Capítulo 67 : Objetivo

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He revelado el nombre de mi madre, he dejado atrás a Guillermo Domínguez para siempre, ahora seré Guillermo Griffin, pero... esto no lo hago por simple capricho, tampoco por sentimentalismos...después de todo...no soy un imbécil, se perfectamente la situación en la que me encuentro, es momento de iniciar, lo primero es observa sus reacciones, tengo un talento especial que me permite analizar a las personas, un gesto, mirada, reacción de su cuerpo, velocidad al respirar, todo, me indica una razón, todo ocurre por un motivo, tengo una vista panorámica de esta masa de individuos entre periodistas, Maestros de esta Universidad, Alumnos antiguos y lo que ingresaran este año, nadie está libre de sospecha, eso incluye a quien tengo a mis espaldas, el director, lo observo de reojo, por lo visto, dentro de ellos, hay 74 posibles integrantes o colaboradores de El Renacer, mas no debo de ser evidente, solo los tendré en consideración, aunque también pueden ser nuevos posibles enemigos.

– No puedo creerlo, pero, eso explicaría el talento que ese chico ha demostrado, no es algo que pueda lograr cualquiera, es un Renacido y aun así, es el mejor Estudiante de este año y los anteriores. – Comenta una de las tantas periodistas.

– El hijo de la Diosa De Los Elementos...no sé cómo reaccionar, o, será que está mintiendo, pero los hechos dicen otra cosa, estoy confundido. – Es uno de los Estudiantes que ya ha ingresado a esta Universidad.

– ¿Cómo puede ser posible que nunca hallamos oído sobre la familia de la gran Diana Griffin?

– Ese chico, ha revelado algo de tal magnitud como si nada, ¿será consiente del peso de sus palabras?

Los comentarios se multiplican sin cesar, todos los nuevos Estudiantes no despegan la mirada de mí, algunos confundidos, otros temerosos, algunos me observan como si fuera un hipócrita, hay varios estudiantes de cursos mayores que me observan como un rival, alguien que ha venido a robarles su notoriedad, idiotas, ese no es precisamente mi objetivo, aunque es algo que necesito.

– ¡Zlator!

El director grita a viva voz, todo el mundo queda en silencio, se escucha un rugido el cual abarca kilómetros, un resplandor en los cielos lo indica, el Dragón dorado desciende a gran velocidad desde las alturas de la Universidad, el batir de sus alas crea corrientes de aire que destrozan árboles y praderas, llega al suelo provocando un sismo el cual remece todo el lugar, la tierra se levanta por su peso y la velocidad que mantenía.

– ¡GRUUUUUUUUAAAAAAHHH!

El Dragón ruge nuevamente, abre sus alas demostrando su imponente figura, varios quedan congelados por el miedo al ver a tal majestuoso y terrorífico Dragón, el desciende justo en frente mío, soy quien está más cerca de él, pero no me intimida en lo más absoluto, dado que comprendo el motivo del director al llamar a su Dragón, quiere comprobar mis palabras, si bien los Magos Reveladores pueden hacer esto, aun no llegan a las capacidades de un Dragón.

– Estudiante Guillermo, es cierto que tus resultados son abrumadores, pero has utilizado el nombre de uno de los magos más respetados de todos los tiempos, si mientes, serás castigado severamente por tal acto, de lo contrario, arrepiente en este instante y tu condena será menor.

El director esta colérico, lo observo por sobre mi hombro.

– No estoy mintiendo, ocupa de una vez a tu Dragón para comprobarlo. – Digo con un tono calmado.

– Zlator, revela si él está mintiendo, Guillermo... ¿eres realmente el hijo de la gran Diana Griffin, Diosa De Los Elementos, sí o no?

Todos los presentes están concentrados, el enorme Dragón dorado acerca sus filosos y relucientes dientes hacia mí, aun así, no me intimida, levanto la mirada y lo observo directo a sus ojos.

El Gran Reinicio Parte I : DespertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora