respaldo del sillón para caminar, trataba de no hacer movimientos bruscos, aun me dolía horrible.

-¿Te llevó? -escuché la voz de Erik y negué. Cuando por fin llegué al baño, cerré la puerta y no me molesté en siquiera poner el seguro, cada movimiento y fuerza que hacía era desgaste, no me sentía bien.

Comencé a desvestirme frente al espejo, cada prenda que me quitaba era una lágrima más, me recordaba a Joe haciendome suya por más resistencia que puse. Mi cara lucía pálida, un pequeño raspón del golpe que Joe me había dado, la cara llena de tierra, sucia. Lágrimas en todo el rostro, despeinada y horrible, no había otra manera de describirme.
Abrí la llave del agua, el baño empezó a llenarse de vapor. Fui temblando y abrazandome a mi misma hasta estar bajo el agua, las baldosas del piso estaban heladas y a la vez que el agua me tocó comence a llorar. Recargué mi espalda en la pared y me deslicé hasta el piso. Abracé mis piernas y dejé que el agua se llevará todo de mi. Vi el agua que yacía bajo de mi y aun había rastro de sangre, me lleve la mano en la entrepierna y un dolor se apoderó de mi y me queje.
No sé que tan alto fue mi quejido, pero Erik irrumpió en el cuarto de baño apenas me escucho, tomo mi rostro entre sus manos.

-¿Estás bien? -negué con la cabeza y mi abrazó

El agua cayó sobre su ropa, mojandolo completamente, paso su mano por mi cabello, obviamente se dio cuenta de que no había siquiera tomado el shampoo, y el me ayudó a concluir mi ducha.
Una vez terminado, me ayudo a ponerme de pie, trate de cubrir mi desnudez con las manos, pero Erik pareció no notarlo, lo que agradecí, me envolvió con una toalla y después me ayudo a vestirme con una de sus camisas. Una vez en la cama, se desvistió y entro a la cama para abrazarme y después caer en un profundo sueño.

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Chicas, aquí el capítulo de la semana esperando que les guste muchisímo :D

Mil gracias a todas las lindas lectoras que me dejan sus comentarios respecto a la historia, las amo!
Beibis no quiero lectoras fantasma, porfa comenten o voten y no olviden compartir esta historia con sus amigos n.n

NOTA: Lean esta novela --> http://www.wattpad.com/story/20654285-por-encima-del-cielo <-- esta preciosa ;)