Es que la remodelé

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Estamos con la Gabi en la mesa comiendo súper campantes, mis papás siempre dejan una mesa para los adultos y otra para los "niños", en este caso nosotros.

La wea es terrible de incómoda porque el Lalo no sabe nada de lo qué pasó con el Alfredo, onda nada de nada, no sabe que me gustó y todo lo qué pasó últimamente, por lo que el saco de pelotas hace como si nada pasara y como si fuéramos eternos amigos, y prefiero dejarlo así ya que es el cuñado de mi hermano y no quiero que tenga problemas.

Comemos en silencio y como es una mesa redonda estoy yo, a mi derecha la Gabi, a mi izquierda el Lalo y al frente el Alfredo. La Gabi hermosa se las arregló para que nos sentáramos así.

-Ya po, cuenten algo los weones callados. - Dice el Lalo pegándome a mi y al Alfredo en el hombro.

-No tengo nada que contar. - Dice el Alfredo.

Yo me mantengo en silencio.

-Cami, ¿Me acompañas arriba? Quiero ver tu pieza. - Me dice la Gabi, ay la amo.

-Pero si ya conoces su pieza. - Dice el Lalo.

-Es que la remodelé. - Le digo al Lalo y subo con la Gabi.

En mi pieza hablamos de weas y al cabo de unos veinte minutos llegan los mens.

Con la Gabi seguimos en mi pieza pero con la puerta abierta y los cabros están jugando en la play, justo afuera de la puerta.

-Weona, muéstrame tu pololo po.

-Ya. - Digo entusiasmada. - Deja preguntarle si puede hacer video llamada, pa que lo conozcas.

-Ya, espero que sea mino, no me decepciones.

-Oh amiga, te va a encantar, mi hermano es feo al lado de el.

-Cuidadito con el Lalo. - Me dice la Gabi entrecerrando los ojos.

-Ya oh. - Me río.

Voy a los chats y encuentro al que tengo fijado: Mi Benjurri.

Yo: Amor, puedes hacer videollamada?

Dejo el celular de lado mientras espero que responda.

-¿Le preguntaste? - Me dice la Gabi.

-Sip, pero está donde su awelo así que no se si responda. - En eso suena una notificación.

Benjurri: Si, dale no más <3

La Gabi se asoma y mira mi celular.

-Culiao tierno, el Lalo me manda puras lunitas. - Me dice y me cago de la risa.

Le marco al Benja y en menos de tres tonos contesta y pongo el celular apuntando a mi y a la Gabi.

-Hola bebé, hola...

-Gabi, soy la polola del Lalo y hermana del Alfredo. - Se ríe la Gabi.

-Ah... - El Benja se rasca la nuca incómodo. - Hablando de el... ¿No ha pasado nada?

-No, tranqui, la Gabi me cuida.

-Ya muy bien. - Nos reímos.

(...)

Luego de como una hora de webiar con el Benja su awelo lo reta por hacer ruido y reírse fuerte y lo obliga a apagar el celular.

Puta weon, yo quería hablar con mi boifren.

-Weona, te envidio, culiao mino. - Me dice la Gabi.

-Lo sé weon, lo amo. - Le digo levantando las cejas.

-Como no amarlo. - Me levanta las cejas y me río.

-Ya pero es mío, tu teni al homunculo del Lalo. - La Gabi se ríe como weona.

-¡Te escuché ratona culia! Vengan a jugar, les apuesto que no nos ganan. - Dice el Lalo.

-No juego con Mandriles. - Le digo más para el Alfredo.

-Ya po, juguemos Cami, vai a ver que les ganamos. - Me dice la Gabi.

-Ya po. - Levanto los hombros y me siento a jugar.

(...)

Ha pasado una hora, siete partidas, cinco de esas ganadas por mi y la Gabi, obviamente los mandriles están más choreados que la chucha.

-Una más, una más y les ganamos. - Dice el Lalo. Por una extraña razón el Alfredo no ha hablado mucho, y cuando hablaba solo era para idear estrategias con mi hermano.

-Go to wash. - Le dice la Gabi y se dan un beso, como mi hermano es súper discreto y respetuoso la agarra entera y si, aunque suene raro se van a su pieza, culiaos conejos weon, luego me reta por darle un beso al Benja.

Me quedo sola con el Alfredo en la sala de estar y esto se pone incómodo. Weon, por muchas cagas que se haya mandado el fue mi mejor amigo cuando era cabra chica, y luego de todo lo qué pasó entre nosotros hace unos años, no lo volví a ver. Nuestro reencuentro no fue el más indicado que digamos.

Comienzo a pararme del sillón y me toma el brazo rápidamente empujándome para que me siente y quedo frente a el. Me suelto de su mano rápidamente.

-Suéltame weon. - Me intento parar de nuevo.

-Espera Cami, quiero hablar contigo, en serio en buena. - Lo miro a los ojos y puta, ¿Qué puede pasar? Nada weon, si vamos a hablar.

-Dime rápido, no tengo intenciones de hablar contigo. - Digo seria.

-Ya em... puta no pensé que me dirías que si. - Ruedo los ojos.

-Apúrate porfa. - Lo miro mal, se que sueno pesada pero con su historial culiao no tengo intenciones de ser simpática.

-Primero que todo, quería pedirte disculpas, se que me pasé con lo que hice y que le falté el respeto a tu relación y a tu pololo, no se que wea me pasó pero fue un impulso culiao idiota.

-No si caché. - Le digo en cuanto guarda silencio.

-Pero déjame terminar po. - Me mira y puta, igual se ve sincero.

-Ya oh, dale.

-Nada po, encuentro que lo que hice estuvo mal y quería pedirle perdón a tu pololo, no sé si podrías hacer que nos juntemos porque siento que es mejor en persona. - Siento que algo trama este culiao.

-Ahí veo. - Me cruzo de brazos. - ¿Me puedes dar un buen motivo por el que haz hecho todo este show?

-¿Querí la verdad? - Asiento. - Estoy enamorado de ti, Cami.

¡PUTA LA WEA!

¡Puta la wea!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora