Proyecto legacy: Una Pesadilla Virtual.

El Despertar

Capítulo 29.

¿No estoy muerto?. Estoy parado en la torre del mundo 100, he visto como todos los jugadores han abandonado el juego de Legacy, me encuentro mirando hacia el mar, la torre se esta desmoronando bajo mis pies pero no puedo moverme, entonces una brisa soplo y una persona estaba parada a lado mío.

-Hermoso, o al menos eso pienso yo- dijo la voz de Aldoux.

-Creo que lo que empezó como un sueño, termino como una horrible pesadilla- dije sin voltear y con voz calmada.

-Las cosas fueron diferentes, Nikolai se hizo de todo el crédito, creo que ese fue mi motivo para hacerme notar- dijo-, ahora todos los servidores están siendo desconectados.

-Me imagino que tu odio realmente no era hacia nosotros, sino hacia tu jefe, el cual tomo el crédito por tu creación, pero aunque fuese así, no tenias razón de hacerlo- dije.

-Tienes razón- dijo-, es por eso que quiero que me hagas un favor…

-No puedo, ¿lo olvidaste? Hiciste que mi hermana me asesinara- dije con cierto recelo.

-Bueno, veras, hay un paquete a lado de tu cama, yo mismo lo puse ahí, ve a esa dirección, y has que mi creación vuelva- dijo.

Las cosas se tornaron borrosas, y una luz cegadora invadió mi campo visual….

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Comencé a abrir mis ojos con dificultad, comencé a ver poco a poco, recuperando mi visión, sin embargo veía bastante borroso, aunque lograba distinguir un cuarto de hospital, y sentía el calor de una mano sosteniéndome a mi lado, gire lentamente mi cabeza y la vi…era Payday, había salido, quería levantarme y abrazarla, sin embargo no tenía las fuerzas necesarias para levantarme. Levante una mano y veía mis huesos resaltando sobre mi reseca y poco nutrida piel, Payday se veía mucho mejor de lo que seguramente yo me veía, comencé a mover mis manos para quitarme el caso pero ella se apresuró a ayudarme.

-Espera- dijo con una voz dulce-, déjame ayudarte.

-Gra…- comencé pero no podía hablar con mucha claridad-. Gracias.

-No te preocupes, lo hago con gusto- dijo mientras me retiraba el casco de la cabeza y me sonreía.

-No te veo- dije con un tono irónico-. Necesito mis lentes.

-Claro, espera- dijo mientras unas pequeñas lagrimas se derramaban sobre su mejilla.

-Vaya…- dije mientras comenzaba a ver con más claridad-, eres hermosa.

-Vamos, apenas estas despertando y ya dices una sarta de estupideces- dijo con una sonrisa.

-No, es una estupidez, realmente me pareces hermosa, dentro y fuera del juego me pareces hermosa- dije con una sonrisa.

-¿Quieres verte?- dijo con emoción.

-Suena prometedor- dije con una sonrisa.

Acerco un espejo que seguramente había traído desde su casa, coloco el espejo frente a mí, después de ayudarme a ponerme de pie, llevaba las típicas batas de hospital, desde la cual se asomaban mis esqueléticas piernas, mi torso extremadamente flaco,  mi cabello largo cayendo a la mitad de mi pecho, mis brazos y manos esqueléticos, mi cara completamente demacrada y los ojos hundidos en unas horribles ojeras, era un muerto viviente.

-Parezco Zombie- dije con una sonrisa.

-No puedo creer que esto te de risa- dijo Payday con una sonrisa irónica.

-Dime tu verdadero nombre, seguramente ya sabes el mío, pero te lo diré de todas maneras- dije y voltee ligeramente mi cabeza-. Soy Maxwell Cambelt.

-Mucho gusto Max- dijo con elegancia-. Yo soy Fernanda Day.

-Un placer Fer- dije con una amplia sonrisa.

-Pensé que habías muerto- dijo tornándose más seria.

-Yo pensé lo mismo, pero al parecer no- dije y me acerque a mi cama, había una caja de metal con el antiguo escudo de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas.

-La prensa nos busca, a ti, a mí, a Green, a Sara, y a todos los que estábamos al frente siempre- dijo-, Nanda ha alejado a todos del hospital. Al parecer quieren hacernos mil entrevistas, sin embargo vino el presidente de la compañía Legend´s a entregarnos un boleto de avión a Rusia, todo esta pagado y podremos estar varios días ahí.

-Interesante- dije mientras abría lentamente la caja de metal.

-¿Qué es?- preguntó Fer con mucha curiosidad.

-Es una llave, un código, y una dirección, creo que tenemos que ir a Rusia- dije con una sonrisa.

-Claro que iremos- dijo Fer-, todos nuestros padres hablaron y acordaron en que fuéramos, dicen que es sumamente importante nuestra presencia en el edificio de la compañía.

-¿Cuándo volaremos?- pregunté.

-Dentro de una semana. Dicen que es para que todos nos recuperemos- dijo-, tendrás que comer demasiado para volver a ganar algo de peso, y también necesitas un corte de cabello urgente.

-Todo a su tiempo, ahora solo quiero esperar a que me den de alta y volver a casa- dije mientras volvía a sentarme nuevamente en la cama.

Estaba rodeado de regalos, por alguna razón tenía bastantes cosas a mi lado, con diferentes fechas claro está, la habitación era bastante grande, con bastantes comodidades, seguramente estaba en un hospital bastante caro, seguramente si yo había salido, todos los demás lo habían hecho.

-¿Todos salieron?- pregunté de repente.

-Solo los que murieron a partir del mundo 90, podían salir- dijo Fer sentándose a mi lado.

-¿Qué día es hoy?- pregunté confundido.

-Es el 21 de noviembre del 2025- dijo Fer con una sonrisa.

Entonces mi puerta se abrió lentamente y entraron tres personas a la habitación…

-Hola, un gusto volver a verte- dijo Nanda.

-Al parecer eres difícil de matar, eh- dijo Green con una sonrisa.

-Jamás vas a morir, después de todo aun para mí eres una caja de sorpresas- dijo Karou con una sonrisa nostálgica.

-Max, todos te conocen, eres una estrella, tu y Sara lo son- dijo Zeke entrando por la puerta rápidamente.

Todos se veían más sanos, excepto Sara y yo, sin embargo estábamos todos vivos y eso era lo que importaba, que a pesar de todo lo que pasamos, aún así sobrevivimos. Y ahora solo quedaba una cosa por hacer, viajar a Rusia.