Capitulo veinticinco

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-Adam rejalate- dijo Elizabeth-El solo vino a ver al niño-

-¿Tu le dijiste?-

-Claro que no, mi mamá se lo conto-

Adam estaba furioso, Elizabeth lo podía notar

-Ahora mismo se irá- Empezó a caminar en dirección a el pero Elizabeth lo detuvo.

-No quiero que inicies un escandalo-

Adam no me hizo caso y fue hacia donde estaba Cameron con el bebé

-Tu maldito infeliz- exclamo el novio de Elizabeth- Quiero que te vayas en este mismo instante de aqui-

-Y tu quien mierda de crees para darme ordenes- lo desafio cameron

Sara agarro a su hija

-No quiero que mi hija escuche esas palabras, y menos en una iglesia- dijo y se retiro de ahi.

-Soy el padre de el niño- dijo con la cabeza en alto, sintiéndose orgulloso.

-Acá el único papá de jason soy yo- exclamo Cameron

-Ya basta- dijo Steven- No van a llegar a algún lado discutiendo así, y menos delante de la criatura-

Elizabeth agarro al pequeño y salio de la iglesia furiosa. Adam salio atrás de ella

- Elizabeth, bebe lo siento ¿si?- dijo caminado tras ella pero no se detenía- Amor para por favor quiero hablar-

Ella paro de caminar y se dio la vuelta para verlo a la cara.

-No se que me paso, enserio, soy un tonto- dijo arrepentido

-Echaste a perder el bautismo de Jason- dijo Elizabeth

Adam miro la cara del pequeño que dormía en brazos de su novia

-No lo eche a perder, todavía hay tiempo- Adam tomo con ambas manos las mejillas de Elizabeth- Déjame enmendar este error-

Suspiro y miro a los ojos a Adam, se veía realmente arrepentido. En ese momento apareció la mamá de ella

-Cariño volvamos adentro, ya salio el padre- dijo su madre

Una vez adentro, estaban todos reunidos. Los padrinos agarraron al pequeño mientras que el padre le mojaba su cabello con el agua bendita.

Cameron estaba a un costado viendo como Adam abrazaba a la que alguna vez fue su esposa. La extrañaba, realmente lo hacia, pero sabia que todo estaba perdido.

Nunca volvería a estar con ella.

-Te ves muy pensativo- dijo Harry al lado de el.

-Estaba pensando en todo lo que perdi, por una simple infidelidad-

Sara le paso el bebé a Adam. Cameron observo ese momento con tanta tristeza, el tendria que estar en ese lugar.

-Yo tendria que estar ahi- dijo -Lo eche a perder todo

-Claro que no- djio harry- Todavia hay tiempo para cambiar, jason es apenas un bebe de dos meses-

-Si, pero nunca mas volvere a estar con Elizabeth-

-Eso no significa que no puedas estar con tu hijo-

Luego de terminar el bautismo todos se fueron a festejar a un restaurante de la zona, excepto Cameron y Harry que se fueron apenas termino.

-Hoy fue un muy lindo dia- dijo Adam luego de llegar a casa despues de ir al restaurante- Excepto por una cosa...- dijo sacandose la chaqueta.

-Shh no quiero hablar de eso- dijo Elizabeth- Lo importante es que bautizamos a este pequeño-

Los dos miraron en la cuna donde dormia el pequeño Jason.

-Ahora que esta durmiendo podemos aprovechar...- dijo Adam acercandose a Elizabeth. La tomo de la cintura y comenzo a besarle el cuello.

-Adam...- susurró Elizabeth.

El separó sus labios de su cuello y la miró a los ojos.

-Déjame compensarte- susurró -Dejame compensarte por el papelón de hoy -

Elizabeth lo besó, Adam la tomo entre sus brazos, en ningún momento separaron sus labios .
El se dirigió a su habitación, la puso sobre la cama y se puso encima, con cuidado para no lastimarla.

-Te amo- dijo Adam mientras le daba pequeños besos por toda la cara- Te amo demaciado-

Le quitó la camiseta a Elizabeth y la tiro por cualquier parte. Luego los pantalones y así, quedando en ropa interior. Adam la miró con tanto deseo.
Se quito su camisa y el pantalón, quedando solamente en boxer.

Besó los pechos de Elizabeth por encima de su sujetador y fue bajando hasta su ombligo.

-Adam- gemía Elizabeth

Subió y besó sus labios salvaje mente. Con sus manos desabrocho su sujetador dejando a la vista sus pechos.

-Eres tan hermosa- dijo.

Se sacó sus boxer y tambien las bragas de Elizabeth.
Adam entro lentamente en ella.
Elizabeth gimió y el también.

-Dios santo estas tan apretada- Dijo el dando una embestida.

Luego de unas tantas embestidas se corrieron los dos al mismo tiempo.

Elizabeth se acomodo entre los brazos de Adam y de apoco se fue durmiendo.









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