Capítulo 28

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***Elsa***

Para esta mañana, Jackson no se presentó al desayuno.

Le había dejado un mensaje de texto en el que decía si quería hablar antes del desayuno, podía pasar a casa para hablar y tranquilizar las cosas, pero no sucedió.

El rato con mi familia fue muy tranquilo, no hubo la necesidad de salir a lugares públicos, Merida me acompañó hasta el hotel, donde nos dieron una mesa en su restaurante.

Ahora cargaba con dos bolsos, uno míos y uno llamado pañalera.

-¿Y el baby shower? Siempre hay uno, Anna, no me digas que no pensaron en hacerle uno – Le dijo mi madre al beber de un jugo verde.

-Lo planeábamos, iba a ser sorpresa – Dijo con un pedazo de pan tostado con mantequilla – Pero los tiempos, las situaciones, todo no lo arreglamos del todo.

-Tu madre y yo prometemos regalarte la cuna – Mi padre tomó mi mano con cariño mientras me sonreía de labios – Eso y la carriola.

-Oh papá no te angusties.......

-Claro que lo hago, son mi familia, y sinceramente no veo mucho apoyo del padre de........

-Ambos solucionaremos esto –Le interrumpo para no entrar en detalles – Ah estado aún adolorido de su accidente.

Después de cortar con la conversación el día se pasó en regresar a casa, cuidar de mi bebé y revisar constantemente el teléfono celular para ver alguna señal de Jack, cosa que no se dio hoy, ni al día siguiente, ni a la semana.

Así hasta recorrer un mes sin señales de él. Hiccup venía a casa y lo único que me contestaba para saber del peliblanco era lo mismo.

Hiccup apenas lo veía en el día, salía, llegaba muy tarde y muy temprano se retiraba.

Era inevitable llorar por él, cosa que era malo, me hacía daño a mí y a mi hija cuando la amamantaba, nunca creí que la depresión post parto fuera tan fuerte.

Hoy no podía permitir eso, no en medio del jardín de mi hogar llena de nuestros amigos compartiendo de pasteles, comidas, dulces y música.

-Que linda decoración Anna y Mer –Dije mirando el cartel de "Feliz baby shower Joatzira".

-Nada que agradecer – Dijo Mer con mi bebé en brazos – Te la paso, debo ir con Hiccup, está esperando en la puerta seguro.

Tomo a Jatzira en brazos, admiro sus ojos cerrados, su blanca piel y lo delicado que son sus dedos.

Hoy viste con un mameluco azul claro con unos ligeros impresión de brillos plateados.

-Es hora de que la mamá presente comience a abrir regalos –Anuncia Anna con emoción mientras me dirige a un asiento en medio del césped a un lado de la mesa de regalos.

-¿Puedo?

Me giro y veo a Tadashi quien extiende los brazos para cargar a mi hija, a sus espaldas está la chida de cabellos negros y mechones morados con una tierna sonrisa por ver a mi bebé.

-Claro que sí.

Se la paso con cuidado y antes de dar un paso atrás me murmura.

-Creo que no tendrás problemas al descubrir mi regalo, sé que le servirá en un futuro.

-Ya me imagino que puede ser – Le comento.

La dinámica surgió en que Anna me pasaba los regalos mientras mis padres se encargaban de aplaudir con mis amigos, con Kristoff y mi jefa del restaurante.

Amor Inesperado. Jelsa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora